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DINAR LINEAS AEREAS

LAS DUDAS, LAS EVIDENCIAS, LAS PISTAS, LOS MISTERIOS
Rompecabezas

Inglaterra, EE.UU., Alemania o Arabia Saudita pudieron ser
los lugares donde se armó el atentado. El rol de los suicidas. Las pruebas contra bin Laden. La conexión local. La ruta del dinero.

Los investigadores siguen
buscando pistas, cartas, indicios.

Por Raúl Kollmann

Los ataques no están esclarecidos. A casi tres semanas de los atentados en Nueva York y Washington y pese a que trabajan unos diez mil investigadores, ni el FBI ni la CIA ni el gobierno norteamericano pudieron aportar pruebas sobre dónde se armó y quién estuvo detrás del mayor acto terrorista de la historia. Esta semana, el número dos de la defensa de Estados Unidos, Paul Wolfowitz, estuvo reunido con los ministros de defensa de toda Europa. El alemán Rudolf Scharping le pidió pruebas sobre la culpabilidad de Osama bin Laden y Wolfowitz sólo pudo contestar: “Estamos trabajando en eso”. “Esperábamos de ustedes una especie de paper con el detalle de las evidencias”, remató el ministro alemán. En los últimos días, se recibieron en todo el mundo unas planillas del FBI en las que se pide colaboración para detener unas 400 personas que, en rigor, tienen todas domicilio en los Estados Unidos. “Si están buscando a 400 personas, significa que no tienen nada, ninguna línea precisa de investigación. Tiran una red amplia, a ver qué pueden encontrar”, comentó el responsable argentino de colaborar con los norteamericanos en la pesquisa.
Lo cierto es que los principales interrogantes siguen abiertos.
1 ¿El plan se armó en Arabia Saudita?
No se sabe. Los últimos datos apuntan a lo siguiente:
- 17 de los 19 suicidas vendrían de Arabia Saudita. Hay nueve que, con toda seguridad, son originarios de ese país y existen dudas sobre otros ocho, aunque todo indica que también serían sauditas. El aparente jefe, Mohamed Atta, era nacido en Egipto y otro, Zia Jarrahi, venía de El Líbano.
- La mayoría de los suicidas sauditas venían de Asir y Baha, dos provincias del Sur, cercanas a Yemen, de donde es la familia de Osama Bin Laden. Allí hay también un clérigo muy famoso, feroz opositor a Occidente, Safar al Hawali.
- Se conocen los testimonios de los padres de algunos de los terroristas suicidas. “Mis hijos se fueron en peregrinación a Medina en marzo de 2000 pero después no volvieron. Algunos dicen que se unieron a luchadores islámicos en Chechenia”, dijo el padre de Waleed y Wail Al Sheri, dos hermanos que se inmolaron en los ataques. “Hace más de un año que mi hijo se fue. Me dijo que se integraría a la Organización Islámica de Ayuda”, señala otro padre. “Se graduó en una escuela religiosa y se fue a combatir a Chechenia”; “Se hizo religioso hace dos años y medio y empezó a predicar el Islam en la mezquita”; “Hace 15 meses se fue en peregrinación a La Meca y no volvió más”, son los testimonios de otros padres.
2 ¿El plan se armó en Alemania?
Esto es lo que, por ahora, piensan los hombres del FBI. Tres de los líderes del grupo estudiaron en Hamburgo –Mohamed Atta, Marwan Al Shehhi y Zia Jarrahi– y habrían estado allí en mayo. Los norteamericanos sostienen que por lo menos fue en Alemania que recibieron el dinero para realizar los ataques. En concreto, afirman que esos tres suicidas tuvieron contacto con el empresario sirio Mamoun Darkazanli, que tenía un poder judicial sobre una de las cuentas congeladas en los últimos días y supuestamente relacionadas con Bin Laden. Sin embargo, los alemanes no mostraron ninguna prueba sobre todas estas relaciones e incluso oficialmente sostienen que “no hay evidencia de que Bin Laden haya ayudado en territorio alemán a los secuestradores”.
3 ¿Se armó en Inglaterra?
Esta semana, Scotland Yard reconoció que 11 de los 19 suicidas estuvieron en abril en Londres y que no tiene datos de los otros ocho que participaron de la operación. A pesar de la alharaca que se está haciendo sobre un entrenador de pilotos que vive en Londres y que habría preparado a cuatro de los suicidas, hasta el momento no hay pruebas de que el hombresupiera de los planes de sus discípulos. La hipótesis que ahora circula entre los investigadores es que hubo una especie de reunión preparatoria de los ataques en Londres.
4 ¿O fue en los Estados Unidos?
Los 19 suicidas vivieron en Estados Unidos, algunos desde 1988, varios desde 1993 y otros desde mayo. Tres de los cuatro grupos que tomaron los aviones tuvieron domicilios en la Florida, en las localidades de Hollywood y Delray Beach. Otro grupo vivió en San Diego, California. La parte clave de la operación –el entrenamiento para pilotear los aviones grandes– se hizo en Estados Unidos y empezó al menos en junio de 2000, 15 meses antes de los atentados.
