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LOS ULTIMOS 45 DIAS VIERON CRECER EL VOTO NULO DE UNA FORMA IMPRESIONANTE
Viene un blanco como nunca se vio

Las encuestas indican
que el próximo domingo se batirá un record de votos de protesta, anulados o en blanco. Curiosamente, este fenómeno se nutre mucho de votantes de centroderecha que votaban a Cavallo y es muy superior �25 por ciento� en sectores altos que en sectores más pobres �donde baja al 11�.

La gran cantidad de votos
nulos confunde los pronósticos.
Duhalde, Terragno y la izquierda emergen bien.

Por Raúl Kollmann

Los datos son categóricos y se registran en todas las encuestas: los que se aprestan a votar en blanco –no meter nada dentro del sobre– y quienes adelantan que van a votar nulo –poner en el sobre una boleta no oficial, con frases insultantes, imágenes de próceres, de Clemente, Merlo o quien sea– batirían records en la elección del próximo domingo. Es más, el crecimiento de ese voto-puteada, como ya lo denominan algunos politólogos, se hizo impresionante en los últimos 45 días. ¿Es posible que al final tanta gente vote en blanco, nulo o directamente no vaya a votar? En principio, la respuesta es sí. En la capital de Formosa, hace apenas una semana, el 33 por ciento de la gente no fue a votar y el 18 lo hizo en blanco o nulo, demoliendo índices anteriores. Lo curioso es que el fenómeno se nutre mucho de votantes de centroderecha, ex UceDé y que en las elecciones anteriores apoyaron la candidatura presidencial de Cavallo.
Las conclusiones surgen de un estudio realizado en la Capital Federal por el consultor Hugo Haime. El llamado voto negativo –no votará, anulará, en blanco o indeciso– pasó del 25.9 por ciento en agosto al 39.4 en octubre. De todas maneras, el mayor crecimiento se produce en los que dicen que van a anular el voto, que pasaron de ser el 6.3 por ciento al 17.3.

De centroderecha

Como es obvio, un fenómeno tan fuerte abarca a todos, ex votantes de izquierda, centro o derecha. Sin embargo, es proporcionalmente mucho más fuerte en el centro derecha. Estos son los datos de Haime:
- Uno de cada tres ciudadanos que votaron a Cavallo a presidente en 1999, ahora van a anular su voto.
- El voto nulo se da más entre la gente con alto nivel socioeconómico (25.1 por ciento) que entre los de bajos recursos (11.6 por ciento).

¿Será cierto?

Lo que sí se sabe es que habitualmente el día de las elecciones no se concretan tantos votos en blanco o nulos como aparecen en las encuestas, pero los consultores registran índices nunca vistos y por ello están convencidos que esta vez sí habrá una presencia fuertísima del llamado voto negativo.
Hay algunos antecedentes:
- En las elecciones del Chaco, los votos en blanco y negativos llegaron al 12 por ciento, el triple de lo registrado anteriormente. “Hubo mucho voto a Clemente, San Martín e insultos”, describe Enrique Zuleta, quien fue consultor en la campaña chaqueña.
- Hace siete días, en Formosa, sólo el voto nulo trepó al 8 por ciento, ocho veces más que en anteriores oportunidades. En toda la provincia, el voto en blanco y nulo llegó al 12 por ciento y en la capital al 18, lo que significa un crecimiento inédito.

