El obispo Oscar Ojea, presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), aseguró que el Papa Francisco está pensando en venir a la Argentina si bien no existe todavía una fecha establecida. En declaraciones a la agencia oficial Télam, el obispo de San Isidro afirmó que "hay quienes dicen que el Papa no quiere venir a la Argentina, pero a mí me ha dicho que desea hacerlo y que ya está pensando cuándo". En el mismo sentido se expresó Jorge Lugones, obispo de Lomas de Zamora y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, quien agregó que "el Papa siempre soñó y sigue soñando con la patria grande latinoamericana".
Según Ojea, el Papa le dijo personalmente, en la reciente visita de los obispos argentinos al Vaticano, que "no puede venir en lo inmediato, pero que, tal vez, a fines del 2020 o durante el 2021 ya sería posible que estuviera visitando el país". Para entonces ya se habrá superado la etapa electoral y la asunción del gobierno electo.
En la oportunidad, el Presidente de la CEA se mostró preocupado porque "se lo presente al Papa como partidario de una facción, con un estilo mentiroso que se da muchísimo en algunos medios, y busca ponerlo en una contradicción, una brecha que tiene que ver con no dejarlo ser Papa". La afirmación está vinculada con versiones periodísticas y comentarios en círculos políticos que pretenden hacer aparecer a Jorge Bergoglio involucrado en la lucha electoral argentina y posicionado con una de las fórmulas presidenciales.
Respecto de la posible visita papal y en declaraciones al medio español Religión digital, el obispo Lugones refirió que el Papa "nos dijo que pensó ir a Argentina en 2017, cuando fue a Chile. Pero coincidió que las elecciones eran en diciembre, y lo invitaban para enero. En enero, en Argentina hay vacaciones y es una temporada un poco difícil".
Por ese motivo, siguió diciendo Lugones, "se postergó y se prefirió esperar". Y agregó que hay esperanzas de que Francisco viaje a Argentina próximamente, pero "lo que pasa es que este año todavía tiene cinco viajes más, y el último va a ser a Japón".
En sus declaraciones, Ojea precisó que su manifestación respecto de la posible visita papal "no es un anuncio formal ni tengo una fecha concreta", pero que está claro que "es el deseo del Santo Padre que los argentinos sepamos que él está ya pensando en una visita pastoral" a su país natal. Y agregó que "el mejor camino para preparar una futura vista del Papa al país es escucharlo a él directamente y dejar de estar pendiente de las cosas que se dicen sobre su figura, y de personas que hacen comentarios sobre lo que suponen que él dice, hace o piensa".
El obispo Lugones, quien también estuvo en El Vaticano reunido con Francisco, dijo que "al Papa lo hemos encontrado muy bien, muy lúcido, con muchas ganas y con mucha fuerza". Y agregó que Bergoglio "siempre apostó por un protagonismo del segundo plano, ese caminito espiritual desde lo pequeño, más que desde lo visible".
El presidente de la Comisión de Pastoral Social dijo también que "el Papa siempre soñó y sigue soñando con la patria grande latinoamericana". Y agregó que "todos soñamos con ella, porque sin ella no tenemos salida. Nadie puede con la globalización. Nadie puede darse el lujo de mantenerse solo. Hoy nos unen los vínculos comerciales, y no la fe explícita, la fraternidad, la solidaridad. Tenemos que hermanarnos", sostuvo. Lugones, jesuita como el Papa, agregó que "aunque haya distintos colores políticos, banderías políticas, no podemos dejar de pensar en la patria grande, porque nos parece que es una utopía. Es una utopía que en el tiempo tendrá que realizarse". Y agregó que hay que continuar "aportando a esa pirámide invertida, que dice Francisco: los cambios salen de abajo hacia arriba y no al revés".