Desde Santa Fe
El ministro de Gobierno Pablo Farías valoró la sintonía oficial con los gremios y el jefe de ATE, Jorge Hoffmann, le devolvió la gentileza al considerar que el gobernador Miguel Lifschitz está "totalmente abierto al diálogo, tenemos diferencias pero se ponen a arriba de la mesa y se cotejan, y esto es importante". El ministro de Economía, Gonzalo Saglione dijo que la negociación arrancó "con la expectativa de llegar a un acuerdo razonable para ambas partes, que se ajuste a las reales posibilidades de pago de la provincia" y "le permita a los trabajadores del Estado recomponer el poder adquisitivo que se deteriora en el proceso inflacionario".
La discusión arrancó por los números. Hoffmann y su colega de UPCN Jorge Molina plantean que el aumento a los empleados públicos debería recuperar la pérdida salarial de 2016 ‑que los gremios estiman entre el 8 y el 10 por ciento‑ y la proyección inflacionaria de 2017 que calculan entre el 20 y el 25 por ciento. La suma de ambos porcentaje oscila entre el 30 y el 35 por ciento.
El debate seguirá en una semana pero en el interín, una comisión técnica intentará "acercar posiciones". El gobierno sostiene que la inflación de 2016 fue la que estimó el Instituto de Estadística y Censos de la provincia (Ipec): 32,9 por ciento, mientras que los sindicatos plantean que superó el 40 por ciento. Aunque coinciden en un punto: las "dificultades para estimar la inflación de 2017 porque no sabemos qué puede suceder durante el año", dijo Farías.
"Decidimos seguir trabajando en una comisión técnica para analizar los números de la inflación del año pasado y las estimaciones para este año y volver a juntarnos el martes que viene", informó el ministro, aunque aclaró que el gobierno se tomará más tiempo para formalizar una propuesta.
Saglione dijo que la "expectativa" de Lifschitz es "llegar a un acuerdo razonable" que "se ajuste a las reales posibilidades de pago de la provincia" y le permita "a los trabajadores del Estado recomponer su poder adquisitivo" atacado hoy por "el proceso inflacionario".
El líder de ATE elogió la actitud del gobernador en la paritaria, como para marcar distancia con Mauricio Macri. "En Santa Fe, estamos ante un gobierno totalmente abierto al diálogo, con el que tenemos diferencias y la hemos planteados, pero las diferencias se ponen arriba de la mesa y se cotejan", dijo Hoffmann. "Después, está la discusión de los porcentajes (de la inflación de 2016 y de 2017) en los que podemos no estar de acuerdo y ojalá que lo logremos, rápido. Pero es un gobierno con el que tenemos un diálogo leal, que no es para la galería y esto es lo importante".
"Estas reuniones siempre son productivas porque permiten intercambiar puntos de vista y escuchar al otro. Así como uno sale enriquecido al escuchar la versión del gobierno, esperamos que los funcionarios escuchen y tengan en cuenta lo que planteamos desde el mundo del trabajo".
Molina dijo que el "bono extraordinario de fin de año" que Lifschitz otorgó al sector público es un "reconocimiento" de la pérdida salarial de 2016, que estimó entre el 8 y el 10 por ciento. "El bono se dejó de cobrar en enero, por lo tanto tenemos que recomponer esa pérdida que puede ser discutible unos puntos más o menos, pero que existió. Y proyectar la inflación de 2017, que las consultoras privadas estiman entre el 20 y el 25 por ciento. Hay que sumar los dos conceptos: lo que perdimos en 2016 (entre el 8 y el 10 por ciento) y la caída de 2017 (entre el 20 y el 25 por ciento)", cerró Molina.
