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Por Laura Vales
 En su celda del Escuadrón 48 de Gendarmería Nacional, Raúl �Tato� Romero Feris festejó el resultado de una elección que lo dejó a un paso de la gobernación de Corrientes y a menos todavía de recuperar la libertad. El ex mandatario, preso por una quincena de denuncias vinculadas a la malversación de fondos, se adjudicó desde muy temprano el triunfo �por el 50 por ciento� de los votos. Los números oficiales, sin embargo, marcaban sobre la medianoche una tendencia a la paridad con el radical Ricardo Colombi, en la que ni Tato ni su adversario conseguían la mitad más uno. Si esta proyección se mantiene habrá ballottage.
El recuento en la capital correntina avanzó a paso lento pero mostrando una pelea cuerpo a cuerpo por la única gobernación en disputa en estos comicios. Con el 45 por ciento de las mesas escrutadas, la fórmula del Frente de Todos de Colombi obtenía un 43 por ciento, mientras que el Frente para la Unidad de Romero Feris llegaba al 42.
El cacique correntino denunció que el Ministerio del Interior estaba �manipulando� los resultados para robarle el triunfo, aunque finalmente terminó asegurando que no le importaba tener �el 49 o el 51 por ciento� de los votos, porque �dijo� �históricamente las segundas vueltas en esta provincia han servido para consolidar el triunfo de las primeras�.
Con o sin segunda vuelta, para Tato se abre un espacio prometedor. En primer lugar, está la cuestión de su libertad; esta misma mañana deberá levantase temprano para asistir a la continuación del juicio oral en su contra, pero lo hará en mejores condiciones de iniciar un reclamo por su excarcelación.
En prisión desde hace más de dos años, Romero Feris atraviesa desde el miércoles las audiencias orales en las que se valoran las pruebas reunidas en su contra, bajo cargos que van desde el desfalco en la construcción de un corsódromo al manejo supuestamente irregular de 50 millones de pesos en bonos de consolidación de deuda, durante su gestión como intendente de la capital provincial.
El ex gobernador tejió desde la cárcel el acuerdo (de preso a preso) con Carlos Menem, para unir al menemismo con el Partido Nuevo (PaNu) en el Frente Unidos por Corrientes. El pacto le dio buenos frutos: Nora Nazar, su esposa, se imponía ayer por una marcada diferencia como candidata a la intendencia de Corrientes. Y Angel Pardo (enredado en el escándalo por las supuestas coimas en el Senado, beneficiado luego con una falta de mérito, investigado por presunto enriquecimiento ilícito) reunía los votos necesarios para renovar su banca.
En Corrientes se eligió también a tres diputados nacionales, 13 senadores provinciales, 26 diputados provinciales, 65 intendentes y 433 concejales.
La disputa por las bancas de senadores y diputados nacionales también era pareja, con una leve ventaja para la lista de Romero en el caso de diputados (44,48 contra 43.49) y unos puntos en favor de la Alianza Frente de Todos para senadores (44,31 a 43,44).
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