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Por Felipe Yapur
 El hecho de que una persona consiga trabajo, en un contexto de recesión y desempleo creciente como el que atraviesa la Argentina, debería ser motivo de festejo. Algo así debe estar viviendo por estos días el senador Jorge Massat, quien consiguió trabajo para después del 10 de diciembre, cuando abandona su mullida poltrona del Senado. El santafesino lo anunció en su provincia. Eso sí, lo hizo después de que se conociera que había solicitado ser beneficiario del Fondo de Compensación Resarcitoria Temporaria, una especie de seguro de retiro que reciben sólo los legisladores que carecen de ingresos una vez que finalicen sus mandatos.
Hace ocho días, Página/12 reveló la intención de una serie de senadores y diputados de acceder a este beneficio. El primero en la lista era el representante por Santa Fe. El descubrimiento enfureció a Massat, quien juró a sus colaboradores que recurriría a la Justicia para hacer pagar a los que se atrevieron a cometer tal afrenta.
Para cuidar las formas del obligado retiro de su solicitud, el santafesino �otrora principal operador del gobernador Carlos Reutemann� anunció a través de un reportaje radial la buena nueva: �No lo voy a pedir porque tengo trabajo para después del 10 de diciembre en la actividad privada. Tengo varias propuestas, pero creo que va a ser en la actividad privada, así que no lo voy a percibir porque es incompatible�, dijo el senador sin darse cuenta que su frase escondía una falacia.
Massat sostiene que no pedirá los 2700 pesos mensuales que significa el beneficio, porque consiguió trabajo en la actividad privada �porque es incompatible�. De hecho, no lo podría cobrar aunque hubiera conseguido un puesto de portero de un ministerio santafesino, porque el reglamento del Fondo sostiene que �el beneficio es incompatible con cualquier otro ingreso o remuneración, jubilación, pensión, retiro o prestación no contributiva�.
Pero el legislador no se quedó en el simple anuncio de haber conseguido trabajo. Por si acaso, y como para cubrirse por si su argumento no resultó convincente, anunció que la inclusión de su nombre en el listado de solicitudes forma parte de una campaña en su contra: �No sé quién la arma �aseguró� ni qué objetivos concretos tiene, pero viene de septiembre del año pasado. Hay cuestiones políticas porque no tiene sentido que se esté discutiendo una cuestión privada porque estos recursos son personales de los legisladores�, agregó.
El senador, que supo ser el intendente de Villa Ocampo, dijo estar atravesando por una mala racha en lo que respecta a lo económico: �Estoy muy mal. La empresa que tenía con mi esposa en Corrientes quebró�, reconoció durante el reportaje que concedió al programa �Mano a Mano� de la radio santafesina Brigadier López. La empresa a la que hace referencia Massat es Comercial Euroamericana S.R.L., esa que saltó a la fama luego de que una sobrina suya, Silvia Fantín, denunciara que �movilizaba entre 17 y 21 millones a pesar de que sus balances no superaban los 800 mil pesos�. Hoy, el legislador enfrenta una investigación por enriquecimiento ilícito.
Pero hasta tanto llegue el 10 de diciembre, en las oficinas de la comisión bicameral que entiende en el otorgamiento del beneficio, sigue recibiendo solicitudes. Además de las ya publicadas, cuentan con los pedidos de la diputada santacruceña Rita Drisaldi, quien en su currículum acredita las siguientes profesiones: poeta y maestra. Hay un dato más, también es empresaria que se dedica a la actividad comercial, transporte y ganadería, tres ramas que desde le impide acceder al beneficio.
Dos son los frepasistas que lo pidieron. Pablo Fernández y Federico Soñez. El primero, de La Pampa, es abogado y tiene uno de los estudios jurídicos más importantes de la provincia. También integra la lista, la radical de Entre Ríos Isabel García de Cano, una legisladora de bajo perfil que tiene entre sus proyectos, por ejemplo, el auspicio al primer congreso virtual iberoamericano sobre turismo accesible. Hasta aquí los que pidieron el beneficio. También están aquellos que ya lo solicitaron y se lo rechazaron.
Este es el caso del ex senador pampeano Horacio Berhongaray, quien debió abandonar la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, cuando bajo sus narices reaparecieron casos de aftosa a los pocos meses de que el país había sido declarado libre de esa enfermedad. Pues bien, el ex legislador que suele regresar al Congreso para aprovechar el corte gratuito de su escasa cabellera en la peluquería del Senado, solicitó hace poco tiempo el beneficio. Se lo rechazaron. El argumento fue �exceso patrimonial�.
Así como existe el caso de Berhongaray, también hay varios juicios pendientes de resolución a varios ex diputados. El Congreso les exige, a través de la Justicia, la devolución de haberes provenientes de este Fondo a al menos cuatro ex legisaldores. En tanto que hay otros cinco casos que todavía están en el área de Gestión de Cobro del Parlamento. Todos son casos de diputados con mandato cumplido que accedieron al beneficio que, tras conseguir trabajo, continuaron recibiendo la mensualidad, no lo informaron y, mucho menos, devolvieron los 2700 pesos que recibían cada treinta días.
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