Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


Dura discusión entre peronistas:
provincias grandes contra chicas

Los presidenciables quieren acordar con el Gobierno. Los
de provincias chicas prefieren presionarlo, tras la victoria.

José Manuel de la Sota fue duramente criticado por sus pares.
“Ustedes son unos boconazos”, le reprochó uno de sus pares.

Por F. Y.

Estaba la totalidad de los gobernadores justicialistas en el Consejo Federal de Inversiones (CFI). Los de las provincias grandes y los de las chicas. Cada uno llegó a tratar de imponer su posición. Los tres primeros, Córdoba, Buenos Aires y Santa Fe, intentaron insistir con “apoyar la gobernabilidad” para evitar el desastre. Las chicas, en cambio, impulsaron la idea de “aprovechar la cuota de poder que nos otorgaron los votos” y exigir que el Estado nacional cumpla con el pago de las deudas provinciales y la coparticipación a través distintas medidas de acción directa. No hubo acuerdo.
La reunión fue corta pero intensa. Colmada de fuertes cruces influidos por las aspiraciones políticas de cada sector y que se sintetizan en cuál grupo hegemonizará la posición del peronismo frente al nuevo escenario que abrió a partir de los comicios del domingo pasado.
Los tres grandes, José Manuel de la Sota, Carlos Reutemann y Carlos Ruckauf, mantuvieron durante el encuentro una fuerte posición de apoyo a la “gobernabilidad” y de “dejar para más adelante la discusión política”. Una forma elegante de dejar de lado la intención de las provincias chicas de tallar en la disputa por la futura candidatura presidencial.
Las once provincias chicas, enroladas en el Bloque Federal, llegaron ayer al CFI con un documento bajo el brazo. Lo habían consensuado a la mañana en la Casa de Salta. El texto, que no trascendió, proponía desde la derogación de los superpoderes, la posibilidad de organizar una movilización a Plaza de Mayo hasta el extremo de iniciar juicio político a funcionarios nacionales en caso de no cumplirse con los compromisos económicos. Juicios que incluían tanto al ministro Domingo Cavallo como al propio presidente Fernando de la Rúa.
Los mandatarios de las provincias grandes fueron rechazando punto por punto. Lo que generó un clima de tensión que hizo temer una ruptura sobre todo cuando el Bloque Federal les anunció formalmente la intención de imponer al senador electo Ramón Puerta como el futuro presidente provisional del Senado. “Si ellos no saben gobernar, nosotros podemos enseñarles”, dijeron los mandatarios de este sector en referencia a la posibilidad de que Puerta ocupara el cargo de De la Rúa cuando se ausentara del país o “por si nos encontramos en una situación de acefalía”.
La reacción, según confiaron algunos participantes del cónclave, provino del propio Ruckauf quien les recordó a los presentes que, si bien no tenía nada en contra del misionero, les recordaba que “desde que asumió como diputado apenas participó de un par de sesiones”.
–Entonces nosotros tampoco queremos que (el diputado duhaldista, Eduardo) Camaño sea presidente de la Cámara de Diputados. Y sin los votos de nuestros diputados ustedes no van a ningún lado –retrucó uno de los gobernadores de las provincias chicas.
Pero éste no fue el único cruce. Cuando se habló de la intención de realizar juicios políticos a los funcionarios que no cumplan con las leyes como la de coparticipación federal, el que reaccionó esta vez fue De la Sota. El gobernador cordobés dijo que “No pueden salir con esta idea. Ustedes se reúnen antes, se cortan solos y después salen a hablar”. Durante un segundo hubo silencio. Pero inmediatamente tomó la palabra el salteño Juan Carlos Romero, quien a viva voz lo sorprendió: “¿Y ustedes que son unos boconazos y salen a hablar en nombre del peronismo y nosotros nos tenemos que quedar callados? ¿Quién les dice algo?”. El que se quedó callado esta vez fue De la Sota, quien sin decir agua va se retiró del séptimo piso del CFI. Ya no había más posibilidades de seguir conversando. Poco a poco se fueron retirando. Hoy, volverán a encontrarse. Esta vez también estarán presentes los gobernadores de la Alianza.

