Por Fernando Cibeira

En la madrugada de hoy, el presidente Fernando de la Rúa habrá aterrizado en Buenos Aires trayendo, se supone, una decisión tomada sobre el nuevo gabinete “homogéneo”, su respuesta a la derrota electoral del domingo. Desde España, lo confirmó el vocero Juan Pablo Baylac que adelantó que algunos cambios se darán a conocer hoy, aunque no pudo especificar si se trataba de los nuevos ministros o de las medidas económicas. El anticipo sirvió para alterar los ánimos de los ministros que no viajaron y se quedaron en sus despachos a pensar en qué será de ellos a partir de hoy. La ansiedad dio lugar para que circularan nuevos rumores de modificaciones, siempre en la hipótesis de la “delarruización”, aunque algunos funcionarios cercanos al Presidente prefieren hablar de “más radicalismo”.
De nuevo, el Presidente aseguró que no será sordo frente al resultado de las elecciones. “Las urnas tienen siempre un mensaje y hay que hacer lo que el pueblo requiere”, dijo desde Valladolid, en donde participó de un congreso de lingüística (ver aparte). De la Rúa viene hablando en el mismo sentido desde el domingo a la noche pero todas las señales que salen del Gobierno sugieren que los cambios de ministros estarán orientados a evitar divergencias internas, mientras que el plan que prepara Domingo Cavallo tendrá como principal objetivo más recortes presupuestarios. Es decir, ni hablar de un cambio de modelo o algo parecido, el dato más evidente que parecería indicar el holgado triunfo opositor en los comicios.
Baylac insistió en que los cambios son una “decisión personalísima” del Presidente aunque adelantó que Cavallo “está confirmadísimo”. De la Rúa viajó a España con algo así como un grupo íntimo: el canciller Adalberto Rodríguez Giavarini y varios de los sushies: su hijo Antonio, el ministro de Educación, Andrés Delich, el secretario de Turismo, Hernán Lombardi, y el de Cultura, Darío Lopérfido. No obstante, en la comitiva aseguraron que el Presidente “se mueve con mucho hermetismo” y que está preocupado en que no haya filtraciones sobre sus próximos pasos.
Pero, igual que en los últimos días, aquí cada funcionario tenía su libreto. La que sigue es una síntesis de las versiones:
Trabajo: era una de las carteras que más rumores concentraba. Se decía que Patricia Bullrich no seguiría y que el Gobierno buscaría su reemplazante entre un sindicalista o un radical de buen diálogo con la oposición. Incluso, unos días atrás el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, retomó la costumbre de los asados con los sindicalistas “gordos” en el que definió la situación de la ministra. “Bullrich ya fue”, habría asegurado a los postres Colombo, según la versión de los sindicalistas. En caso de que el reemplazante sea un político, se habla de Rafael Pascual o de Juan Manuel Casella. Cerca de Bullrich, sostenían que los cambios no podían reflejar un mensaje equivocado: “La gobernabilidad no puede estar sostenida por la defensa de privilegios”.
Desarrollo Social: el frepasista Juan Pablo Cafiero es uno de los principales candidatos al recambio, sobre todo luego de que en un reportaje de ayer en Página/12 retomara su enfrentamiento con Cavallo por los recortes. Si Bullrich no sigue en Trabajo es la principal candidata a sucederlo, pero el recambio incluiría la unificación de las áreas de asistencia en la línea del proyecto de crear una Agencia Social.
Salud: aunque acompaña a De la Rúa desde hace añares, muchos mencionan a Héctor Lombardo como uno de los seguros salientes, dado lo opaco de su gestión. Buena parte de Salud se uniría a la nueva cartera Social.
Interior: es común que en las derrotas en buena medida se responsabilice al ministro político, por más que Ramón Mestre haya tenido poco o nula incidencia en el armado electoral. Mestre sería reemplazado con alguien de buena relación con el peronismo. Aquí también se menciona a Pascual, aunque sus posibilidades decaen si se concreta la unificación con el ministerio de Justicia.
Cultura: uno de los proyectos que dan vueltas estipula elevar Cultura a ministerio y unirlo a Educación. Entre los nombres que circularon ayer para el cargo surgió el de Teresa Anchorena, quien vendría dialogando con el Coti Nosiglia. También se menciona al escritor Marcos Aguinis quien suele tener largas tertulias con el Presidente. Sugestivamente, Lopérfido fue el único integrante de la comitiva presidencial que se quedó en España.

