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 La ofensiva militar impulsada por Ariel Sharon y toda el ala derechista de su coalición gubernamental �lanzada el día después del atentado terrorista a los Estados Unidos� puede complicar los planes de George W. Bush para formar una coalición mundial antiterrorista. Israel realizó ayer ataques simultáneos por mar, aire y tierra contra posiciones palestinas en tres localidades de la franja de Gaza y varios campos de refugiados lo que, sumado a la cancelación que hizo el propio Sharon del encuentro que estaba previsto para hoy entre el líder palestino, Yasser Arafat, y el canciller israelí, Shimon Peres, aleja casi definitivamente la posibilidad de retomar las negociaciones por el alto el fuego. A la vez, Sharon fue tajante con Bush en su conversación telefónica de anoche: se opuso a toda costa a que Arafat y Siria integren la cruzada universal contra el saudita Bin Laden.
El ejército israelí bombardeó con helicópteros Apache y destruyó al menos seis posiciones de organismos de seguridad desde el norte hasta el sur de la franja de Gaza. Los ataques se produjeron en la ciudad de Gaza, las aldeas de Beit Janún y Beit Lahía, los campos de refugiados de Jan Yunes y de Nuseirat y la localidad de Rafah, contra la cual se dispararon misiles tierra�tierra. Hasta ahora, hubo veintitrés palestinos heridos y un muerto: un chico de 14 años alcanzado por las balas cuando el ejército abrió fuego en Jan Yunes contra los palestinos que les arrojaban piedras.
El estado de situación se agrava: la fuerte avanzada israelí de ayer terminó de clausurar las posibilidades de la cumbre Peres�Arafat, a la que anteayer Sharon suspendió con el argumento de que �sería darle un premio a un terrorista como Arafat�. Peres había intentado desde hace varias semanas �con la ayuda de la Unión Europea y de EE.UU.� arreglar una entrevista con Arafat para llegar a una tregua en la región. Ayer se reunió con Sharon en un último y fallido intento por convencerlo, en la granja que el primer ministro israelí tiene en el sur del país. Sin embargo, la televisión israelí lanzó como posibilidad que se realice una reunión tras el �Rosh Hashaná�, año nuevo judío, que se celebra el próximo martes y miércoles.
La decisión disparó críticas. El líder del partido liberal de izquierda Meretz, Yossi Sarid, respondió al gesto derechista de Sharon y exigió a Peres que abandone la coalición de gobierno si se mantiene la oposición a su encuentro con Arafat. Por otra parte, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Hubert Védrine, criticó el ataque contra las instalaciones palestinas y, según se informó desde la Cancillería francesa en París, mostró su preocupación por la cancelación de las negociaciones.
Mientras tanto, Arafat continúa las gestiones. Se reunió con el enviado especial ruso para Oriente Medio, André Vidovin, y con el enviado especial de la ONU a Oriente Medio, el noruego Terje Larsen, quien �tras la charla� informó que el presidente de la Autoridad Nacional Palestina se comprometió ante él a ordenar que los organismos de seguridad palestinos eviten todo acto violento y cumplan todos los acuerdos firmados con Israel. Arafat, después, hizo el gesto de respaldar su palabra: se reunió con los responsables de todos los organismos de seguridad palestinos y les �exigió que no den a Israel excusas para continuar con sus agresiones�. Además conversó telefónicamente con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, y con el ministro alemán de Asuntos Exteriores, Joschka Fischer. Y, de paso, no dejó de advertir que el objetivo de la avanzada militar israelí de ayer tuvo el objetivo de impedir su cita con Peres. Su portavoz, Nabil Abu Rudaina, estimó que �el objetivo de la escalada militar israelí contra los palestinos es destruir todos los esfuerzos internacionales para calmar la situación� y volvió a achacarle a Sharon el oportunismo de los ataques.
Claves
 Ariel Sharon no quiere ni a los palestinos ni a Siria en la coalición antiterrorista que planea George W. Bush.
Desoyendo los consejos norteamericanos, Israel atacó por aire, tierra y mar distintas ciudades palestinas a lo largo de la franja de Gaza y disolvió por completo las posibilidades del encuentro �previsto para hoy- entre el canciller israelí Shimon Peres y Yasser Arafat para negociar el alto el fuego.
La izquierda israelí le exige a Peres que abandone la coalición de gobierno. |
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