Por Julián
Gorodischer
Claudio Villarruel, gerente
de programación de Telefé, opera como una antena parabólica:
atento al mundo, detecta éxitos y los importa, mientras intenta
producir desde la Argentina una televisión que sea vendible en
el exterior. En el 2001, la fórmula de importar ideas o realizaciones
consagró dos productos estelares, algo así como una marca
de gestión exhiben orgulloso. El año próximo, esas
dos revelaciones (Gran Hermano y Betty,
la fea, tal vez los programas que generaron mayor cantidad de comentario
en la historia reciente de la tele), tendrán sus secuelas. Cumplen
con los requisitos que se espera de una programación en tiempo
de crisis: costos controlados y rating seguro. Las crisis siempre
generan oportunidades, y a nosotros experimentar nos dio resultado,
plantea Villaruel. Eso no significa que vivamos en una realidad
diferente a la del resto del país: nos fue bárbaro, pero
no tenemos un peso.
La continuación de Betty se llamará Ecomoda
y encontrará a la fea Pinzón, con una hija.
Su marido, Armando Mendoza, posiblemente infiel, la seguirá mortificando.
Con su clave de comedia más acentuada, la telenovela colombiana
volverá a Telefé, tal vez (si el rating acompaña)
para convivir con Pedro, el escamoso. Este año
logramos reemplazar, con las telenovelas colombianas a los típicos
culebrones mexicanos, de los que estábamos como saturados,
explica Villarruel. Cuenta que, como pasó con el Gran Hermano,
hubo críticas fuertes a la llegada de una lata al horario
central. Pero con el éxito de Betty que superó
los 20 puntos de rating demostramos que no estábamos equivocados,
y que había un margen para tomar decisiones con algo de riesgo,
explica a Página 12.
Gran Hermano, su otro hijo dilecto, fue un producto que empezó
vapuleado por la crítica llegaron a decir, de un programa
que es esencialmente entretenimiento televisivo, que era una experiencia
nazi, recuerda Villaruel y terminó consagrado por la
repercusión, dentro y fuera del mundo Telefé. Cuando
repetimos GH a las 23 horas recuerda, nos dijeron
que en Telefé eso no se podía hacer en un prime time. Y
superamos los 20 puntos. Por eso habrá una tercera parte
de Gran Hermano, pero será en el segundo semestre, por lo que durante
el primero su conductora, Soledad Silveyra, hará la nueva versión
de Chiquititas, luego de la conflictiva salida del canal de
Cris Morena.
Con la importación del formato Gran Hermano (un producto
original de la productora holandesa Endemol), se disparó en la
Argentina el año reality. La TV borró la división
temática entre programas y contaminó su grilla de referencias
a un solo producto invasor. Villarruel dedicó la máxima
inversión del año y sus mejores horarios a un género
que -confiaba- marcaría al 2001 como el año de una transformación.
Ahora lo dejará descansar por seis meses, y lo retomará
con Gran Hermano 3 - La batalla, una continuación con
varios cambios: competencias entre una casa rica (del lujo)
y una pobre (de los argentinos) y un casting que apuntará
a la franja de los 28 a 30 años. Queremos gente con más
historia de vida, explica.
Osvaldo Laport, después del contrato ñoqui más resonante
del 2001, comenzará en enero la tira Franco Buenaventura,
el profe, en la cual será un profesor de tango, en triángulo
amoroso con Carina Zampini y Viviana Saccone. Llegan a Telefé la
marca costumbrista que consagró a Polka, y también algunos
rostros emblemáticos de la usina Suar, como Diego Peretti, Federico
DElía, Alejandro Fiore y Martín Seefeld. Los cuatro
protagonizarán Simuladores. Dice Villarruel que esta
comedia no será un producto popular, sino que responde al canon
del humor francés. Los simuladores, un equipo de falsificadores
profesionales, ayudarán a sus clientes a resolver problemas, fraguando
situaciones o personajes.
En tanto, rostros muy asociables al canal ya aseguraron su presencia para
el 2002. Natalia Oreiro recuperará el horario de las 13 que la
convirtió en Muñeca brava con una nueva tira
en la cual, posiblemente, interpretará a dos hermanas, al mejor
estilo Andrea del Boca en Perlanegra, un clásico del
género. Susana Giménez, otra de las estrellas marca de fábrica
volvería en la segunda mitad del año con el formato de dos
veces por semana. Y se discute, todavía, la frecuencia con la que
saldrá al aire El show de videomatch, que podría,
tal vez, retornar a las emisiones diarias. Eso si se logra convencer a
Tinelli para que abandone su actual tranquilidad de dos programas semanales
de dos horas que, por otras parte, fueron el gran éxito de la temporada
2001 en la televisión nacional.
Villarruel lamenta que su año de éxitos al frente de la
programación coincida con esta crisis terrible de la Argentina.