SI NO TRAEN HOY A ROSELLO, QUEDARA EN LIBERTAD
Una demora de altísimo riesgo

Por Laura Vales

La extradición desde Brasil de Eliseo Roselló, el ex concejal que acusó a Fernando de la Rúa de haber tenido a un ñoqui de jardinero en su quinta de Pilar, se postergó ayer sin explicaciones y entró en una zona de incertidumbre. En el juzgado a cargo del caso aseguran que Roselló estará finalmente hoy en Buenos Aires, pero los fiscales alertaron, en cambio, que la Policía Federal debió haberlo traído ayer y que el operativo de traslado se viene demorando sospechosamente desde hace casi un mes. La cuestión de la demora no es menor: si la Federal no va a buscar al viejo puntero del radicalismo, el jueves Brasil lo dejará en libertad. La semana pasada, el Gobierno adujo que no tenía dinero para el traslado.
Roselló está preso en Belo Horizonte desde hace 10 meses. Todos los trámites para su vuelta a casa están terminados desde el 20 de septiembre; a partir de entonces la Justicia esperó sin suerte, día tras día, la llegada del detenido.
El jueves pasado, ante la insistencia de los fiscales, el secretario de Seguridad Enrique Mathov presentó en el juzgado de Alberto Baños una nota manifestando que no había disponibilidad de fondos para traer a Roselló, detalló uno de los investigadores. Superado su azoramiento, los fiscales decidieron denunciar a Mathov por incumplimiento de los deberes de funcionario público.
La denuncia, con la firma de Mónica Cuñarro y Marcelo Roma (quienes investigan el caso de los ñoquis junto a sus pares Horacio Amelotti y César Troncoso) recayó en el juzgado de María Servini de Cubría.
Aunque en el ámbito judicial confían en que el Gobierno no va seguir dilatando el traslado y traerá hoy al preso, todo el proceso no hizo más que alimentar suspicacias. En ámbitos políticos se habla de otro tipo de preocupaciones: de acuerdo a lo que declare el preso, bien podría reflotarse la cuestión del contrato del jardinero que trabajó en la quinta con un sueldo pago por la municipalidad. En el caso De la Rúa figura como imputado no procesado.
Roselló y el Presidente son viejos enemigos. De la Rúa lo acusó, en 1998, de haber estado detrás de las escuchas telefónicas en las que sus hijos Aíto y Antonio hablaban con profesores de la UBA sobre sus exámenes universitarios. El primer mandatario ocupaba por entonces la jefatura de Gobierno de la ciudad y lo denunció ante la Justicia por extorsión, tras plantear que Roselló lo venía amenazando con ventilar esas grabaciones si no le daban la concesión del estacionamiento del Teatro Municipal San Martín.
Dos años antes, en 1996, cuando se difundió un video en el que se veía a Inés Pertiné con un grupo de amigas viajando a Miami con gastos pagos por el ex dueño de VCC Samuel Liberman, la revista Noticias publicó que Roselló era el autor intelectual de la filmación.
El ex edil estuvo prófugo un año y cuatro meses. Desapareció el 20 de julio del 99, apenas lo procesaron por malversación de caudales públicos en la causa de los ñoquis.
Cuando lo encontraron en Brasil, dio la impresión de que planeaba establecerse ese país, donde había hecho importantes inversiones y formado pareja con una brasilera. En la localidad de Campinas, a 300 kilómetros de Belo Horizonte, manejaba una fábrica de procesamiento de ajo. Fuentes judiciales detallaron ayer que en los últimos meses ningún abogado se presentó en su nombre para ver la marcha del expediente.

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