Polémica

El voto en blanco y nulo ha levantado una fuertísima polémica que tiene los siguientes argumentos, muchos de ellos encontrados:
- Es un voto activo, de protesta, tiene una especie de insolencia democrática y, según grafica Zuleta, incluye el mensaje “no soy ganado que va por un corralito donde al final hay tres o cuatro tipos sonrientes, mentirosos, satisfechos de que vengas por ahí”.
- Es el voto con el que dicen que sueñan De la Rúa, Menem y Ruckauf. El Presidente porque significa un rechazo a “todos los políticos” y no a la actual gestión ni a las actuales medidas. Ruckauf, porque no es candidatoy supuestamente opacaría la victoria de Eduardo Duhalde, recortando el vuelo presidencial que dicen que tiene el ex gobernador. Menem porque tampoco está en el centro político y la elección demostraría que desde que él no está, no hay nada que se pueda hacer.
- Es el voto al que aspiran los sectores más antidemocráticos, incluyendo algunos connotados conductores radiales y televisivos. El mensaje sería: “no hay solución con los políticos”.
- Es un voto de respeto a la democracia, utilizando los instrumentos de la democracia, pero enviando una clara señal de protesta a toda la clase política. Significa pegarles un golpe fuerte para que cambien.
Esta es la controversia que va a estar en el centro de la escena toda esta semana: candidatos diciéndole a la gente por qué los tienen que votar a ellos y no en blanco o anulado. El voto protesta soy yo, dirá Terragno -el candidato del partido de gobierno–, argumentando que enfrenta a Cavallo. El voto protesta soy yo, dirá también Alfredo Bravo, sosteniendo que bajo el paraguas de Lilita Carrió han confrontado como nadie con el Gobierno. El voto protesta soy yo, dirá la izquierda y también el propio Liendo, que dirá que está en contra de la Alianza, pero junto a Cavallo. Todos intentarán capitalizar ese inmenso 39.4 que todavía hablan de votar en blanco o nulo, o está indeciso.
“Por ahora nosotros también registramos un 46 por ciento de gente que no va a votar (17 por ciento), va a anular su voto (14 por ciento), está indeciso (9 por ciento) o lo va a hacer en blanco (6 por ciento). No hay que confundir el voto nulo o blanco con el no ir a votar”, sostiene Graciela Römer. “Es un nuevo fenómeno, con un compromiso activo que es todo lo contrario del desinterés. Nuestros datos muestran que lo que está detrás es el rechazo a la política económica y el descontento con la dirigencia política. En este marco, ir a votar pero hacerlo en blanco o nulo implica rechazar la oferta existente, pero también algún tipo de esperanza de que las cosas se puedan cambiar a través del voto.”
“Al final, en la Capital, el voto en blanco y nulo puede llegar al 20 por ciento, cuadruplicando lo ocurrido en elecciones anteriores –adelanta Zuleta–. Sin dudas crecerá. En otros tiempos se interpretaba como desinterés, ahora es diferente: actitud apasionada, insolencia cívica y votantes que vienen bastante más de la derecha que de la izquierda. Existe la noción de que la democracia no corre peligro, no se elige gobierno –caso en el que la gente pondría mucha atención y usaría el voto útil– y en cambio se vota por senadores, o sea bancas de un cuerpo totalmente desprestigiado. Esto es lo que se engarza y explica niveles tan altos de voto blanco y nulo”.

 


 

EFECTO CAVALLO EN LA CAMPAÑA
Péguele y gane votos

Por R. K.

