Por Claudio Zlotnik
El presidente de la Reserva
Federal, Alan Greenspan, les obsequió ayer a la Argentina,
y a los demás países con deudas a tasa flotante, una nueva
rebaja de medio punto en los tipos de referencia. La banca central estadounidense
rebajó el costo del dinero por décima vez en el 2001, dejando
la tasa directriz en el 2 por ciento anual, el nivel más bajo en
40 años, y 4,5 puntos por debajo de su nivel a principios de año.
A su vez, la tasa de descuento (pases activos de la FED a los bancos)
cayó al 1,5 por ciento. Pese a la ofensiva, tanto en la city como
en Wall Street creen que Greenspan volverá a actuar el mes que
viene. El objetivo, claro está, no es beneficiar a los países
deudores aliviándoles la cuenta de sus intereses, sino impulsar
un rápido despegue de la economía doméstica.
En medio de la gravedad de la crisis, la baja de la tasa internacional
es como un pequeño balón de oxígeno para la Argentina.
Es la contracara de una economía que se ha declarado en cesación
de pagos por culpa de los gravosos intereses de la deuda. No obstante,
y a diferencia de lo ocurrido en épocas de calma económica,
la caída de la tasa en Estados Unidos no implicará que la
Argentina sea, como plaza para las inversiones, más atractiva en
términos de rentabilidad. Aun a costa de sacrificar ganancias,
los financistas internacionales borraron de su menú a la Argentina,
ubicada en el último lugar en el ranking de riesgo país.
En otro momento, la brusca caída de la tasa podría haber
significado una recuperación espectacular de los activos financieros
argentinos.
En este marco, el único beneficio que podrá disfrutar Domingo
Cavallo es por la menor erogación de los servicios de la deuda.
Aunque, al respecto, las noticias podrían no ser del todo alentadoras.
Así como los ahorros en los pagos fueron disminuyendo después
del megacanje debido a que con la operación hubo un aumento
en el volumen de bonos a tasa fija en detrimento de los de renta variable,
la tendencia se profundizará en caso de que en la actual reestructuración
de la deuda los inversores se vuelquen por activos a tasa fija. Si Economía
no hubiese hecho el megacanje, el ahorro hubiese alcanzado a 976 millones;
35 millones más. La diferencia se explica porque en aquella operación
Economía se sacó del mercado 2700 millones en bonos a tasa
variable, como los Brady FRB.
Estados Unidos empezó el 2001 con una tasa del 6,5 por ciento anual.
Y tardó exactos 11 meses para bajarla en cuatro puntos y medio.
Existe dos razones para explicar semejante movida: la brusca desaceleración
de la economía y el fuerte incremento del desempleo. Ambas tendencias
se profundizaron después de los atentados del 11 de setiembre,
y por ese motivo aceleró la rebaja de la tasa desde entonces.
Recesión económica.
En el tercer trimestre, el Producto Bruto cayó 0,4 por ciento.
Y las estimaciones indican que se habrá estrechado un punto adicional
entre octubre y fin de año por el impacto de los atentados. Los
principales economistas prevén una modesta recuperación
recién para la segunda parte de 2002.
Desempleo. En octubre saltó
al 5,4 por ciento, un punto y medio sobre los niveles del año pasado.
Sólo en octubre hubo la cantidad de desempleados aumentó
en 415 mil, la mayor cantidad de despidos en más de dos décadas
para un solo mes.
El experto en economía internacional José Siaba Serrate
opinó en diálogo con Página/12 sobre la decisión
de la Fed. Greenspan quiere a los financistas de su lado. Su objetivo
es salir de la recesión sin turbulencias en los mercados. Por eso
aplica las rebajas que piden los inversores. Ya se sabe que las últimas
rebajas de la tasa tienen más impacto en el mercado financiero
que en la economía real. Habrá que esperar más tiempo
hasta ver una mejora en este terreno, señaló el economista.
VENTAJAS
PARA PAGAR DEUDAS CON LA ADUANA
Descuentos a terminales y bagayeros
Por Raúl
Dellatorre
Desde terminales automotrices,
por las irregularidades cometidas en el régimen de admisión
temporaria, hasta paseras sorprendidas in fraganti en un paso
fronterizo, todos podrán ahora regularizar su situación
con la Aduana a través de los desvalorizados títulos de
la deuda pública. Los mismos podrán ser utilizados, hasta
el 31 de diciembre, para el pago de las multas más intereses punitorios
y resarcitorios. Las autoridades aseguran que la deuda determinada por
infracciones al Código Aduanero supera los 1000 millones de dólares.
