Desde Santa Fe

 

Ayer terminaron de caer todas las operaciones que pusieron en duda el apoyo de Omar Perotti a la fórmula presidencial del Frente de Todos: Alberto Fernández-CFK. El gobernador electo ratificó ese alineamiento a través de su vocero y amigo. "Nosotros siempre trabajamos por la unidad del peronismo, en Santa Fe dimos un ejemplo de unidad para ganar las elecciones y poder gobernar", dijo el diputado Roberto Mirabella. "Siempre planteamos que íbamos a ser respetuoso y acompañar el proceso de unidad del PJ nacional y la estrategia política que defina el partido. Y eso es lo que vamos a hacer", agregó.

La de Mirabella es palabra autorizada en el equipo de Perotti, tanto que aún no sabe si se muda al Congreso y completa el mandato de su jefe en el Senado de la Nación hasta 2021 o será su ministro de Gobierno a partir del 10 de diciembre, en la Casa Gris. Ayer dijo que el silencio de estos días se justifica. "Omar se tomó un merecido descanso después de lo vertiginoso que fueron los últimos seis meses de campaña y en especial el último mes en el que casi no dormimos", explicó.

Y si Perotti se tomó la semana, Mirabella habló por él y adelantó varias definiciones políticas: dijo que la "transición" con el gobierno de Miguel Lifschitz comenzará después del escrutinio definitivo ("vamos a armar un equipo para llevarla adelante"), pidió que el monitoreo de ese traspaso sea "ordenado" como ocurrió en 2007 cuando Jorge Obeid cedió el gobierno a Hermes Binner.

*La transición. "Vamos a armar un equipo para llevar adelante la transición con el gobierno de Lifschitz", que se extenderá durante seis meses hasta el 10 de diciembre, un plazo sin antecedentes en Santa Fe. "Ojalá que sea de la misma manera como fue la transición del gobierno de Jorge Obeid al de Hermes Binner", en 2007. "¿A qué me refiero? A que aquella fue muy ordenada, consensuada, se acordaron los temas que no debían tocarse hasta que asumiera el gobernador electo" que era Binner. Una transición en la que Obeid dejó en la caja más de 1.500 millones de pesos, según una auditoría que pidió el mismo Binner en esa época. Esperamos que sea una transición de la misma naturaleza", planteó Mirabella.

*Auditoría y asuntos sensibles. Le preguntaron "si Perotti podría pedir una auditoría" del gobierno de Lifschitz, como lo hizo Binner con el de Obeid hace doce años. "Todavía no lo hemos evaluado", contestó el vocero del gobernador electo. Y acerca de asuntos controvertidos como la reprivatización del Banco de Santa Fe hasta 2024, que Lifschitz aún no le adjudicó al grupo Eskenazi, Mirabella planteó: "Vamos a evaluar todos los temas en marcha y todas las cuestiones que tienen el gobierno por delante. Las vamos a analizar para que no esté comprometido el patrimonio del Estado y el próximo gobernador no tenga las manos atadas cuando asuma el 10 de diciembre".

*El gabinete. "Lo van a integrar los mejores hombres y mujeres, sean del Frente Juntos o no, para tener el mejor gobierno", dijo Mirabella. "Desde el día que ganó las elecciones, el gobernador electo dijo que si bien participamos" de una coalición electoral y de gobierno "íbamos a gobernar para todos los santafesinos y santafesinas. Cuando Perotti fue intendente por primera vez en Rafaela (en 1991) armó un equipo en el que había funcionarios que no eran peronistas, eran independientes o venían de otros espacios políticos. Además, en el Frente Juntos somos 14 partidos, con lo cual no se trata de una pertenencia partidaria, sino de tener los mejores hombres y mujeres para gobernar", cerró.