La cuestión de dónde se armó el plan tiene importancia: permitiría buscar más en profundidad quién rondaba a los suicidas en aquel momento, podría dar una idea de la organización que impulsó los ataques y cómo hicieron para financiarse. Por ahora, los investigadores no logran desentrañar el enigma y la hipótesis de que fue en Alemania es, reconoce el FBI, sólo eso, una hipótesis.
5 Un dato increíble que lleva a pensar
Por lo que se sabe, todos los suicidas usaron su propio nombre para perpetrar el atentado. O sea que figuraban en las listas de pasajeros con su verdadera identidad. Según los especialistas en terrorismo, los suicidas no quisieron ocultarse, no sólo porque iban a morir, sino también porque lo consideraron una acción heroica que dejaría un mensaje al mundo. Por lo tanto: no quisieron que se atribuya el ataque a otras personas y que no hubiera dudas sobre quienes deben ser los mártires. Queda sin embargo por responder por qué no se adjudicaron, entonces, el ataque. La decisión de actuar con su propio nombre facilita la investigación y supuestamente permitiría llegar muy rápido a ideólogos o cómplices. Esta es una de las razones por las que en Washington se empieza a hablar de que los suicidas eran una organización en si misma, una especie de secta –tal vez adherida a Bin Laden, al gobierno de un país islámico o un líder que se desconoce– que conformó una hermandad suicida. Hay un hecho extraño: casi todos los suicidas se conocían entre sí, hay varios emparentados tres Al Sheri, tres Alhamzi, dos Alomari, dos Alghamdhi–, hay grupos que tomaron distintos aviones y estudiaron juntos, alquilaron autos en el mismo lugar, tenían las mismas direcciones y cinco de ellos sacaron un registro de conducir trucho, en el mismo lugar y el mismo día.
6 ¿Existe un antecedente de suicidas relacionados con Bin Laden?
Al terrorista saudí escondido en Afganistán se le atribuyen los atentados contra las embajadas norteamericanas en Kenia y Tanzania, ambos protagonizados por suicidas. El caso más interesante se refiere al ataque en Kenia: allí había dos suicidas en un camión, pero uno de ellos sobrevivió. Ese hombre, Mohamed Al’Owhali, está preso en Estados Unidos y en 1999 aceptó a hablar ante el FBI. Tomando con precaución la información que viene del FBI, hay tres hechos que resaltan:
- Como en el caso de la mayoría de los suicidas de Nueva York y Washington, Al’Owhali era saudí y de clase media.
- A diferencia de los atacantes de Estados Unidos, se entrenó mucho tiempo en Afganistán.
- Otra diferencia es que usó un pasaporte falso a nombre Khalid Salim bin Rashid para ingresar a Kenia y lanzarse contra la embajada. Su compañero en el camión-bomba murió y él sólo resultó herido porque parte de su misión era bajarse y arrojar granadas contra la custodia en la puerta.
7¿Qué pasa con los cómplices de los suicidas? ¿Qué sucede con la conexión local?
Por ahora, no se encontró nada, lo que refuerza más el carácter de secta del grupo. Cada vez hay más evidencias de que trabajaron en lospreparativos de inteligencia: por ejemplo, a Mohamed Atta se lo vio varias veces en el aeropuerto de Boston tomando notas y hay datos de que algunos de los integrantes del grupo viajaron en los mismos vuelos que después tomarían el día del ataque. Seguramente eran los ensayos.
Para el FBI hay tres detenidos que podrían ser parte de la organización: u Un argelino, Zacarías Moussawi, detenido en agosto porque resultó sospechoso a raíz de que tomaba clases en los simuladores aéreos de Minessota. En verdad, está preso por violar las leyes migratorias y se dice que festejó en el momento en que los aviones se incrustaban en las Torres Gemelas. Por ahora no le encontraron cuándo o cómo estuvo con los otros 19 suicidas.
- Mohamed Azmath y Ayub Khan estaban en la lista de pasajeros de un vuelo que salía de Nueva Jersey y se canceló. Los apresaron poco después en un tren: tenían cuchillas parecidas a las que usaron los secuestradores y, según el FBI, también tenían entrenamiento de vuelo.
Fuera de estos tres individuos, de los demás casi 400 buscados no hay ninguno con evidencia sólida. Es más, el FBI consideraba super-superimportante un médico detenido en Chicago, pero el viernes lo dejaron en libertad.
8 Otro dato increíble que también lleva a pensar
