Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira
KIOSCO12

GUERRA

ESTALLO UNA REVUELTA CARCELARIA Y FUE BOMBARDEADA POR EE.UU.
Legión Extranjera bañada en sangre

Una fortaleza del siglo XIX en el norte de Afganistán se convirtió ayer en el escenario de una masacre después de que legionarios de Osama bin Laden lanzaran una revuelta armada contra sus carceleros. EE.UU. �que habría iniciado sus aterrizajes en Kandahar� reprimió con bombas.


Prisioneros talibanes rezan ayer las oraciones de la tarde en la prisión de Herat.
Al mismo tiempo, los extranjeros de la prisión fuera de Mazar-i-Sharif se levantaban en armas.

Por Rory McCarthy y Luke Harding
Desde Kabul y los alrededores de Kunduz

Cientos de prisioneros de guerra paquistaníes, árabes y chechenios fueron muertos anoche cuando jets norteamericanos lanzaron ataques aéreos para ayudar a la Alianza del Norte a reprimir un aparente levantamiento carcelario. Mientras las fuerzas talibanas abandonaban su última plaza fuerte del norte en Kunduz, aviones estadounidenses bombardearon un fuerte de muros de barro cocido cerca de la ciudad norteña de Mazar-i-Sharif para sofocar lo que los generales de la Alianza del Norte describieron como un masivo intento de fuga. Y a última hora de ayer informes árabes y afganos no confirmados daban cuenta de los primeros aterrizajes estadounidenses en Kandahar, el foco talibán que resiste al sur.
Al menos 500 prisioneros talibanes tiraron abajo las puertas de sus celdas y trataron de abrirse paso a la libertad con rifles Kalashnikov, ametralladoras y granadas que se las habían arreglado para contrabandear dentro de la prisión, según dijeron testigos oculares. Tomas de un equipo alemán de televisión mostraron guardias en lo alto de los muros de la prisión disparando hacia una aglomeración de prisioneros debajo. Un soldado de las fuerzas especiales norteamericanas fue visto pidiendo ataques aéreos desde un teléfono satelital. �Aquí hay por lo menos cientos de muertos�, reportó. �Fueron todos muertos y muy pocos fueron arrestados�, dijo Zaher Wahadat, un portavoz de la Alianza del Norte.
Algunos prisioneros se hicieron estallar en pedazos para matar a sus guardias de modo que los otros pudieran escapar. Varios escaparon durante la batalla, que duró todo el día, trepando los altos muros de ladrillos de barro de la fortaleza del siglo XIX Qalai-Jhangi, la base de operaciones del señor de la guerra uzbeco, general Rashid Dostum. Fuerzas especiales norteamericanas estaban en el complejo de la fortaleza ayer cuando estalló la revuelta. Después de informes de una baja estadounidense un portavoz del Pentágono anunció que ningún soldado norteamericano estaba desaparecido; sin embargo, voceros militares dijeron que no podían afirmar si ciudadanos norteamericanos de otras agencias, tales como la CIA, habían sido heridos o muertos. El teniente coronel Dan Stoneking dijo que 300 prisioneros habían contrabandeado armas en el complejo y abierto fuego contra soldados de la Alianza del Norte. Otras 40 tropas especiales norteamericanas llegaron al lugar de la escena pero no pudieron entrar debido a lo pesado de los combates. Varios observadores militares norteamericanos estaban en el terreno al momento de producirse los hechos.
�Había un pandemónium general�, dijo Simon Brooks, jefe de operaciones de la Cruz Roja en el norte de Afganistán, quien se encontraba en la prisión en ese momento. Brooks logró escapar trepándose al techo de la prisión. La represión del levantamiento fue inmediatamente posterior a expresiones de preocupación de la Cruz Roja sobre el destino que esperaba a los prisioneros de guerra llevados desde Kunduz.
El ejército norteño de los talibanes estaba esperando anoche para rendirse en una aldea en los suburbios de Kunduz, mientras combatientes de la Alianza del Norte avanzaban dentro de la ciudad desde el este y el oeste. Anoche era confuso qué lado de la Alianza controlaba la mayor parte de la ciudad. El comandante de etnia tajika Mohammad Daud dijo a la Associated Press: �Todo Kunduz está bajo nuestro control�, pero fue imposible confirmar independientemente esta aserción, y se sobreentendía que los talibanes aún controlaban algunos focos de la ciudad. 
Miles de combatientes talibanes acamparon en Chahar Darreh, a ocho kilómetros del centro, después que tropas comandadas por el general Dostum en la línea del frente al oeste de Kunduz les impartieran la orden de no avanzar. Los talibanes se habían propuesto rendirse ayer pero fueron enviados de vuelta cuando el primer convoy se dirigía hacia la línea del frente de las fuerzas opositoras, debido a la luz declinante. Se espera que las tropas empiecen a rendir sus armas hoy, debajo de la montañosalínea del frente opositora en Erganak. Pero anoche había incertidumbre sobre si los talibanes no decidirían en lugar de eso librar una última batalla desafiante después de los cientos de muertos en la fortaleza de Qala-i-Jhangi.
Un convoy talibán de siete jeeps estaba listo para rendirse alrededor de las 5 de la tarde, pero se detuvo. Parece ahora que las tropas del general Dostum decidieron poner un alto a las rendiciones después que se filtraran las noticias de la devastación en Mazar-i-Sharif. Unos pocos voluntarios paquistaníes huyeron de Kunduz ayer por la mañana, y contaron que las oficinas de la ONU en la localidad habían sido saqueadas, y que muchos civiles habían muerto como resultado de los bombardeos estadounidenses. �25 personas han muerto por los bombardeos, incluido mi tío, dijo Abdullah Ahad, un taxista de Kunduz de 26 años.
Un destacamento de vanguardia de la Alianza del Norte entró anoche en Kunduz, pero no era claro si la ciudad era segura. �No hubo combates feroces�, dijo Ashraf Nadeem, un portavoz de la Alianza. Miles de civiles están atrapados y bloqueados de salir por los talibanes. Mientras los combates estallaban en la fortaleza del general Dostum, Burhanuddin Rabbani, líder político de la Alianza, anunciaba en Kabul que los combatientes extranjeros que se rindieran serían bien tratados y entregados a la ONU. 