El que quiere ganar votos tiene que criticar y pelearse con Domingo Cavallo. Este parece el lema central de todos los candidatos, incluso en el interior del país. Esta semana, hasta hombres cercanos a Rodolfo Terragno se quejaron de que Cavallo se la pasa polemizando con Lilita Carrió –lo que mejora la performance electoral del ARI– y que, en cambio, debería aceptar un debate con Terragno. La explicación de tanto anticavallismo en la campaña se explica perfectamente desde los números: en noviembre de 2000, un 47 por ciento de los ciudadanos opinaba bien o muy bien del Mingo, ahora la imagen se derrumbó: apenas el 13 por ciento respalda al ministro. Y, además, hay durísimas críticas a la economía de mercado y un 71 por ciento considera que no se debe seguir con las recetas del FMI.
Las conclusiones surgen de una encuesta realizada por Graciela Römer y asociados, que entrevistó a 640 personas en Capital Federal y Gran Buenos Aires. El estudio se hizo respetando las proporciones por edad, sexo y nivel económico-social.
Los que apoyaban la economía de mercado –“con sus cosas buenas y malas”, decía la pregunta– totalizaban en 1992 un 63 por ciento, cifra que ahora bajó a la mitad. Hubo euforia a principios de los 90, ahora hay decepción. Pero, además, esto se ve en la catastrófica imagen que hoy tiene Cavallo, apoyado apenas por el 13 por ciento de los ciudadanos y criticado por el 60 por ciento, es decir una amplia mayoría. El panorama se completa bastante, en cuanto a la política económica en general, con un rechazo muy mayoritario (75 por ciento) a las orientaciones que dicta el Fondo Monetario Internacional.
En cuanto a las medidas concretas, hay algunas que postula Cavallo que tienen cierto respaldo: terminar las jubilaciones de privilegio, reducir los sueldos públicos altos y reducir el personal de la administración pública. Los apoyos van del 60 al 90 por ciento. En cambio, hay oposición a la mayor parte de las medidas que impulsa Cavallo: seis de cada diez personas está en contra de arancelar la universidad, la mayoría se opone a bajar sueldos bajos de los estatales y reducir los gastos destinados a programas sociales o de educación. Pero el rechazo más categórico es a bajar jubilaciones y a reducir sueldos de maestros: ahí, apenas un tres por ciento se manifiesta de acuerdo y un 95 en contra.
Si se toma en cuenta que la imagen de Cavallo es catastrófica, que no se ven con buenos ojos la economía de mercado y las propuestas del FMI y que encima no hay aprobación para la mayor parte de las medidas concretas del ministro, la conclusión es que la consigna electoral Péguele a Cavallo, no está errada. Al menos desde el punto de vista de conseguir votos.

 


 

Duhalde llega bien, pero no abruma en la confusión

Por R. K.

Con el 40 por ciento de gente que votará en blanco, nulo, está indecisa o directamente no irá a votar, es casi imposible definir quién va a ganar la elección en la Capital Federal el próximo domingo. Por ahora, la mayoría de los consultores tienen a Rodolfo Terragno adelante, seguido por Alfredo Bravo, del ARI, y a Gustavo Beliz en el tercer lugar. Sin embargo, el gran protagonista es el voto protesta. En la provincia de Buenos Aires, Eduardo Duhalde gana claramente, pero según los encuestadores no logrará una votación apabullante: estaría rondando el 35 por ciento de los sufragios. La mayor parte de los consultores tiene a Raúl Alfonsín en segundo lugar y consolidándose, y al padre Luis Farinello, que no tiene una estructura muy fuerte ni sólida, en el tercero.
Las conclusiones sobre Capital surgen de una encuesta realizada por la consultora Ibope OPSM, que conduce Enrique Zuleta Puceiro. El estudio, que se basa en entrevistas a 400 porteños en edad de votar, y se respetaron las proporciones por sexo, edad y nivel económico-social. Las conclusiones en la provincia de Buenos Aires se asientan en un trabajo de la consultora Equis, que dirige Artemio López. En total se encuestaron mil personas en el conurbano bonaerense y también en el interior provincial.

