Por Martín
Piqué
Parece una telenovela, de esas
que se prolongan casi hasta el hartazgo: la negociación entre los
gobernadores y el Ejecutivo por la coparticipación federal de impuestos
se suspendió por quinta vez desde que comenzaron las reuniones.
Esta vez, las tratativas fracasaron porque la Nación no se comprometía
a garantizar la refinanciación de las deudas provinciales al 7
por ciento, un reclamo indeclinable para los mandatarios reunidos en el
Consejo Federal de Inversiones (CFI). El malhumor se potenció,
además, por el sorpresivo viaje de Domingo Cavallo a Washington.
Ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo, los gobernadores reforzaron
sus demandas con una contrapropuesta consensuada por todos
tanto del PJ como de la Alianza que fue enviada por fax al
jefe de Gabinete, Chrystian Colombo. El Gobierno deberá responder
hoy a las 12, cuando se reanuden las negociaciones.
Todo había comenzado al mediodía en la Casa de Córdoba,
donde José Manuel de la Sota recibió a sus pares del PJ,
a excepción del santiagueño Carlos Juárez y del bonaerense
Carlos Ruckauf, quien se encontraba sobrevolando las inundaciones junto
al presidente Fernando de la Rúa. Eran las horas del mediodía,
y Carlos Reutemann anunciaba que los gobernadores del PJ presentarían
una contrapropuesta de cinco puntos. Mientras los peronistas
redactaban lo que luego se difundió como el Compromiso Federal
por el crecimiento de la Argentina, los de la Alianza se encontraban
reunidos con Colombo. Luego se dirigieron a la representación de
la provincia del Chaco ubicada al lado de la sede cordobesa
donde analizaron el documento que proponían los justicialistas.
A la tarde la acción se trasladó al quinto piso del CFI,
en San Martín y Tres Sargentos, donde los radicales, más
el neuquino Jorge Sobisch y el frepasista jefe de gobierno porteño
Aníbal Ibarra, propusieron algunos cambios que fueron aceptados
e incluidos en el texto original escrito por los peronistas. De todos
los aliancistas, los únicos ausentes eran Oscar Castillo (Catamarca)
y José Luis Lizurume (Chubut).
La presentación ideada por los gobernadores del PJ se concentra,
exclusivamente, en torno a cinco puntos (ver aparte).
En uno de los puntos más problemáticos para el Gobierno,
el cuarto, los gobernadores remarcan que la Nación debe garantizar
la refinanciación de las deudas de las provincias al 7 por
ciento sin capitalización sobre tasa, con dos años de gracia
de amortización de capital y 15 años de plazo. Esa
garantía, precisamente, es la que el Ejecutivo, a través
de Colombo y del secretario de Hacienda, Jorge Baldrich, aún no
ha podido asegurar. Porque la banca privada no parece muy dispuesta a
aceptar una tasa tan baja. Desde el efecto tequila, nadie refinancia
al 7 por ciento, me suena a irrealidades, comentó ayer un
gobernador del PJ, escéptico, a Página/12.
A cambio de la refinanciación del 7 por ciento, las provincias
beneficiadas se comprometen a aceptar un recorte del 13 por ciento en
los montos coparticipables que reciben cada mes del Gobierno nacional.
Finalmente, en el quinto punto del documento se ratifica la emisión,
validez y circulación de los Lecop hasta la suma de 1300
millones.
A pesar de la energía puesta en la contrapropuesta,
nadie quiso arriesgarse demasiado con respecto a su factibilidad. El propio
De la Sota, por ejemplo, reconoció que no podía dar
una opinión sincera sobre su éxito porque no conocía
la opinión del gobierno, aunque luego subrayó
que todos los signos políticos nos pusimos de acuerdo.
Al mismo tiempo que De la Sota mostraba su habitual prudencia, los peronistas
del Frente Federal se pintaban la cara y hablaban de ánimos
rupturistas.
La bronca de los peronistas de las provincias chicas tenía
varios motivos: el primero, básicamente, se centraba en las diferencias
entre las propuestas del Ejecutivo y lo que antes había prometido.
Lo que pactan no es lo que escriben se quejaba ante este diario
un gobernador del FrenteFederal. Pactan una cosa y escriben otra.