 


 

LOS GOBERNADORES ALIANCISTAS EN LA ROSADA
Sin acuerdos con Cavallo

Por F.C.

Como de costumbre, el Gobierno empezó la ronda con los amigos, aunque es evidente que cada vez lo son menos. La reunión de la plana mayor de la Rosada con los gobernadores de la Alianza se centró en la propuesta del ministro Domingo Cavallo de bajarle los intereses de la deuda de las provincias hasta el 7 por ciento a cambio de recortes en el envío de fondos por coparticipación. Los gobernadores quedaron en estudiar el esquema y consensuarlo con sus colegas peronistas en la reunión que mantendrán hoy a partir de las 11. Como sucede cada vez que inician una rueda de conversaciones con los gobernadores, la Rosada la convirtió en su objetivo primordial. Tanto es así que aseguraban que no se daría a conocer el nuevo gabinete hasta que no hubiera un acuerdo.
Lo más notorio de la conferencia de prensa que dieron el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, y el gobernador de Chaco, Angel Rozas, fue que salieron diciendo lo mismo que el día antes, como si la reunión de cuatro horas de ayer de funcionarios y gobernadores del oficialismo no hubiera servido de mucho. Rozas fue muy explícito en las complicaciones casi paralizantes que le ocasionan el nivel de endeudamiento de su provincia y las tasas que están pagando. “Tengo deuda por el 40 y el 47 por ciento de interés”, explicó.
El chaqueño, como los otros gobernadores, le pasaron la propuesta a sus ministros de Economía para que analicen el ahorro que significarían en sus cuentas semejante reducción de intereses. En las cuentas de la Jefatura de Gabinete, con una deuda refinanciada en alrededor del 10 por ciento, las provincias quedarían muy cerca de alcanzar el ansiado déficit cero. Además, el Gobierno también adelantó que emitirá 2.300 millones en LECOP que se distribuirán entre las provincias de acuerdo a sus gastos.
En la reunión hablaron el presidente Fernando de la Rúa, Colombo, Cavallo y los gobernadores. Como es sencillo suponer, los momentos de tensión fueron cuando intervino el jefe de Hacienda. “Siempre se saca la responsabilidad de encima. La culpa de todo la tenemos nosotros o los ministros que estuvieron antes que él”, rumiaba su bronca luego uno de los mandatarios aliancistas.
El Gobierno explicó que no tenían dinero para enviar a las provincias ni para saldar la deuda que tienen acumulada por los atrasos en los pagos de las sumas convenidas por la coparticipación. Según el acuerdo que firmaron a fin del año pasado, el Gobierno debe girar 1364 millones de pesos mensuales a las provincias, suma que ahora quiere reducir a cambio de la refinanciación de las deudas.
Cavallo, cuando intervino, le dio a entender a los gobernadores que los gravísimos problemas financieros de los últimos meses no eran tanto responsabilidad suya como de los gobernadores que no administran bien. “Con Cavallo no se puede charlar nunca tranquilo, sobre todo si no pensás como él”, explicaba uno de los gobernadores. A la salida, los aliancistas tuvieron una mini reunión entre ellos y quedaron en seguir conversando hoy. Ninguno quedó conforme pero tampoco dijeron que no. “En esto no hay gobernadores de un signo y gobernadores de otro, todos tenemos los mismos problemas y queremos más o menos lo mismo”, explicó en la conferencia de prensa Rozas. Colombo adelantó que el gobierno espera tener una rápida respuesta pero siempre “por consenso”, fiel al estilo del delarruismo. Hoy los gobernadores le darán su respuesta.

 

PRINCIPAL