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Por Carlos Rodríguez
 Una verdadera tormenta judicial
desencadenó el fallo de un tribunal marplatense que dispuso la
excarcelación de los dos policías detenidos por el asesinato
de Natalia Melmann. En un gesto totalmente inusual, el procurador general
de la Suprema Corte bonaerense, Eduardo Matías de la Cruz, calificó
de “verdadero disparate” la decisión tomada por la Sala
III de la Cámara de Apelación de Mar del Plata por entender
que sus argumentos “no se ajustan a las pruebas que figuran en el
expediente”. De la Cruz, como jefe de los fiscales, fue quien impulsó
la llamada “pista policial” que había terminado a mediados
de año con la detención de los policías de Miramar
Oscar Echenique y Ricardo “El Mono” Suárez. El fallo,
criticado también por la familia Melmann, sólo expone cuestiones
formales y no de fondo. Sin ser declarados inocentes en ningún
momento, los policías gozarán no obstante de su libertad
hasta que su suerte sea decidida en el juicio oral. De la Cruz anticipó
que presentará un recurso de casación, algo también
inédito en esta etapa del proceso.
La resolución de los jueces Julio Arriola, Daniel Laborde y Carlos
Pizarro Lastra, de apenas dos carillas escritas en un hermético
lenguaje jurídico, deja sin efecto la prisión preventiva
dictada en julio por el juez Marcelo Riquert, que había fundamentado
en más de 30 hojas su hipótesis de cómo ocurrió
el crimen. El tribunal dijo, como es obvio, que “se investiga un
único hecho” y sin embargo “se acomodan distintas versiones
de acuerdo a quien resulte sospechoso”, dando a entender que es débil
y cuestionable la acusación del juez y por ende del fiscal Marcos
Pagella, quien trabajó en conjunto con los instructores de la Procuración.
Según la Cámara, el juez Riquert “altera el principio
lógico de la no contradicción” porque en un momento
del auto de prisión preventiva dice que serían tres los
imputados y luego duda de que fueran tres. La transcripción que
hace el tribunal de los dichos de Riquert son parciales y confusos: “Asevera
inicialmente que ‘se encuentra debidamente justificado (...) al menos
tres personas (...) que cumplían funciones en la Seccional de Miramar’,
para luego afirmar que ‘entiendo que por el momento (...) la participación
de una tercera persona que fuera policía (...) al momento del hecho
analizado (...) no ha sido suficientemente acreditada hasta el momento’”.
El trabalenguas es textual del fallo de la Cámara y fue el aspecto
más cuestionado por De la Cruz.
En diálogo con Página/12, el jefe de los fiscales sostuvo
que Riquert “no incurrió en ninguna contradicción”
porque cuando habla de “al menos tres personas”, en fojas 2639
del expediente judicial, el juez “se está refiriendo al total
de personas que intervinieron en el hecho”, sin precisar si fueron
policías o civiles. En la causa también está detenido
y acusado por el homicidio una tercera persona que es civil, Gustavo “El
Gallo” Fernández.
En cambio, cuando en la carilla 2640 el juez señala que “no
ha sido suficientemente acreditada hasta el momento” la participación
“de una tercera persona que fuera policía”, lo hace en
alusión a un tercer policía. “Este es un error inexplicable,
porque en ningún momento hay una duda respecto de que eran tres
los acusados, en esta etapa de la investigación, y si quedaban
dudas sobre un cuarto que finalmente fue dejado en libertad por falta
de pruebas”, explicó De la Cruz.
El tribunal dijo también que sólo se comenta “cada
indicio o presunción” en contra de los ahora liberados Suárez
y Echenique y que eso se hace “en forma desmembrada”. De la
Cruz interpretó que “es lógico que la acusación
se base en indicios, en esta etapa del proceso”, pero consideró
que también hay pruebas que “no han sido tomadas en cuenta”
en el fallo, como ser el hallazgo de cabello que pertenecería a
la joven en una casa que sería de uno de los policías. Por
lo expuesto, el procurador sostuvo que la resolución “es un
disparate” y aclaró que se presentará ante el fiscal
de la Cámara de Casación para que se deje sin efecto la
libertad de losdos imputados. Gustavo Melmann, padre de Natalia, denunció
por su parte que “los jueces de Mar del Plata fueron presionados
por la policía”.
UN
ENORME INCENDIO, SIN FRENO EN LA RIOJA
Dos pueblos fueron evacuados
Nadie sabía ayer el nombre
de la vecina del pueblo de San Ramón que hace cinco días,
por esa manía de quemar la basura para que no moleste, comenzó
el incendio más grande que se recuerde en el sur riojano. Lo que
sí se sabía ayer a la noche es que el fuego continuaba y
que según los últimos cálculos ya había consumido
más de 30 mil hectáreas de pastizales en el departamento
de General San Martín. Sabían mucho más los habitantes
de los parajes de El Barreal y Balde del Milagro: fueron evacuados a riesgo
de que las llamas alcanzaran sus casas. Anoche ardían las promesas
de aviones hidrantes y de una rápida intervención del Plan
Nacional del Fuego, que depende de la Secretaría de Medio Ambiente.
Hasta el lunes a la tarde eran unos doscientos vecinos, armados de picos
y palas, una motoniveladora y un tractor con pala de arrastre quienes
intentaban controlar la lengua de fuego. El reclamo de ayuda fue atendido
finalmente ayer cuando llegó a la zona un helicóptero hidrante,
según fuentes de la Comisión Nacional de Lucha Contra el
Fuego. Lo cierto es que las llamas convocaron en la zona a los candidatos
a senadores para las próximas elecciones. Así sobrevoló
la zona, postulando a senador, Eduardo Menem. Acompañado por Adolfo
Scaglione, director Provincial de Turismo, Menem marcó el territorio
quemado: tiene unos 30 kilómetros de extensión por unos
13 de frente.
Con el pronóstico que indicaba un cambio en la dirección
del viento, anoche se intentaba armar una barrera en la cola del fuego,
el frente norte. A última hora las llamas habían llegado
a Ulapes, casi 200 kilómetros al sur de la capital riojana. Las
llamas acompañan la ruta nacional 79, que une el norte de San Luis
con el sudeste de Córdoba.
Hasta ayer los pobladores habían conseguido salvar a los animales
rompiendo los alambradas para que escaparan. Lo increíble fue lo
que las llamas hicieron al llegar frente a la escuela rural 355 en el
paraje Estancia La Industria. Pasaron a ambos lados del edificio.
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