Ni uno sólo de los suicidas dejó una carta o comunicación de despedida. Lo que se ha conocido hasta el momento, son cinco hojas manuscritas que el aparente jefe del grupo, Mohamed Atta, tenía en un bolso que por casualidad no fue subido al avión. Las cinco hojas tampoco explican el por qué de los atentados y menos si hubo o no una organización detrás: son una serie de oraciones e instrucciones que tienen por título La última noche. El texto ya motivó bastantes polémicas: especialistas en el mundo islámico, como el periodista inglés Robert Fisk, dudan mucho de su autenticidad y en todo caso las voces mencionan que quien redactó el texto –posiblemente el mismo Atta– tenía un nivel más bien modesto de educación en el Corán y el Islam. Como es obvio, es posible que exista un mensaje o mensajes finales, que esté en poder de las autoridades norteamericanas, y lo mantengan en secreto, al menos por ahora.
9 ¿Qué pruebas hay contra Bin Laden?
Por ahora, muy pocas. Esa es la razón por la que no le mostraron evidencias a los ministros de defensa de Europa. Aquí van algunas:
- La mayoría de los suicidas vienen de la zona de Arabia Saudita de la que también proviene Bin Laden. Atta es egipcio, donde está la Jihad Islámica egipcia, vinculada al terrorista escondido en Afganistán.
- El dinero: ahora, los hombres del FBI reconocen que no se trató de una operación austera. Se necesitó al menos un millón de dólares: 70.000 se fueron en pasajes en las últimas dos semanas y los suicidas hacía más de un año que no trabajaban. Si se habla de dinero, se habla de Bin Laden y está el rastro en Alemania del empresario sirio.
- Según la CIA, en enero de 2000 hubo una reunión de hombres de Bin Laden en Kuala Lumpur. El diario The Independent de Londres, que cita las fuentes de la CIA, menciona que en ese encuentro fueron filmados Jalid Almidhar y Salem Alhamzi, dos de los que tripularon el avión que se incrustó en el Pentágono. La filmación no se exhibió.
- Dos de los terroristas que se lanzaron contra las Torres Gemelas habrían tenido relación con un taxista, Raed Hijazi, que actualmente es juzgado en Jordania por una serie de atentados que se iban a producir a fin del milenio. Ese taxista sería un hombre de Bin Laden.
- La instigación permanente del terrorista saudí por que se ataque a Estados Unidos: “Los islámicos deben matar norteamericanos donde los encuentren, sean soldados o civiles. Ello va con la las palabras de Dios todopoderoso”. Además, si de acuerdo con lo que señalan los investigadores norteamericanos, fue responsable de los atentados en Kenia, Tanzania ycontra el buque Cole, tiene lógica que sea culpable también de éstos ataques.
- Hay algún elemento –tampoco muy contundente– que no apuntaría a Bin Laden sino, por ejemplo, al aparato de inteligencia de Irak. Según la CIA e Israel, Atta se vio dos veces este año con espías de Saddam Hussein, la primera vez en abril y en Praga, y la segunda en julio en Cataluña, en España. En el mismo sentido iría otro dato, el poco rigor religioso de los suicidas: hay testigos que vieron a dos bebiendo, uno al menos convivía con su novia turca, iban a gimnasios mixtos y al menos tres estuvieron en Las Vegas este año. Se sabe que Irak está lejos de los talibanes o de Irán justamente porque no se embarca en el fundamentalismo religioso. Por otro lado, no hay antecedentes de iraquíes suicidas. Por último, hay un elemento que tampoco encaja con la banda de Bin Laden: de los 19 suicidas, 17 no figuraban en los registros de terroristas de ningún país, no tenían antecedentes. Si se considera que Bin Laden es el enemigo público número uno, es extraño que gente relacionada con él no aparezca fichada y que no se haya encendido ninguna luz de alarma.
10 ¿Existe alguna otra hipótesis?
Los hombres del FBI que analizaron la carta de Atta vuelven a mencionar que el grupo atacante podría conformar una nueva secta islámica, un grupo armado alrededor de hermanos, primos y familiares que hacen un pacto suicida antinorteamericano. Dos académicos argentinos, Norberto Méndez y Mariano César Bartolomé, mencionan una estructura parecida: organizaciones que tienen sus propios mandos, una especie de privatización del terrorismo, como lo denomina Bartolomé.
Todos los especialistas coinciden en que, recluido como está en las montañas, Bin Laden no participó de la planificación ni dio las ordenes para los atentados. Todo apunta a que los 19 suicidas –¿faltará el número 20?– armaron su propio plan y contaron sólo con un guiño y dinero de Bin Laden. O tal vez de otro. Por ahora no se puede afirmar nada, porque no hay pruebas contundentes y el caso sigue abierto.

 

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