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Por
Audrey Gillan
Desde Washington
 El
reconocimiento por parte del presidente George Bush de que Osama bin Laden
pudo haber estado detrás de la serie de ataques con ántrax
que han ocurrido en Estados Unidos genera el interrogante de cuáles
son las conexiones entre los sobres que contenían el arma biológica
y la red Al Qaeda. Se supo que la esposa del editor del diario The Sun
de Boca Raton (Florida) –cuyo editor de fotografía murió
luego de haber estado en contacto con el ántrax– le había
alquilado un departamento a uno de los hombres que secuestró el
segundo avión que atacó el World Trade Center. Gloria Irish,
la esposa del editor Michael Irish, le alquiló a Hamza alGhamdi
un departamento en el quinto piso en Delray Racquet Club. A su vez, también
le alquiló una habitación a Marwan al-Sheihhi en The Hamlet,
un barrio privado. También se cree que Al Sheihhi fue el cabecilla
del mismo vuelo. Ambos partieron de Florida a Boston el 9 de septiembre,
desde donde secuestraron el avión.
Esta conexión estaba bajo investigación por el FBI, pero
se veía como una “extraña coincidencia” hasta
tanto emerjan nuevas conexiones. Las sospechas aparecieron con el primer
brote de ántrax en Florida porque 11 de los 19 secuestradores de
los ataques del 11 de setiembre tenían domicilios en Florida, muchos
a pocas millas de las oficinas de The Sun y de otros periódicos
de supermercado.
La principal evidencia contra Al Qaeda –a pesar de que sea sólo
circunstancial– es la coincidencia de timing. Muchos funcionarios
creen que el miedo de los días posteriores a los ataques y las
amenazas que hicieron Bin Laden y su vocero pueden tener alguna vinculación
con los atentados bioterroristas. A su vez, los investigadores descubrieron
que Mohamed Atta, el cabecilla de los secuestradores, y otro de sus compañeros
se habían suscrito al periódico The Sun, que continuaba
publicando grandes titulares sobre Bin Laden, incluyendo uno que decía
“Buscado: Vivo o Muerto” con la palabra “Vivo” tachada.
Algunas de las cartas que aterrorizaron a la población, pero que
finalmente resultaron negativas al ser sometidas a pruebas de laboratorio,
fueron enviadas desde St. Petersburg, Florida. Sin embargo, los sobres
que sí contenían ántrax –enviados al senador
Tom Daschle y al presentador de noticias de la NBC Tom Brokaw– fueron
enviados desde Trenton, Nueva Jersey. Esta ciudad siempre fue considerada
como un centro de fundamentalistas conectados con Al Qaeda. Es sabido
que el sheik Omar Abdel-Rahman, quien operaba en Jersey City, era como
un imán para militantes islámicos jóvenes de todo
el mundo, incluido El Sayyid Nosair, quien mató al rabino racista
Meir Kahane, y Ramzi Youssef, quien se encuentra detenido por las bombas
del World Trade Center en 1993. Youssef tuvo un contacto directo con Bin
Laden y recibió fondos de la organización Al Qaeda.
El FBI también está buscando pruebas de un encuentro que
Atta y un funcionario de inteligencia iraquí tuvieron en Praga
a principios de este año. Se sabe que Irak ha acumulado una cantidad
suficiente de armas de destrucción masiva como para permitirles
aniquilar a la población mundial. Richard Butler, ex inspector
de Naciones Unidas de las armas iraquíes, dijo ayer que había
pruebas de que Al Qaeda había adquirido ántrax de Irak.
Butler declaró que el gobierno egipcio creía que la bacteria
podría haber sido entregada en aquel encuentro. “No creo que
los grupos terroristas –Al Qaeda, Osama bin Laden– pudieran
hacer ántrax por su cuenta”, le dijo a la CNN. “Por eso,
podría haberlo fabricado algún científico en algún
lugar, obviamente. De lo que tenemos que estar seguros por sobre todas
las cosas es si esto proviene de un país que financia al terrorismo
como una cuestión política, como sabemos que hace Irak.
Y hay un informe creíble, aunque no del todo verificado, de que
ellos realmente han entregado ántrax al mismo grupo que atacó
el World Trade Center”. También agregó que el gobierno
egipcio estaba colaborando con lainvestigación. “Ellos creen
que es posible que, no muchos meses atrás, ese ántrax en
una pequeña cantidad fuera entregada en Praga, República
Checa, a Mohamed Atta, uno de los pilotos que voló al World Trade
Center”, dijo. Fuentes de inteligencia creen que los operarios de
Bin Laden habían estado preparando espectaculares ataques con armas
biológicas por un número de años. Se cree que los
virus que causan enfermedades mortales como el ébola y samonella
fueron adquiridos en Rusia y que el ántrax fue obtenido en Corea
del Norte. Las fuentes consideran que algunos de los terroristas han sido
entrenados para desarrollar cultivos biológicos letales, así
como para saber utilizarlos como armas en laboratorios ad hoc.
A pesar de no haber encontrado conexión directa entre el ántrax
y Al Qaeda, el vicepresidente Dick Cheney ya ha dicho “tenemos que
sospechar”. Señaló que los manuales de los terroristas,
que según se sabe han sido utilizados por los seguidores de Bin
Laden, contenían instrucciones para el uso de armas biológicas.
Cheney dijo: “Sabemos que Bin Laden ha tratado de adquirir armas
de destrucción masiva, tanto biológicas como químicas.
Sabemos que él ha entrenado gente en sus campos de Afganistán.
Por ejemplo, tenemos copias de los manuales que ellos utilizaban para
entrenar gente con respecto a cómo desplegar y usar este tipo de
sustancias. Entonces, uno empieza a unir las piezas. Una vez más,
no hemos terminado la investigación y quizá sea una coincidencia,
pero soy escéptico al respecto”.
De The Guardian de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: G. C.
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