El señor Liendo y el señor Baldrich no entienden nada de
política. Otro mandatario agregaba en la misma sintonía:
El problema es que no le creemos al gobierno ni a Cavallo, que acuerdan
una cosa y escriben otra.
A ese punto irritante se le sumó luego la ausencia de Cavallo,
quien se había partido intempestivamente a Estados Unidos. Esto
es joda, primero se fue De la Rúa a España, y después
Cavallo se va a Estados Unidos, se reía uno de los principales
operadores de las provincias chicas. En ese momento, la reunión
parecía naufragar: los peronistas se mostraban de acuerdo en seguir
presionando al Gobierno, mientras que los radicales aparecían divididos:
Sergio Montiel y Alfredo Avelín secundaban a los del PJ, hasta
tal punto que Angel Rozas el encargado de hablar con Colombo
bautizó Bin Laden al sanjuanino. Pablo Verani, en cambio,
se mostró más proclive al Ejecutivo. La reunión terminó
sin más definiciones, cuando Adolfo Rodríguez Saa anunció
el cuarto intermedio hasta hoy a las 12.
En el caso de que el Gobierno no acepte la contrapropuesta, en el PJ ya
preparan varias acciones legislativas que funcionarían como castigo.
Uno de los referentes del Frente Federal adelantó ayer a este diario
que la bancada del PJ en el Congreso no sólo volverá a la
carga para intentar derogar la ley que le dio a Cavallo las facultades
extraordinarias. Mañana (por hoy) le sacamos los superpoderes,
comentaba, exultante, a Página/12, para luego agregar que los legisladores
peronistas impulsarán otro punto que podría enervar aún
más al Ejecutivo: la coparticipación del impuesto del cheque,
un viejo reclamo de las provincias, al que ahora que se ven fuertes (después
de las elecciones del 14 de octubre) creen estar en condiciones de convertir
en ley en el Parlamento.
Un documento consensuado
El documento consensuado ayer por los gobernadores fue llamado
Compromiso Federal por el Crecimiento de Argentina. La declaración
es la siguiente:
1. Ratificar la garantía de $ 1.364 millones mensuales
para las provincias, con goteo automático, según lo
dispuesto por la ley 25.400.
2. Aceptar el pago de la deuda devengada a favor de las provincias
por garantía ley 25.400 a octubre del año 2001 dentro
de los cinco primeros días del mes de noviembre subsiguiente
y la devengada en noviembre y diciembre, dentro de los cinco días
posteriores de vencido cada mes de hasta el 13% y que no podrá
exceder de 900 millones en LECON (Letras de Cancelación de
Obligaciones Nacionales) a cargo del Poder Ejecutivo nacional. Hasta
que el gobierno nacional emita dichas letras, en un plazo que no
podrá ser superior a los noventa días, los gobiernos
provinciales aceptan recibir los importes adeudados y a adeudar
por la Nación, en certificados LECOP, creados según
Decreto 1004/01, a cargo de la Nación y que serán
canjeados por los LECON.
3. Aceptar el pago en los mismos títulos y en las mismas
condiciones de los certificados del pago por diferencias del IVA,
cuyos intereses en tasa Libor son a cargo de la Nación y
del acuerdo del 15 de noviembre del 2000 entre el Estado nacional
y la provincia de La Rioja, asimismo se acepta el pago en LECON
de las deudas existentes por Fonavi, Acuerdos Federales, Acuerdos
especiales, etc.
4. Aceptar la refinanciación de las deudas de las provincias
al 7% sin capitalización de sobre tasa, con garantía
de la Nación, con 2 años de gracia en amortización
de capital y 15 años de plazo. Las provincias que refinancian
sus deudas podrán autorizar al gobierno nacional a que practique
un descuento de hasta el 13% de su garantía ley 25.400, quedando
expresamente aclarado que las que no recurren a este sistema de
refinanciación, mantendrán el piso garantizado en
el punto 1).
5. Ratificar la emisión, validez y circulación
de LECOP (Decreto 1004/1) hasta la suma de 1.300 millones a cargo
exclusivo de las provincias, para aquellas que lo soliciten y con
las mismas características de las LECON que utiliza el gobierno
nacional para abonar la deuda de garantía Ley 25.400 a las
provincias.
Este acuerdo será homologado en los autos Provincia
de Buenos Aires y otro vs. Estado Nacional radicado ante la
Suprema Corte de Justicia de la Nación.
|
|