El mediocampista Ariel Rojas se realizó ayer a la mañana la revisión médica y por la tarde selló su retorno a River con la firma de su contrato, que tendrá dos años y medio de duración. El futbolista de 31 años, quien llega en condición de libre desde Cruz Azul de México, es el segundo refuerzo para el plantel de Marcelo Gallardo, tras el arribo de Carlos Auzqui. “Tengo que conocer a mis compañeros, porque varios no estaban cuando estaba yo. Es un equipo que está integrado, y tengo que adaptarme y dar lo mejor de mí”, señaló Rojas, quien sostuvo que para llegar cedió a River “los derechos federativos y los económicos”.
El ex mediocampista de Vélez y Godoy Cruz, quien ganó cinco títulos con la entidad de Núñez, admitió que “fue difícil despegarse” de la institución al momento de su partida, que se produjo a mediados de 2015, antes de las semifinales de la Copa Libertadores que River al cabo ganó. “No es una revancha, es un nuevo desafío y no quiero ir más allá. Necesito integrarme y agarrar ritmo. Llegar a esa instancia en la Libertadores es difícil”, afirmó.
Sobre su estado, Rojas aseguró: “Estoy para jugar. Vengo entrenando desde diciembre y allá (en México) se disputaron cinco fechas. Obviamente me falta ritmo de partido”. Además, el volante admitió que su retorno al club podría producirse sólo de esta manera, es decir, sin que el club erogue un peso por su pase.”Sabía cómo era. Mi deseo empezó a estar desde diciembre, en el inicio de los entrenamiento en México.Luego se abrió la puerta con el llamado de Marcelo y ahí hice lo necesario para estar acá”, comentó.
Con los arribos de Auzqui y Rojas, y las novelas sin final feliz por Enzo Pérez y Emiliano Rigoni, parecen diluirse las chances de sumar un tercer refuerzo, permitido por la lesión de Denis Rodríguez. Con vistas al futuro, el entrenador, que el fin de semana presenció partidos del campeonato paraguayo, volvería a viajar, en este caso a Chile y Uruguay, para seguir buscando alternativas en cuanto a eventuales incorporaciones.