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Por Martín
Piqué
 Se habían tomado un
descanso, casi obligado, que duró tres semanas. Durante ese lapso,
votaron sin entusiasmo en las elecciones –muchos hasta llamaron a
impugnar el voto–, se asombraron ante la paranoia del ántrax
y comprobaron que el ajuste oficial sobrevive a cualquier “voto protesta”.
No estaban en la ruta, aunque seguían con el trabajo en las cooperativas,
con las reuniones y los talleres de formación que ya son parte
de la vida cotidiana en Isidro Casanova, Solano o Florencio Varela. Parecían
ausentes, pero los piqueteros, que de ellos se trata, están de
vuelta: ayer, Juan Carlos Alderete y Luis D’Elía convocaron
a una “jornada nacional de protesta” para el miércoles
próximo, que consistirá, centralmente, en un corte de ruta
masivo en la rotonda de San Justo.
“El corte del miércoles va a ser muy fuerte, porque esta vez
vamos a cortar la Ruta Nacional 3 y la ruta provincial 4 –aseguró
D’Elía, dirigente de la CTA y diputado provincial electo por
el Polo Social–. Vamos a pedir que se derogue la ley del ajuste y
que se sancione un proyecto de emergencia social.” La medida fue
resuelta durante una reunión de la mesa de la “asamblea nacional
piquetera”, que integran D’Elía, Alderete y José
Villalba, del Futrade, ligado al Partido Obrero. Mientras se realizaba
ese encuentro, que tuvo como escenario la iglesia del Sagrado Corazón
de San Justo, una nueva organización marchaba por las calles de
la Capital, revelando las internas de los desocupados.
En diálogo con Página/12, D’Elía enumeró
los reclamos del movimiento piquetero. “Rechazamos el recorte de
los planes sociales, exigimos la continuidad y el pago, y además
le exigimos a la provincia que termine las cinco escuelas que se comprometió
a terminar en La Matanza y dejó a medio construir”, dijo.
En relación con los planes Trabajar, la demanda consiste en el
cumplimiento del pago a 93.000 beneficiarios que aún no cobraron
porque el Ministerio de Economía se niega a aprobar los pagos.
Por esta razón, incluyeron un reclamo polémico, que parece
copiado de Raúl Alfonsín: la renuncia de Domingo Cavallo.
En la protesta del miércoles participarán también
los docentes de Ctera, los gremios aeronáuticos y judiciales y
otros nucleados en la CTA. Según el propio D’Elía,
varios sindicatos cortarán el tránsito en la Capital, y
el plan de lucha continuará en 45 días, con la “tercera
asamblea nacional de piqueteros”. “Anteriormente habrá
otros ocho encuentros similares a nivel regional”, informó
el dirigente de la FTV, quien espera que esta movida vuelva a capturar
la atención pública como hace dos meses.
Al mismo tiempo que los líderes piqueteros debatían en La
Matanza, otro sector (opuesto a esa línea mayoritaria) debutaba
con una marcha por las calles porteñas. Se trataba de la “Coordinadora
de Trabajadores Aníbal Verón” (CTD), que agrupa a distintas
vertientes provenientes del Movimiento de Trabajadores Desocupados “Teresa
Rodríguez”. Esa organización sufrió una ruptura
hace unos meses: muchos de sus integrantes rompieron con el dirigente
Roberto Martino, el mismo que encabezó la toma de una sucursal
del Banco Provincia y del Ministerio de Trabajo provincial. “Tenemos
diferencias orgánicas y metodológicas. No nos gusta su política
de aparato. Además ésas fueron acciones por la libre.”,
explicó a este diario Juan Cruz Daffunchio, de la CTD de Florencio
Varela.
Ese sector se propone construir una mesa paralela a la de D’Elía
y Alderete, y al primero lo acusan de “traidor”. “Han usado
a la gente. D’Elía desde el domingo es diputado: nos preguntamos
de qué dirigentes hablamos porque le han dado tregua a este gobierno
para que siga aplicando estas políticas”, afirmó Nina
Poloso, la esposa de Raúl Castells. D’Elía contestó
las críticas: “Es muy llamativo que a cinco días de
las eleccciones estén haciendo movilizaciones que no son representativas
y enseguida empiecen a acusar de traidores a los compañeros”,
se quejó.
ASAMBLEA
DEL FRENTE NACIONAL CONTRA LA POBREZA
Todos por el seguro de empleo
El Frente Nacional contra la
Pobreza (Frenapo) realizará hoy su segunda asamblea, en donde,
entre otros puntos, analizará el cronograma y las modalidades de
la campaña para impulsar la consulta popular por un seguro de empleo
de 380 pesos para cada jefe de hogar desocupado, y una asignación
universal de 60 pesos por hijo menor de 18 años. El encuentro se
hará a las 10 en el Teatro Colonial de Avellaneda, en Avenida Mitre
141.
A través de un comunicado, el Frenapo aseguró que “estarán
presentes representantes de las organizaciones sociales, empresariales,
sindicales, de derechos humanos, movimientos cooperativos y partidos políticos
de todo el país que participan de las juntas promotoras de la consulta
popular”. En la asamblea también realizarán un “balance
y perspectiva de la situación política y económica
de la Argentina”. Y analizarán los resultados de la Marcha
Nacional contra la Pobreza, que llegó a más de 100 ciudades
del país y que culminó con un acto en Plaza de Mayo el 21
de setiembre.
Los miembros del Frente impulsan una consulta popular para fin de año,
para que la ciudadanía se exprese sobre la propuesta de instalar
un seguro de empleo y formación de 380 pesos mensuales para cada
familia cuyo jefe esté sin trabajo, y una asignación de
60 pesos por hijo menor de 18 años. La consigna con la que el Frenapo
difunde su iniciativa es “Ningún hogar pobre en la Argentina”.
Entre las organizaciones que forman el Frente están el Instituto
Movilizador de Fondos Cooperativos, la Central de los Trabajadores Argentinos,
la Federación Agraria Argentina, la Asamblea Permanente por los
Derechos Humanos (APDH), el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS)
y las Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora.
En tanto, en las juntas promotoras figuran, entre otros, el periodista
de Página/12 Horacio Verbitsky, la monja Martha Pelloni, el decano
de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, Fortunato Mallimaci, y
los diputados del ARI Alfredo Bravo, Héctor Polino y Elisa Carrió.
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