Por
Silvia Schlemenson *
No
todas las madres tienen la disponibilidad social y afectiva para asistir
a su hijo en forma estable, regular y exclusiva durante los valiosos meses
posteriores al nacimiento. Este vínculo, insustituible en la constitución
del psiquismo infantil, no es necesario que quede cubierto con exclusividad
por la madre biológica del niño. Lo importante no es la
prolongación de la herencia de sangre sino el establecimiento de
un lazo de amor que asegure la permanencia de una persona, siempre la
misma, que pueda mimarlo y que se haga cargo de su crianza. Una abuela,
un padre protector, una hermana mayor, una madre de leche, son personas
con representatividad afectiva suficiente. La única condición
para quien sustituya a la madre en el ejercicio de función es que
desee hacerse cargo del niño y tenga un psiquismo lo suficientemente
desarrollado como para entender e interpretar amorosamente sus necesidades.
Cuando por problemas laborales la madre se ve obligada a dejar a su bebé
desde los 45 días en una guardería o jardín maternal,
esa institución debería asegurar la exclusividad y estabilidad
de una persona que tenga a su cargo un máximo de cuatro bebés
y pueda reproducir con cada uno de ellos la estabilidad y la riqueza que
las madres ofertan en los primeros meses del desarrollo del psiquismo.
Alrededor de los dos años se abre para los niños una nueva
oportunidad para la complejización de su psiquismo marcada por
la posibilidad de ingresar a la escuela, institución que ofrenda
a los niños una segunda oportunidad para enriquecer su potencial
simbólico. Sus referentes simbólicos dejan de ser exclusivamente
los adultos y pasan a ser sus compañeros de juego y sus hermanos.
Se hace necesario crear instituciones de pasaje de la realidad familiar
a la social, donde personal docente especializado estimule el juego, abra
la escucha a la narrativa infantil y promueva el intercambio entre los
niños. Estas instituciones de pasaje entre la familia y la escuela
son imprescindibles en el desarrollo del psiquismo infantil. La confianza
y la cercanía de un adulto entrenado en reconocer las necesidades
de los niños, la presencia de otros niños resultan el alimento
psíquico que la sociedad debiera asegurar para activar los procesos
de simbolización desde pequeños.
Actualmente la sociedad sólo prevé guarderías,
espacios donde los niños son depositados y guardados como objetos
para cuidar y no como sujetos con necesidades y derechos. En ellas se
interesan poco por incentivar la curiosidad, el juego o el intercambio
con pares. En cambio el patio de juegos, la disponibilidad de juguetes,
la posibilidad de usarlos en forma irrestricta permiten reforzar la confianza
social necesaria para inscribirse en los nuevos grupos.
Si la dependencia de los familiares como únicos proveedores de
material simbólico y afectivo se prolonga mucho más que
los dos primeros años de vida, sin ninguna mediación secundaria
de hermanos mayores, grupos de niños o instituciones organizadas
para facilitar la salida de la familia, las producciones psíquicas
del niño se reducen. Muchos niños no van al jardín
de infantes hasta que éste no se vuelve obligatorio, a los cinco
años. Los costos de los viajes, la necesidad de una planificación
familiar que incluya horarios ordenados para llevar el niño a la
escuela hacen que algunos padres dejen a sus hijos jugando en casa, con
sus hermanos o mirando televisión. Los niños que permanecen
largas horas en su casa, con televisión, juguetes y hermanos, pero
con escaso contacto social grupal con amigos, escuela o adultos con los
que charlar y divertirse pierden con el tiempo la riqueza simbólica
que recibieron de sus padres.
Una de las primeras preocupaciones para el enriquecimiento psíquico
de un niño es que pueda concurrir, a partir de los dos años,
a la escuela. Para ello, se hace necesario facilitarles a los padres el
traslado. Eltransporte de los niños a la escuela es parte de una
política social necesaria para que la escolarización temprana
de los niños quede asegurada. No todas las experiencias que el
niño atraviesa en el jardín de infantes son gratas, pero
todas, placenteras y sufrientes, motivan cambios en el funcionamiento
psíquico. La ambivalencia entre aceptar o rechazar las novedades
que la escuela impone es vivida por cada niño con tiempos y formas
diferentes, que necesitan respeto en su singularidad elaborativa. Los
primeros momentos de separación requieren la paciencia de los padres.
