Vidas de perros
A fines de los años 80 un caso criminal sacudió Italia. Pietro De Negri, dueño de una guadería canina en Roma, asesinó a su amigo y ex boxeador Giancarlo Ricci. Ambos eran adictos a la cocaína y delincuentes menores. En su confesión, De Negri describió horrendas torturas y mutilaciones que, finalmente, no coincidieron con la autopsia. Pero la leyenda persistió. Y ahora Matteo Garrone, el director de Gomorra, decidió llevar el sangriento y complejo episodio al cine: la película, Dogman, se estrena en los próximos días y construye un relato de amistades tóxicas, dependencias químicas y emocionales y un entorno de masculinidad sobreexcitada, de machos alfa y beta. Una fábula moderna donde la violencia elimina y reemplaza cualquier tipo de humanidad.





