Repite Nos fue bárbaro, pero no tenemos un mango. Eso es
lo que define este momento en la televisión en particular y en
la Argentina en general. Porque cree en exportar e importar producto
es que fabrica aquí programas que puedan ser explotados afuera
e importa éxitos comprobados. En el 2002, traerá de la cadena
Tele 5, de España, el formato de Crónicas marcianas,
un cuarteto de discutidores alrededor de una mesa, que se emitirá
a la medianoche. En la TV de hoy, esa fórmula abunda, pero no
tan potente, tan fuerte -dice Villarruel-. Hay que elegir a la gente indicada.
El conductor de ese ciclo será Jorge Guinzburg, y uno de los candidatos
a acompañarlo sería el ex Gran Hermano Gastón
Trezeguet, representante del tono que se busca: crispado, bien arriba,
con incontinencia en la verba para generar asombro e interés en
la madrugada.
El enlatado viejo también tiene su encanto para el
programador, que imagina a Cantinflas en las tardes de los sábados,
y defiende la vigencia de Los tres chiflados, que ya empezaron
a probar en las medianoches, por si hiciera falta, que son indestructibles
como producto televisivo. Junto con el comodín Los Simpsons,
estos enlatados cómicos conforman una variante de la misma búsqueda
de bajo costo y repercusión. Nos pasa lo mismo que al país
reconoce Villarruel no tenemos efectivo y no sabemos qué
va a pasar mañana. También el déficit cero
llegó al canal, al cual Telefónica Media no envía
un solo dólar extra porque desaparece. El malabarista
lo sigue intentando: Hay que barajar y dar de nuevo.
Un Popstars
de varones
Como se ve, Telefé incrementará en el 2002 su concentración
de realities... A Gran Hermano - La Batalla y Odisea
Patagonia, se agregará probablemente Popstars
2, un nuevo casting televisado rumbo al grupo pop, pero esta
vez conformado por varones. En Europa, luego del Popstars
de chicas llegó el de chicos, que luego dio lugar a un Popstars
mixto. Para Villarruel, Popstars es un excelente
producto que podría haber estado desde el principio
en Telefé, pero que finalmente salió por Azul por
una cuestión de costos. Comprobada su condición
de programa estrella, ahora lo ve con nuevos ojos. El
casting largaría a comienzos del próximo año.
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En sociedad con Tinelli
Claudio Villarruel explica que Telefé prefiere manejarse
con producciones propias (como las telenovelas Yago
y Luna salvaje, en el 2001) porque tiene los medios
y la infraestructura para hacerlo. Subraya que el 13 apostó
buena parte de su prestigio a la asociación con Polka pera
terminar llamando a Adrián Suar como gerente artístico.
Dice que el 85 por ciento de lo que se ve en pantalla
se hace en el canal y que el resto es de producción independiente.
Ideas del Sur, la productora de Marcelo Tinelli, llevó a
cabo Cuatro amigas, ese mix entre Ally Mc Beal
y Sex and the city que puede verse los lunes a las 23.
El año próximo continuarán las andanzas sentimentales
de Inés Estévez, Paola Krum y compañía.
También con Ideas del Sur, Telefé coproducirá
Odisea Patagonia, el segundo reality del canal, una
travesía de sobrevivencia al estilo Expedición
Robinson, pero en el sur de la Argentina y con desplazamiento
permanente. El casting, para ese reality game show, que se rodará
en enero, ya está en marcha.
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Winona pescada in
fraganti
La famosa actriz estadounidense Winona Ryder fue detenida por
la policía en Beverly Hills, el distrito más exclusivo
de Los Angeles, acusada de haber robado ropa y adornos en un negocio.
Ryder pasó varias horas en una dependencia policial antes
de ser liberada, previo pago de una fianza de 20 mil dólares.
La estrella, que tiene 30 años, fue arrestada en la elegante
tienda Saks Fifth Avenue, luego de que el personal de seguridad
alertara a la policía. Los agentes encontraron varias prendas
y adornos para el cabello por un valor de 4800 dólares en
poder de Ryder, por lo que procedieron a demorarla, acusándola
de hurto. Además, Ryder tenía un analgésico
de prescripción obligatoria, pero no pudo presentar una receta
médica para justificar su posesión. Por lo tanto,
también fue acusada por poseer medicamentos no autorizados.
El abogado de Ryder, Mark Geragos, calificó el incidente
de malentendido. Un portavoz de la policía señaló
que existe un video que muestra a la actriz, dos veces candidata
al Oscar, por Mujercitas y La edad de la inocencia, cuando quita
las etiquetas de la mercadería y las coloca en una gran cartera,
en una inequívoca actitud de hurto. El 11 de enero, Ryder
deberá presentarse ante un juez en Los Angeles, para escuchar
la acusación formal. La policía aseguró que
la actriz, que es una estrella desde que fue descubierta
por el gran público por su actuación en El joven manos
de tijeras, de Tim Burton, se comportó de forma muy
amable y cooperativa mientras estuvo detenida.
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