El efecto traumático sólo se produce si el niño es
abruptamente abandonado por sus padres u obligado a permanecer repentinamente
un número excesivo de horas en ambientes desconocidos.
Cuando los padres pueden, es conveniente que los niños de dos y
tres años no permanezcan en la escuela más de tres a cuatro
horas diarias. Las representaciones espaciales que estos niños
tienen son aún precarias, por lo cual necesitan regresar a ambientes
familiares antes que los niños mayores. Si los niños pequeños
permanecen muchas horas sin sus padres u objetos conocidos, se sienten
invadidos por sentimientos de abandono y la tristeza no les permite disfrutar
lo que la escuela oferta. Extrañar produce sentimientos de desapego
y fuertes tendencias regresivas que inhiben o desactivan un desarrollo
psíquico satisfactorio. De modo que el tiempo de permanencia de
un niño en la escuela está en directa relación con
su posibilidad de imaginar que puede desprenderse de sus padres sin perderlos
definitivamente.
Los niños de 4 o 5 años ya pueden ir a la escuela por períodos
prolongados (doble turno si sus padres trabajan) sin que esto afecte su
actividad psíquica, pues encuentran en la escuela atractivos que
no hay en su casa y porque tienen una autonomía mínima hablan,
entienden razones, anticipan tiempos como para imaginar el regreso
de sus padres sin temor a que desaparezcan. A esta edad, los patrones
simbólicos ya están constituidos y el niño puede
expresar sus necesidades y deseos.
En la escuela, los niños pueden narrar, opinar, contradecir. En
el incremento de sus conocimientos no actúan sólo los adultos
sino también cada uno de los compañeros del grupo al que
el niño se integra. Cada uno de ellos, desde familias distintas,
posicionamientos culturales diferentes y experiencias vitales particulares,
promueve una riqueza simbólica que no siempre la institución
escolar estimula. Muchas veces los docentes creen que ellos son los únicos
operadores de las modificaciones psíquicas de sus alumnos y no
dejan espacio suficiente para el juego y el diálogo entre los niños.
Cuando los docentes se transforman en los únicos interlocutores
válidos en el grupo escolar, más que estimular la actividad
psíquica de sus alumnos, la obturan. En la cotidianidad áulica,
los niños se contraponen entre ellos, discuten, se desacreditan,
se critican. En este extenso movimiento de simbolización comparten
sus experiencias, transmiten historias y trayectos, exhiben entramados
conceptuales diferentes.
Entre los dos y los cinco años, se transita por una realidad psíquica
cargada de magia. Todo es relativo y posible y hay una necesidad muy intensa
de posicionarse subjetivamente y defender sus pareceres como únicos
frente a los compañeros, imponiendo argumentos y teorías
que para los adultos parecen imposibles y que para ellos resultan ser
activadores de imágenes y argumentos. Si se vive la charla, los
chistes y los improperios como desorden, como una molestia, se pierde
la dimensión imaginativa y la riqueza simbólica que estos
lenguajes transmiten y sin quererlo se restringen las producciones psíquicas
de los niños.
Si la escuela uniformiza, da de comer, viste a todos iguales, les habla
en grupo sin ofertar un espacio para la incorporación del sentido
individual y formas que cada niño trae de su casa, se cercenan
la creatividad y la autonomía psíquica de los niños
que allí concurren. Si en los grupos escolares se oferta un espacio
de intercambio dialógico ylúdico suficiente, con tolerancia
a la diferencia, la contraposición cultural y el intercambio, los
procesos de subjetivación se potencian y las posibilidades de despliegue
psíquico se consolidan.
Esta función reflexiva y crítica del discurso propio y del
ajeno se alcanza cuando en forma reiterada un sujeto ha experimentado
que es escuchado y respetado en sus opiniones, cuando puede decir, sin
temor a ser acallado: yo quiero, yo pienso. Esta
autonomía imprescindible para elaborar comportamientos inteligentes,
nuevos, distintos, más apropiados a la situación, es una
larga conquista de complejización del psiquismo que no todos los
humanos alcanzan porque no siempre la sociedad (en nuestro caso la escuela)
y la historia personal de cada niño se lo posibilita.
La preocupación por mejorar las oportunidades para la expansión
psíquica que los docentes promueven en sus alumnos requiere no
sólo de la posibilidad de recibir capacitación acorde a
esta problemática sino de hallar también para ellos en la
institución escolar, un espacio que estimule la reflexión
entre adultos y la expansión de la subjetividad de los docentes.
