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 El presidente Fernando de la Rúa aseguró que en el país �no hay riesgo ni clima de riesgo� por el ataque de Estados Unidos a Afganistán. �No veo que esto deba afectar de manera particular a nuestro país: están tomadas todas las medidas de seguridad�, sostuvo ayer al ser consultado sobre los efectos de la contraofensiva norteamericana. También ratificó que la participación argentina en la guerra se limitará al envío de �ayuda humanitaria�.
De la Rúa reiteró así, 24 horas después del comienzo de la represalia, que los Estados Unidos no solicitaron el envío de tropas a la zona de conflicto para participar de las operaciones. El presidente se refirió al nuevo escenario internacional en el aeroparque metropolitano, poco antes de partir rumbo a Brasilia para reunirse con su par Fernando Henrique Cardoso.
La posición del Ejecutivo, remarcada en rueda de prensa, es que las fuerzas argentinas �actúen en los escenarios para la defensa y la prevención de la paz�.
�Expresamos nuestra solidaridad ante el ataque sufrido en los Estados Unidos desde el primer momento; en este caso, hemos contribuido a la formación del consenso en la OEA y acatamos la resolución de las Naciones Unidas sobre la necesidad de frenar al terrorismo internacional�, remarcó. La semana pasada el Gobierno respondió favorablemente un pedido de la administración Bush sobre la posibilidad de enviar una misión de paz a Los Balcanes para reemplazar a efectivos norteamericanos. En esa línea, ayer el ministro de Defensa Horacio Jaunarena recordó que también está preparado �un hospital de campaña para cuando sea requerido�.
En cuanto al refuerzo de la seguridad, el Presidente y el ministro confirmaron que se ordenó intensificar los controles en aeropuertos, fronteras, embajadas y sedes religiosas judías y musulmanas.
Las medidas se notaron en Ezeiza, que (como todos los aeropuertos del país) fue declarado en estado de �Amenaza 3�, con estrictos controles por los cuales sólo pueden ingresar a las terminales las personas con sus respectivos pasajes validados y los empleados.
Simultáneamente se redobló la vigilancia en representaciones diplomáticas, en especial las de Estados Unidos y Gran Bretaña, que amanecieron rodeadas de patrulleros.
�Se están tomando todos los recaudos para darle la máxima seguridad a la población�, afirmó el ministro de Defensa, Horacio Jaunarena, quien no quiso dar mayores detalles sobre las medidas en marcha.
Las repercusiones por el inicio de la contraofensiva sumaron algunas voces de alerta dentro de la Alianza. Raúl Alfonsín dijo que espera que los ataques de las flotas estadounidenses a Afganistán no se conviertan �en un exceso� y que los bombardeos no se extiendan en el tiempo, ya que �podrían causar un desastre universal�.
El ex presidente señaló que �la carta orgánica de las Naciones Unidas no admite la represalia, admite la defensa nacional�, un derecho que describió como limitado. �Dios quiera �agregó� que todo quede acá, que no sigan adelante�.
También el candidato porteño a senador por la Alianza Rodolfo Terragno, se refirió al tema y confesó tener �mucho temor, como tiene casi toda la humanidad� por las consecuencias de la guerra desatada.
Terragno advirtió que �lo peor que podría ocurrir es que la necesidad� de Estados Unidos de �hacer algo� en represalia a los ataques terroristas sufridos, sumado a �el temor de parecer impotente� los lleve a actuar �de una manera ineficaz, sobre todo porque las escaladas son siempre así�.
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