Carlos Menem será citado
nuevamente a declarar ante el juez Julio Speroni, en la causa por contrabando
agravado de pólvora y armas a Croacia y a Ecuador. Pese a que el
ex presidente declaró anteayer, fuentes judiciales informaron que
el magistrado, que pertenece al fuero en lo penal económico, le
volverá a tomar declaración indagatoria. Menem está
detenido desde el 7 de junio por la causa que lleva adelante el juez Jorge
Urso, también por el affaire de las armas. Por otro
lado, la defensa del riojano espera que la Corte intime a la sala II de
la Cámara Federal para que resuelva si confirma o no su procesamiento,
además de estar expectante ante una posible definición sobre
la situación de Emir Yoma.
Speroni decidió volver a citar al ex presidente porque recibirá
hoy los 50 cuerpos de otra causa por el tema de las armas, que tenía
el juez Horacio Artabe, que se declaró incompetente. El famoso
armamento que fue contrabandeado bajo la gestión de Menem generó
tres causas: una es la que lleva adelante Urso, y las otras dos se tramitan
en el fuero económico. Una la lleva Speroni y la otra ya pasó
por las manos de Guillermo Tiscornia, Marcelo Aguinsky, Julio Cruciani
y Artabe.
La lectura del expediente y de toda la documentación adicional
determinó la nueva citación, aunque no trascendió
la fecha de la misma. De todos modos, el juez tiene plazo hasta el 21
de este mes para decidir qué hace con Menem.
Oscar Roger, uno de los abogados defensores, se mostró sorprendido
por la nueva citación que habría determinado Speroni. La
primera declaración fue muy exhaustiva. Menem respondió
todo de manera muy precisa. No veo por qué habrían de citarlo
nuevamente.
La causa por las armas está en medio de un tironeo judicial. La
Cámara ordenó que se unifiquen todos los expedientes en
el de Urso, y declinó expedirse sobre el caso de Menem hasta que
aquello no suceda. Sin embargo, Speroni rechazó apartarse de la
causa.
En el máximo tribunal están las apuestas mayores del menemismo.
Desde la semana pasada, la Corte tiene en su poder un pedido por retardo
de justicia presentado por la defensa del ex presidente. Si ese
cuerpo accede al pedido, la Cámara tendrá que resolver inmediatamente
el status de Menem. Por otro lado, la Corte estudia una queja presentada
por Emir Yoma, en donde se cuestiona la figura de asociación
ilícita, por la que también está preso su ex
cuñado. Una respuesta favorable a Yoma beneficiaría al preso
VIP de Don Torcuato.
En su declaración ante Speroni el miércoles, el ex jefe
de Estado negó cualquier irregularidad en los decretos que autorizaron
el envío de las armas. Además, según Oscar Salvi,
su otro abogado, el ex presidente reiteró su confianza
en sus ex ministros, pese a que varios de ellos, como Antonio Erman González,
Oscar Camilión y Guido Di Tella, están procesados por la
misma causa.
La de anteayer fue la tercera vez que Menem visitó los tribunales
de Comodoro Py. La primera fue aquella mañana de junio, cuando
Urso lo detuvo al considerarlo presunto jefe de una asociación
ilícita que contrabandeó armas al exterior. Pero en
esta ocasión Menem sí respondió las preguntas que
le hizo el juez. Salvi había explicado ese cambio de actitud respecto
de lo realizado ante Urso al considerar que este último no merecía
la confianza del ex presidente.
LOS
TRES MOSQUETEROS, EN LA CALLE
Aguirre quedó libre
El último de los tres
mosqueteros que quedaba en prisión recuperó ayer su
libertad. Antonio Aguirre, uno de los integrantes del trío de empresarios
que saltó a la fama a través de una cámara oculta
en la que se jactaban de tener contactos íntimos con el menemismo
y de haber participado en los distintos negociados de la década
del noventa, fue beneficiado con la falta de mérito
que le dictó el juez Jorge Urso. Por su parte, el fiscal Carlos
Stornelli apeló lo resuelto por el magistrado, que también
había dejado en libertad a los otros dos mosqueteros:
Angel Papito Ramini y al arquitecto Alberto Rossi.
Aguirre se entregó anteayer ante la Justicia, presentándose
en los mismísimos tribunales de Comodoro Py. Allí, Urso
le tomó declaración en el marco de la causa por la venta
ilegal de armas a Croacia y a Ecuador, como lo había hecho con
los otros miembros del trío. Después de pasar una noche
en la alcaidía de Comodoro Py, ayer quedó en libertad, ya
que el juez consideró que no hay elementos para procesarlo.
El primero de los mosqueteros en caer fue Ramini. Había
sido quien mostró más empeño en adjudicarse participación
en el contrabando de armas y en la mafia del oro. Pasó quince días
preso, hasta que Urso lo liberó el primero de este mes. Ramini
trató de desdecirse de lo captado por Telenoche Investiga
al decir que había querido impresionar a un cliente,
en rigor de verdad, un periodista encubierto.
El segundo en caer fue Alberto Rossi, arquitecto y sospechado de testaferro
de Carlos Menem, el 25 de octubre. Tras declarar durante cuatro horas,
también quedó libre pero ese mismo día. Aguirre,
en tanto, pasó una noche preso.
De este modo, los tres mosqueteros, que estaban asociados
en una empresa que se dedicaba a la exportación de residuos peligrosos,
están en libertad. Pero Stornelli, disconforme con la resolución
de Urso, apeló ante la Cámara Federal porteña, que
podrá revocar o no la falta de mérito dictada por el juez
para los empresarios que usaban como carta de presentación su supuesta
participación en delitos y la amistad con el contrabandista de
armas sirio Monzer Al Kassar.
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