Claves

500 prisioneros de guerra provenientes en su mayor parte de la �Legión Extranjera� de la red al-Qaida de Osama bin Laden protagonizaron una rebelión armada contra sus carceleros en una fortaleza en el norte afgano. Los carceleros fueron desbordados para reprimir, y pidieron �y obtuvieron� bombardeos aéreos norteamericanos. El resultado fue una masacre.
La audacia y el arrojo de la revuelta pueden verse como un anticipo de lo que espera a las fuerzas de la Alianza del Norte que todavía no han tomado Kunduz, la ciudad de que los prisioneros venían, y donde todavía están atrincherados unos 1400 extranjeros esperando que lleguen sus enemigos.
También puede ser un anticipo de escenarios por venir en el gran foco de resistencia de los talibanes en el sur, la ciudad santa de Kandahar, donde ayer se reportó de fuentes árabes y afganas que habrían empezado los primeros aterrizajes estadounidenses.



UN PERIODISTA DE LA REVISTA �TIME� EN EL LUGAR
El motín en vivo y en directo

�Estoy a menos de 200 metros de la fortaleza donde se rebelaron los talibanes.� Alex Perry, periodista de la revista norteamericana Time, se comunicó ayer con su editor en Estados Unidos por teléfono satelital. Como si fuera un periodista de radio o televisión, Perry contó en vivo y en directo los detalles de la rebelión talibán en Mazar-i-Sharif, que fueron difundidos en la edición on-line de la revista.
Según Perry, los talibanes involucrados en la batalla fueron 800. También había tropas norteamericanas y británicas. �Hay un puñado, son 12. Vinieron en dos jeeps.� Ambos estuvieron colaborando con la represión de la rebelión junto a la Alianza del Norte. �Los británicos están de civil y los norteamericanos de uniforme. Están asesorando a la Alianza del Norte. Los norteamericanos son los que dirigen todo el operativo. Tanto los norteamericanos como los británicos están coordinando los ataques aéreos desde sus posiciones dentro de la fortaleza. Y además están indicando a sus comandantes en qué momento deben dar la orden de atacar. En realidad, de los 12 comandos especiales, hay seis que están luchando en el lado occidental de la fortaleza. Los talibanes se concentraron en el sudoeste del castillo y desde allí están resistiendo. Creo que los norteamericanos van a montar un operativo de rescate si los combates continúan demasiado tiempo.�
De acuerdo con rumores que Perry escuchó en el lugar, �esto forma parte de un plan para rendirse y después intentar tomar la fortaleza por dentro. Es una especulación no confirmada de la Alianza del Norte�. El periodista explicó cómo llegaron los talibanes. �Los talibanes fueron llevados hacia Mazar-i-Sharif. Allí los desarmaron y fueron llevados por la gente de Dostum. Ellos guardaron sus armas, y después fueron llevados en camiones hacia el castillo de Qala-i-Jhangi, en el oeste de Mazar-i-Sharif.�
�¿Cómo fue que comenzó la rebelión?�, preguntó el editor de Perry. �Había algunos guardias de la Alianza del Norte controlando el lugar, pero la verdad eran muy pocos y eran los únicos que tenían las armas. Por una simple superioridad de fuerzas, los talibanes pudieron sorprenderlos. Eso estuvo bastante mal, creo. Y después vimos huir a muchos soldados de la Alianza, alguno de ellos dejaban sus armas�, explicó el periodista.
Respecto de cómo puede ser que los talibanes hayan tomado las armas para sostener la rebelión, Perry dijo: �No sé dónde estaban guardadas las armas. Creo que estaban en el sótano. Pero, en todo caso, lo que hicieron los talibanes fue sacarlas del sótano y además saquearon la parte del sur del fuerte, donde había seis o siete jeeps repletos de municiones. Eso era, de hecho, lo que los norteamericanos estaban tratando de destruir, destruir sus suministros y realizar una gran explosión que hubiera matado a muchos de ellos�. Perry también relató que, increíblemente, la Alianza del Norte no mantenía allí sus armas bajo llave. �Estas personas son muy descuidadas con sus armas. Sólo las dejan sobre la pared o el suelo. Siempre están en sus hombros o colgando de la parte posterior de la silla. Cuando te vas en la mañana, te ponés tus zapatos, tu sombrero y agarrás tu arma.�

 

 

PRINCIPAL