Capital Federal

Este es el diagnóstico de los principales encuestadores:
- Enrique Zuleta Puceiro: “Tenemos arriba a Terragno con escasa diferencia. Es posible que esto varíe en función de valores contextuales. Puede haber un paquete económico, tal vez el lunes ¿se va a vender bien ese paquete? ¿Se va a vender mal? ¿Infuenciará? Es difícil saberlo. No queda claro si va a despertar expectativa, pero si lo hace, Terragno va a ganar. El voto en blanco y el nulo suman índices asombrosos y ahí esta otra clave: si los partidos tradicionales ceden votos al desencanto, el ARI puede ganar. La izquierda va a hacer una buena elección, se ve bien a Vilma Ripoll, Patricia Walsh y Luis Zamora”.
- Graciela Römer: “Tenemos a Bravo primero, a Terragno segundo y a Beliz tercero, pero es difícil hacer pronósticos con un electorado tan volátil, que está tan poco identificado con las distintas propuestas que hacen los candidatos. Eso hace que haya mucha influencia de la coyuntura. Por supuesto que es también muy difícil el diagnóstico con la aparición de ese fenómeno inédito que es el aumento del voto en blanco y la anulación del voto. Está claro que si se hubiese presentado Elisa Carrió, era una probable ganadora, pero se ha demostrado que no es tan fácil transvasar el voto a sus candidatos”.
- Analía Del Franco: “Terragno está primero, pero hay una situación de casi triple empate. Se nota una fuerte baja de ocho puntos en la popularidad de Elisa Carrió y también en la de Alfredo Bravo, eso hace que el candidato del ARI se estanque. Terragno, en cambio, empezó la campaña con fuerza y se ubica, por ahora, en el primer lugar”.
- Artemio López: “Tenemos a Terragno con cuatro puntos de ventaja sobre Alfredo Bravo, pero sigue siendo enorme la cantidad de gente indecisa. La tendencia me indica que Terragno puede consolidar su ventaja porque veo que está bajando el ARI y la imagen de Elisa Carrió. Eso lo percibo, no sólo en la Capital sino también en el primer cordón del Gran Buenos Aires. Es más, diría que con la cantidad de indecisos que estoy viendo, todavía está en discusión todo: el primer lugar e incluso el tercero que hoy ocupa Beliz, que podría mejorar”.

Provincia de Buenos Aires

- Artemio López: “Veo muy fuerte a Duhalde. Proyectando la intención de voto –sin contar indecisos, nulos, blancos– puede llegar al 39 por ciento, que sería un resultado de envergadura. La proyección de Alfonsín lo ubica en el 17 por ciento, o sea un poco por arriba de la muy mala votación que hizo Horacio Massaccesi como candidato presidencial. En una palabra, los votos de Alfonsín son básicamente radicales. El tercer lugar me parece que será para el ARI con casi el 12 por ciento, después el Polo Social, el 10 y Patti el 9. Repito, es proyectando los indecisos y sacando los blancos y nulos, tal cual se hace en la asignación de bancas”.
- Analía Del Franco: “La diferencia a favor de Eduardo Duhalde sigue siendo grande. Alfonsín se ha consolidado mucho en el segundo lugar y eso cambió las cosas. Antes había un pelotón peleando el segundo puesto, ahora Alfonsín está claramente ubicado ahí y estaría llegando al 20 por ciento de los votos. Farinello tercero. El caudal de Duhalde va a estar por debajo de la votación tradicional del PJ en la provincia”.
- Graciela Römer: “Gana Duhalde y es una situación mucho más estable que la de la Capital. El voto peronista está consolidado y eso marca la clara ventaja de Duhalde. Hay una disputa por el segundo lugar que se parece bastante a lo que pasa en Capital: ahí están apareados Alfonsín, Farinello, Barrachia el del ARI y Luis Patti”.
- Enrique Zuleta: “Gana Duhalde. De todas maneras, el porcentaje que va a sacar es inferior a su media histórica. Raúl Alfonsín tiene dificultades en el Gran Buenos Aires para consolidar su segundo lugar. En el interior sí está fuerte y eso le permite ubicarse, por ahora, detrás de Duhalde”.

CUADROS

EL NO EN LA CAPITAL
EL NO POR PARTIDO
CUESTIÓN DE SISTEMA
LA IMAGEN DE CAVALLO
LA RELACIÓN CON EL FONDO
VOTO A SENADOR EN LA CIUDAD
VOTO A DIPUTADO EN LA CIUDAD
VOTO A SENADOR

 

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