mujeres
decir
que esa mujer era dos mujeres es decir poquito debía tener
unas 12397 mujeres en su mujer / era difícil saber con quién
trataba uno en ese pueblo de mujeres / ejemplo:
yacíamos en un lecho de amor /
ella era un alba de algas fosforescentes / cuando la fui a abrazar
se convirtió en singapur llena de perros que aullaban / recuerdo
cuando se apareció envuelta en rosas de aghadir / parecía
una constelación en la tierra / parecía que la cruz
del sur había bajado a la tierra / esa mujer brillaba como
la luna de su voz derecha /
como el sol que se ponía en su voz / en las rosas estaban
escritos todos los nombres de esa mujer menos uno / y cuando se
dio vuelta / su nuca era el plan económico / tenía
miles de cifras y la balanza de muertes favorables a la dictadura
militar / o sea
nunca sabía uno adónde iba a parar esa mujer / yo
estaba ligeramente desconcertado / una noche le golpié el
hombro para ver con quién era y vi en sus ojos desiertos
un camello / a veces
esa mujer era la banda municipal de mi pueblo / tocaba dulces valses
hasta que el trombón empezaba a desafinar / y los demás
desafinaban con él / esa mujer tenía la memoria desafinada
/
usté podía amarla hasta el delirio / hacerle crecer
días del sexo tembloroso / hacerla volar como pajarito de
sábana / al día siguiente se despertaba hablando de
malevic
la memoria le andaba como un reloj con rabia / a las tres de la
tarde se acordaba del mulo que le pateó la infancia una noche
del ser / ellaba mucho esa mujer y era una banda municipal /
la devoraron todos los fantasmas que pudo alimentar con sus miles
de mujeres / y era una banda municipal desafinada yéndose
por las sombras de la placita de mi pueblo /
yo / compañeros / una noche como ésta que nos empapan
los rostros que a lo mejor morimos /
monté en el camellito que esperaba en sus ojos y me fui de
las costas tibias de esa mujer /
callado como un niño bajo los gordos buitres que me comen
de todo / menos el pensamiento de cuando ella se unía como
un ramo de dulzura y lo tiraba en la tarde /
yo también
escribo cuentos
a eduardo
había una vez un poeta portugués / tenía cuatro
poetas adentro y vivía muy preocupado / trabajaba en la administración
pública y dónde se vio que un empleado público
de portugal gane para alimentar cuatro bocas /
cada noche pasaba lista a sus poetas incluyéndose a sí
mismo / uno estiraba la mano por la ventana y le caían astros
allí / otro escribía cartas al sur / qué están
haciendo del sur / decía /
de mi uruguay / decía / el otro se convirtió en un
barco que amó a los marineros / esto es bello porque no todos
los barcos hacen así / hay barcos que prefieren mirar por
el ojo de buey /
hay barcos que se hunden / Dios camina afligido por el fenómeno
ése / es que no todos los barcos se parecen a los poetas
del portugués / salían del mar y se secaban los huesitos
al sol /
cantando la canción de tus pechos / amada / cantaban que
tus pechos llegaron una tarde con una escolta de horizontes / eso
cantaban los poetas del portugués para decir que te amo /
antes de separarse / tender la mano al cielo / escribir cartas al
uruguay
que mañana van a llegar / mañana van a llegar las
cartas del portugués y barrerán la tristeza / mañana
va a llegar el barco del portugués al puerto de montevideo
/ siempre supo que entraba en ese puerto y se volvía más
hermoso /
como los cuatro poetas del portugués cuando se preocupaban
todos juntos por el hombre de la tabaquería de enfrente /
el animal de sueños del hombre de la tabaquería de
enfrente / galopando con como josé gervasio de artigas por
el hambre mundial /
el portugués tenía cuatro poetas mirando al sur /
al norte / al muro / al cielo les daba a todos de comer con el sueldo
del alma / él se ganaba el sueldo en la administración
del país público / y también mirando el mar
que va de lisboa al uruguay / yo siempre estoy olvidando cosas /
una vez me olvidé un ojo en la mitad de una mujer / otra
vez me olvidé una mujer en la mitad de portugués /
me olvidé el nombre del poeta portugués /
de lo que no me olvido es de su barco navegando hacia el sur /
de su manita llena de astros / golpeando contra la furia del mundo
/ con el hombre de enfrente en la mano
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