Y confían que prácticamente en su totalidad será
cancelada a través del régimen propuesto. Nunca tuvieron
una propuesta mejor para regularizar su situación, aseguró
a Página/12 César Albrisi, director de Aduanas.
Casos que en su momento tuvieron amplia resonancia, como los relativos
al régimen de admisión temporaria automotriz, y otros por
delitos menores, como el paso a pie por las fronteras de pequeños
bultos de mercancías o droga, quedarán abarcados por esta
suerte de perdón fiscal parcial. Incluso las causas judiciales
por infracción al Código Aduanero podrán cerrarse
por pago de la deuda reclamada con bonos, si el demandado desiste además
de toda acción posterior.
Era necesario limpiar todo el sistema antes de llevar a la práctica
las nuevas formas de control del tráfico vecinal fronterizo,
respondió Albrisi a la consulta de este diario. Según refirió,
hay más de 8000 expedientes abiertos por infracciones en la Aduana
Metropolitana (puerto de Buenos Aires y Aeropuerto de Ezeiza) y el doble
(16 mil) en el conjunto de las aduanas del interior.
Por otra parte, Albrisi reiteró su confianza en que, a través
del uso de herramientas tecnológicas, obtendrá mejores resultados
en el combate al contrabando que los demostrados hasta ahora. El
sistema de control preembarque resultaba caro, inútil y corrupto:
prácticamente no le faltaba tener nada más en contra,
dijo en referencia a la contratación de empresas para hacer el
control de precios, calidad y cantidades en el puerto de origen de las
importaciones.
El sistema había empezado a ser desmontado ya durante la gestión
de Héctor Rodríguez, anterior administrador de la AFIP.
El ex titular de Ingresos Públicos siempre mantuvo una actitud
crítica al sistema, aseguraron ayer altas fuentes de la AFIP, desmintiendo
así una versión en contrario que había sido recogida
por este diario ayer. Esa postura, incluso, le habría valido un
fuerte encontronazo con el ex secretario de Hacienda de la última
dictadura, Juan Alemann, vinculado a la auditoría del servicio
de control preembarque realizado por seis empresas europeas.
UN
PRESUPUESTO POCO SENSATO
El recaudador más Caro
Por Julio Nudler
La ley que no consiguió
Carlos Silvani rige ahora mediante un decreto de Fernando de la Rúa.
Lo que el último jefe menemista de la AFIP pretendía era
fijar el presupuesto de su organismo como un porcentaje de la recaudación
más exactamente, 2,5%, y lograr una autarquía
que, en los hechos, debía perpetuarlo en el cargo, más allá
de 1999. El Senado se mostró receptivo, a cambio de que Silvani
mantuviera la actitud tolerante hacia los desmanejos provinciales con
los regímenes de promoción, cuyo costo fiscal recaía
sobre la Nación. Finalmente, aquel proyecto zozobró, pero
ahora Armando Caro Figueroa ha tenido más suerte, además
de alzarse con más del 2,7% de la recaudación para consumo
de su repartición.
La regla de más recaudas, más presupuesto recibes
tendrá, desde luego, algunas consecuencias curiosas. Una es que
en los períodos en que caiga la recaudación, menores serán
los recursos con que contarán los entes recaudadores, DGI y Aduana,
para aumentar la recolección de dinero, precisamente cuando más
haga falta redoblar el esfuerzo. La disminución del presupuesto
podrá interpretarse como un castigo, pero lo cierto es que la recaudación
no depende necesariamente del empeño con que trabaje la AFIP: tanto
o más puede influir el ciclo económico. Con un régimen
tributario claramente procíclico, apoyado sobre gravámenes
como el IVA, la recaudación sube y baja con el nivel de actividad.
Otra curiosidad es que este modo de retribuir a ese organismo lo volverá
más amigo de aumentar la presión tributaria teórica
que de reducirla. Los planes de competitividad, por ejemplo, serán
mal vistos por la Administración porque restan recaudación.
En cualquier caso, el porcentaje establecido es muy alto en términos
internacionales, y llega a triplicar al de los organismos recaudadores
más eficientes del mundo.
|