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 La Coordinadora de Trabajadores
de la Cultura manifestó frente al Congreso Nacional para reclamar
por el mantenimiento de los presupuestos originales destinados a los organismos
del área y denunciar “recortes previstos en la ley de Déficit
Cero para el 2002 en el área de la cultura”. Alfredo Alcón
fue el único orador de un acto que convocó, entre otros,
a la Asociación Argentina de Actores, la Asociación de Teatros
Independientes y trabajadores del Instituto Nacional del Teatro, de la
Biblioteca Nacional y del Teatro Colón. En la Plaza de los dos
Congresos, el actor dio lectura a un documento de la Coordinadora: “Así
como no pudo vencernos la dictadura militar, no podrá vencernos
la dictadura económica”, afirmó. “Estamos aquí
para sumarnos al torrente de luchas populares contra el sistema, porque
la denominada libertad de mercado sólo favorece a las minorías
privilegiadas. La hegemonía económica es tan necesaria para
este sistema como lo fue en su época la militarización.
Lo cultural, lo social y lo económico obedecen a los mismos intereses,
por eso hoy nosotros nos instalamos en el mismo campo de lucha que todos
los trabajadores.” Luego del acto, el secretario de Cultura de la
Nación, Darío Lopérfido, realizó declaraciones
sobre el tema. “Creemos en la legitimidad de los reclamos y estamos
en el mismo trabajo, que es preservar presupuestos para cultura. Pero
hay que sumar nuevas ideas, propuestas y buenas leyes, como la de Mecenazgo
(ver aparte), para no quedarnos sólo en el reclamo y tener una
actitud positiva”, concluyó.
Durante la protesta, además de la lectura de adhesiones recibidas
de personalidades de la cultura, integrantes de instituciones educativas
que se verían afectadas por los posibles recortes depositaron sobre
la vereda del Congreso ataúdes en los que pedían “No
maten a la cultura”. “Pedimos que se respeten los presupuestos
originales para cultura debido a que existen instituciones que ya han
sido afectadas por el recorte, algunas en un 80 por ciento”, dijo
Norma Montenegro, integrante de la Coordinadora. En ese sentido, Lopérfido
admitió que hubo recortes de esa magnitud en el último trimestre
del año, aunque agregó que gestiones realizadas por su secretaría
lograron, también, “que se reincorporen partidas en todos
los organismos”. Aseguró además que las distintas dependencias
en el ámbito de la cultura “van a funcionar, porque están
funcionando”, cuando por el tenor de las medidas iniciales “se
suponía que iban a quedar inoperables”. El Teatro Cervantes,
el Instituto del Teatro, la Biblioteca Nacional, el Instituto del Cine
y otros entes dependientes de la Secretaría “funcionan”,
reiteró el secretario. Sobre las perspectivas para diciembre, indicó
que “aún no hay partidas, igual que en el resto de los organismos
públicos”, y remarcó la importancia de que “se
conserven los fondos porque el presupuesto es chico, y si nos quitan (parte
de lo esperado) va a ser muy difícil funcionar”.
La Coordinadora exige el mantenimiento de los presupuestos originales
de todos los organismos de cultura para el año 2001 y la ampliación
para el 2002, sean esos organismos nacionales, provinciales o municipales.
También reclama el cumplimiento de las leyes del Tango, el Teatro,
el Cine, el Doblaje, la Danza y de Ejecutantes Musicales, entre otras,
así como “la urgente sanción de nuevas leyes en defensa
del patrimonio cultural”. Lopérfido aseguró que “no
asistiremos pasivamente al desmantelamiento de nuestros teatros, libros,
museos, cine y todo lo que nuestras leyes garantizaron”. Remarcó
que su “pretensión es la misma” que la de los manifestantes.
“Para el año que viene espero conservar las partidas, mientras
tanto estamos tratando de redoblar la apuesta para superar la crisis”,
expresó el funcionario.
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