Actualmente el docente padece, como muchos padres, situaciones de falta
de escucha de parte de sus directivos, con imposiciones curriculares que
restringen su creatividad y lo limitan en su disponibilidad para acompañar
al niño en la expansión de su creatividad.
Las madres cuidadoras o los docentes que tienen un proyecto, que no se
aburren, que encuentran en su trabajo alguna suerte de satisfacción
por lo que realizan, se posicionan frente al niño con una disponibilidad
psíquica que les permite interactuar con él en forma más
permisiva y abrir la escucha para que el hablar, jugar y probar puedan
concretarse sin temores ni sanciones.
* Profesora titular de Psicopedagogía en la Facultad
de Psicología de la UBA. Texto extractado del trabajo inédito
Desarrollo psíquico en niños de 0 a 5 años,
en relación con las Jornadas El proceso de simbolización
y nuevas problemáticas para la clínica psicopedagógica,
que se efectuarán el 18 y el 19 en la Facultad de Psicología
de la UBA.
ALGUNOS
DE LOS SITIOS DE PSICOLOGIA Y PSICOANALISIS EN LA WEB
Crónica de viaje del ciberpsiconauta
Por
Rubén H. Ríos
Navegar por la web convertido en un ciberpsiconauta sin
rumbo fijo puede convertirse en un pasatiempo interminable. Solamente
en lengua española existen muchos sitios muy populares, estéticamente
correctos, y pletóricos de megabytes para todos los gustos. Entre
éstos si se quiere empezar con algo parecido a un orden,
PsicoMundo (www.psiconet.com) es un portal argentino que ofrece una conexión
inagotable con la red a través de los PsicoMundo de varios países
latinoamericanos, además de servicios varios: reportajes a celebridades
del psicoanálisis, foros temáticos, revistas (Acheronta,
Tatuajes sólo en formato digital, La salamandra, Tiempo
-revista de psicogerontología, Fort-Da), y el muy visitado
según Alexa, sitio que acumula estadísticas
www.edupsi.com, que dicta seminarios por la web. Casi todos los portales
y motores de búsqueda de una u otra manera remiten al Psicomundo
argentino o a cualquiera de sus páginas, en especial las de Lacan
y Freud.
Otro sitio que conviene tener en el plan de navegación es la red
psi española, Psinet Ibérica, que se ramifica a un vasto
archipiélago de portales de la península. Cuenta con una
librería on line actualizada y despierta la envidia de cualquier
sitio latinoamericano con dos puntas de lanza: home page gratis y un formidable
buscador especializado que se anuncia como comparable a los superbuscadores
Altavista, HotBot o Lycos.
Sin embargo, un ocultísimo sitio colombiano -www.hbconsultores.
com/psicologiavirtual/contactos-mlcb.html en materia de buscadores
no le va en zaga: ostenta metabuscadores psi una joya en la web
de gran poder, amplios directorios y buscadores orientados hacia Altavista,
Infoseek, Yahoo, Olé, Lycos, Hotbot y Excite. Otro buscador hispano
penetrante lo encontramos en PsicoBot www.psicobank.com/psicobot
que, además de conectar con otros buscadores (y con noticias
de congresos, asociaciones, revistas, sitios de neurociencias, etcétera),
se explaya con un detallado menú de sitios psi indexados por país
de habla hispana.
Hay varios buscadores en español (www.auyantepui.com, www.cibercentro.com,
www.elcano, www.intercom.es/navegador), pero es muy posible que los publicitados
buscadores y metabuscadores nos conduzcan por extraños parajes
del ciberespacio: algunos que brillan melancólicamente como estrellas
sin vida en la gran oscuridad virtual, otros que no se abren ante nuestro
explorador, otros que para entrar nos solicitan descargar software desconocido,
y otros que pequeños asteroides guardan maravillas.
A este rubro pertenece una larga página sin nombre -www.cop.es/colegiados/m02468/index7.html
que despliega sin más un amplio directorio de revistas psi electrónicas
de todo el mundo. O también Psycholinks www.ub.es/personal/
psicoen2.htm, cuyo sistema internacional de links ordenados alfabéticamente
se irradia a lo largo de varias páginas hacia los sitios y megasitios
de organizaciones e instituciones académicas, como a los portales
de grupos muy especializados, muy herméticos o francamente raros.
