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Jueves 19 de Julio de 2001

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Control Machete: la conversión cristiana de Fermín y los rumores de separación

He aquí un extraño caso en una banda grande del rock latino del último lustro. El rapper barbado y su nueva religión, su decisión de no cantar más “esas letras”, el silencio de sus compañeros. Los proyectos paralelos de los tres. El anuncio de Toño al No sobre un futuro nuevo disco cerraría cualquier especulación, pero...

POR ROQUE CASCIERO

“Parece que se separó Control Machete, porque Fermín se convirtió a una religión cristiana-evangélica y no quiere cantar más las letras del grupo.” El rumor llegó a fines del año pasado, mientras la canción “Amores perros” (de la película homónima) volvía a poner al trío hip hop de Monterrey en todas las radios y canales de videos. La prensa mexicana nunca se hizo eco de la versión, aunque se trata de una de las bandas más importantes de ese país. Y el silencio de los integrantes del grupo sólo provocó que aumentaran los trascendidos, engañosos o equívocos. Sin embargo, Antonio Toño Hernández, programador y DJ de Control Machete, acaba de anunciarle al No que la banda sigue adelante y que en setiembre comenzará a grabar su tercer disco, con todos sus miembros originales. Aunque no deja de poner ciertos reparos. “Juntos nos decidimos a realizar este trabajo y, por lo pronto, a no pensar en el futuro, en los conciertos o en nada más que en hacer este disco. El tiempo y el resultado obtenido definirá qué pasa después”, declaró.
El rumor que Toño ahora descarta tuvo cierta seriedad. El año pasado, el rapero Fermín IV abrazó una religión cristiana y renegó de su vida pasada. Entonces, afirmó sentirse recuperado, aunque ninguno de sus conocidos se atreviera a afirmar que hasta entonces hubiera llevado una vida de excesos. Además de descubrir su nueva fe, Fermín se casó. Fue en su boda -en la que sólo se sirvieron gaseosas, cuentan– que comenzó a circular la versión de la separación de Control Machete. Aparentemente, el rapero no quería volver a vociferar las viejas canciones del grupo, ni ninguna que tuviera referencias a violencia, alcohol, drogas o sexo. Los rumores se magnificaron por la decisión de Fermín de abandonar San Pedro, el suburbio de Monterrey donde se crió, y mudarse a Cuernavaca, además de salir de gira musical-evangelizadora con artistas cristianos como Yudi, muy conocida en México. Por entonces, también se dijo que Toño y Pato, el otro rapero, harían otro disco como Control Machete sin Fermín, porque le debían uno a su sello.
Más tarde se supo que Fermín Caballero (tal es su nombre completo) trabajaba en un álbum de hip hop con temática religiosa. Bueno, ya lo tiene terminado: lo hizo en Estados Unidos, con la asistencia del famoso percusionista Alex Acuña y el guitarrista Abraham Laboriel, ambos practicantes del mismo culto religioso. El álbum será publicado en breve por Manicomio, el sello independiente –aunque con distribución de la multinacional Universal– que justamente edita a Control Machete. Algunas fuentes consultadas por este suplemento afirman que en México los discos cristianos, que sólo se venden en las ceremonias, suelen superar las treinta mil copias vendidas. El caso del álbum de Fermín será especial, porque también llegará a las disquerías.
Mientras tanto, Pato desarrolló un taller musical llamado Vicio, cuyo primer objetivo fue desempolvar viejos temas de bandas de Monterrey que antecedieron a la movida que lideró Control Machete. Y Toño armó un sello llamado Sones del Mexside, con varias divisiones de acuerdo con los estilos de las bandas que publica (hip hop, punk, trip hop, rock, electrónica). Además, produjo discos, remixó temas y armó un colectivo de DJs y productores llamado Sistema Local, que mezcla “todo lo que tenga groove” con sonidos jamaiquinos y latinos. Y Control Machete en pleno (con la ayuda de Blanquito Man, de King Changó) participó con la canción “Cumbia sobre el río” de un álbum tributo a Celso Piña, un acordeonista “pionero del sonido de cumbia colombiana auténtico y vigente en los barrios de Monterrey”, según Toño.
El DJ y programador, aunque reconoce que su compañero Fermín se hizo cristiano, no ofrece muchas certezas respecto de los rumores. “Lo único que sé es que estaremos trabajando juntos en el disco de Control Machete”, replica. “En setiembre nos meteremos de lleno a realizar el álbum: ahora estamos empezando a desarrollar ideas por separado, para tratar de encontrar el punto de partida exacto para la historia de este disco.Estaremos trabajando los tres juntos y creo que estará interesante lo que saldrá de lo que cada uno trae en la cabeza.” Por lo que se ve, amigos, esta historia continuará. ¿Continuará?