En medio del festival de difusión de escuchas, Mauricio Macri extendió el mandato de los titulares de la oficina encargada de las intervenciones telefónicas. Lo hizo por medio de un decreto de necesidad y urgencia que estableció que los responsables de la Dirección de Captación de Comunicaciones durarán tres años en sus cargos y no uno como hasta ahora.
El director de la oficina a cargo de las intervenciones telefónicas es el camarista Martín Irurzun, un hombre de confianza del presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti. Llegó a ese puesto luego de que Macri sacara esa dependencia de la órbita de la Procuración General de la Nación para dejarla en manos del máximo tribunal. A Irurzun lo secunda Javier Leal Ibarra.
Irurzun fue señalado por Oscar Parrilli como uno de los posibles responsables por la difusión del contenido de sus conversaciones con la ex presidenta Cristina Fernández de Kichner. El ex jefe de la AFI también le apuntó por ello al propio Lorenzetti.
El decreto de Macri que aparece publicado hoy en el Boletín Oficial modifica otro anterior y fundamenta la decisión de extender los mandatos de los responsables de la Dirección de Captación de Comunicaciones en la necesidad de "no poner en riesgo el correcto funcionamiento del área durante una etapa crítica de su desarrollo institucional".
El director y el subdirector tenían hasta aquí mandato por un solo año y no podían volver a desempeñar esa misma función hasta cinco años después de abandonar su cargo. Ahora durarán tres años en su puesto.
Eso no es todo, el nuevo decreto de Macri tiene una particularidad: en su artículo 2 dice que "por única vez, se podrá mantener por el plazo de tres años contados a partir de la publicación del presente, a los jueces que fueran designados por la Corte Suprema de Justicia mediante la Acordada N° 2/2016". Dicho de otro modo, permite que Irurzun y Leal Ibarra estén tres años en funciones cuando en principio se los había nombrado para estar sólo uno.