Al respecto, el portal de la Fundación C. G. Jung de Psicología
Analítica de la República Argentina sorprende al navegante
desprevenido. La página principal exhibe una foto oval como
aquellos viejos cuadros del abuelo, sobre fondo rugoso, de Jung
junto a la Oración de Maimónides, todo lo cual contrasta
vivamente con buena parte del estilo más bien racional del ciberespacio
psi. Ejemplos institucionales de esa estética predominante son
los sitios de la American Psycohoanalytical Association, de la Facultad
de Psicología de la UBA (ambos muy bien posicionados en el ranking
de AlexaSearch) o de la Fundación Descartes -http://descartes.org.ar,
si bien el portal de ésta es un poco más profundo y diversificado
atención analítica, consultas personales, departamentos,
textos, revistas y actividades culturales vinculadas a la institución
de lo que suelen diseñar o sugerir las organizaciones psi en la
maraña de la web. También llama la atención la inclusión
de material humorístico en www.russell.com.ar (llamado así
por Bertrand Russell, en homenaje a su paradoja del supercatálogo),
una librería virtual y servicios bibliográficos que figura
con frecuencia en la ruta de los motores de búsqueda.
Hay muchos sitios que permiten bajar sin cargo textos a la compu y se
destaca un par para añadir a los Favoritos del explorador: www.campopsi.com.ar
(textos on line de diferente procedencia) y www.psicoanalisis.org (biblioteca
virtual de textos psicoanalíticos de Melanie Klein, Sandor Ferenczi,
Lacan, Rank, Reich y otros). Ahora, entre las revistas psi con sitio en
la web o sólo de formato digital siempre según las
estadísticas de Alexa más visitadas desde la constelación
hispana, se encuentran las argentinas Topía (www.topia.com.ar)
y Acheronta (acheronta.org). Ambas ofrecen textos y artículos on
line para bajar a la computadora, como en realidad cualquiera de los portales
y revistas electrónicas del vasto ciberespacio psi.
La alternativa en librerías virtuales se abre en www.sigma.com
que, además de lo previsible links a instituciones, reportajes,
etc., incluye artículos especialmente escritos para el portal,
así como foros de discusión. También un sitio interesante
y con luz propia en el que conviene detenerse para apropiarse de textos
especializados o simplemente husmear es www.psicooncología.org,
orientado a concentrar información integral sobre aspectos psicológicos,
psicopatológicos y psiquiátricos de las enfermedades oncológicas,
que incluye links y servicio de newsletter. Otro tanto ocurre con www.campogrupal.com:
portal dedicado a la psicología social, el psicodrama, análisis
institucional, gestalt, psicoanálisis grupal, terapia familiar,
con biblioteca virtual y enlaces grupales y revistas del campo grupal.
O quizá, para quien navega para saciar su sed de curiosidad, existen
posiblemente pocos textos en la red psi como Breve historia de la
humanidad. Reverbera en www.psyche-navegante.com.ar y lo escribió
Emilio Rodrigué. Vale la pena perderse en la web sólo para
hallarlo.
POSDATA
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Perdón. El perdón: tres perspectivas
filosóficas: Hegel, Arendt, Ricoeur, con Pablo Dreizik
en Centro Psicoanalítico Argentino, desde el 4 a las 18.30.
Descartes, con Paula Castelli, a las 20. 4822-4690.
Literatura. Vecindades entre literatura y psicoanálisis:
angustia, sexualidad femenina y escritura, el 4 a las 19.30
con Osvaldo Arribas en la SADE, Uruguay 1371. Gratuito.
Abuso. Jornada Abuso sexual infantil, el 5 de 9
a 17 en Vicente López 2220. Asociación de Psicólogos
Forenses, 4553-0534.
Género. Seminario interdisciplinario Género,
salud, subjetividad, con Mabel Burin e Irene Meler. Martes de
19 a 22 desde el 8 en UCES. 4815-3290 int. 360.
Sexo. Formación en educación sexual,
con Virginia Martínez Verdier y Gloria Fernández, desde
el 4 en APBA. 4345-7422.
Alimentarios. Trastornos alimentarios en la adolescencia,
con María Isabel Salomón, el 7 de 19 a 20.30 en Biblioteca
del Congreso, Alsina 1835. Ateneo Psicoanalítico. Gratuito.
Violencia. Familia, género y violencia.
Miércoles desde el 9 de mayo de 19 a 21. Fundación Propuesta,
Lanús, 4242-4050. |
Mail
de estas páginas: [email protected]
. Fax: 4334-2330.
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