Se
sacó la mufa. En San Juan, la carrera anterior, perdió el
triunfo en la última vuelta, con una maniobra muy discutida de
Juan María Traverso. Ayer, en Mar de Ajó, bajo un diluvio,
Juan Manuel Silva aprovechó los últimos giros para robarse
una victoria que parecía asignada al Peugeot de Emiliano Spataro.
Las condiciones me beneficiaron, pero tantas veces me tocó
perder cuando venía ganando una carrera... Se me tenía que
dar, aseguró Silva en medio de los festejos.
La diferencia, que medió entre la derrota de San Juan y la victoria
en Mar de Ajó, fue que Traverso no lo respetó y en cambio
Spataro prefirió evitar el toque que parecía inevitable
si quería mantener la primera posición.
Spataro dominó la carrera durante gran parte de su desarrollo.
En algunos pasajes llegó a sacarle más de 7 segundos de
ventaja a Gabriel Furlan, su escolta, pero sobre el final una complicación
en los neumáticos de su Peugeot 306 permitió que tanto Furlan
como Silva se le acercasen. El chaqueño buscó permanentemente
superar rivales en condiciones desfavorables para ese tipo de acciones.
La maniobra en la que Silva llegó a la primera posición
fue de lo mejor de la carrera. Furlan se tiró por afuera para superar
a Spataro, y cuando éste abrió su línea, Silva dobló
por adentro. El piloto de Peugeot vio la maniobra del chaqueño
y quiso recuperar la posición, pero involucraba un toque y entonces
prefirió dejar pasar al chaqueño. Estoy caliente dijo
más tarde. El Pato hizo una muy buena carrera y me ganó
bien. Levanté en esa maniobra para no salirme de pista.
Por el campeonato, Walter Hernández largó desde los boxes
por problemas en el motor de su Escort, pero le ganó la pulseada
a Gabriel Ponce de León y terminó por delante de su rival
y compañero de equipo, aunque los puntos descontados fueron apenas
cuatro. Hernández quebró una racha negativa de tres carreras
sin sumar. Si me descontaban 10 puntos, me iba contento; apenas
me descontaron cinco, así que me voy contento y conforme,
reconoció Ponce de León al concluir la competencia.
|