Además de autora de historietas, Daniela Ruggeri es editora, gestora cultural y docente. Es una de las cabezas de Panxa Comics, donde experimenta con fanzines, publicaciones y libros-objeto, de su obra y la de otros autores, y organiza la feria Dibujadxs, uno de los eventos de fanzine e historieta independiente más convocantes de Buenos Aires. “Creo que Pibas puede funcionar igual que pasear por los puestos de Dibujadxs: es un recorte de una movida explosiva y ruidosa, que además de conmover, mueve”, se emociona ella, que ayudó a las compiladoras a imprimir y armar la artesanal edición original del libro. Es seguidora de Beto Hernández, las hermanas Brontë, Tintin y Charles Dickens, principales referencias para sus historias, que hablan de la infancia y la memoria, y transcurren en barrios y lugares semi-urbanos. “Concentro esfuerzos narrativos en pensar las niñeces, los ámbitos de las niñeces desplazadas, los rincones donde se desarrollan y sus pequeñas pertenencias”, explica.
Daniela Ruggeri
