El juez Alejo Ramos Padilla tomó este lunes una batería de medidas en la causa que investiga la mega red de espionaje ilegal. En una resolución de diez páginas el magistrado respondió a un requerimiento de información del encargado del sumario de la Procuración contra el fiscal rebelde Carlos Stornelli; aceptó la prórroga solicitada por Daniel Santoro para la indagatoria (ver aparte); ordenó nuevas declaraciones testimoniales --entre ellas a Aníbal Fernández-- se refirió en duros términos a su colega Claudio Bonadio y requirió asistencia administrativa a una universidad de Dolores.
A pedido de Marcelo Retes, el fiscal que instruye el sumario contra Stornelli, el juez comunicó formalmente que ni Stornelli ni su abogado defensor se presentaron al quinto llamado a indagatoria, por lo que ratificó que el funcionario judicial continúa en estado de rebeldía. En otro orden, Ramos Padilla cruzó a su colega Bonadío, quien lo había cuestionado por informarle que tiene la posibilidad de presentarse a indagatoria voluntaria, ya que es uno de los imputados en el expediente. El juez de Comodoro Py le había pedido que detallara la imputación. "Hágasele saber al magistrado que en las presentes actuaciones ha sido formalmente denunciado en dos oportunidades (...) además de que su actuación ha sido objeto de tratamiento por parte del Ministerio Público Fiscal y fue mencionado en diversos testimonios, archivos de audio y documentos digitales que forman parte de la prueba de la causa", respondió Ramos Padilla. Y le recordó que la invitación a que se presente en Dolores forma parte de su derecho a ejercer la defensa: "se trata de otorgarle las más amplias garantías, para que pueda formular en estas actuaciones las aclaraciones que entendiere necesarias a su derecho, participar y controlar la marcha del proceso, como así también sugerir las medidas de prueba que considere oportunas".
Además, Ramos Padilla hizo lugar a una solicitud del fiscal de la causa Juan Pablo Curi y citó a declaración testimonial a Aníbal Fernández. El ex funcionario deberá presentarse el próximo 10 de julio. Según declaró en su momento el fiscal ya procesado Juan Ignacio Bidone, Elisa Carrió y Paula Oliveto le pidieron en varias oportunidades que involucrara al ex candidato a gobernador bonaerense en el triple crimen de General Rodríguez, caso que estuvo a cargo de Bidone durante más de ocho años. Por eso es que Aníbal Fernández pidió ser querellante en la causa de Dolores. Ramos Padilla accedió primero a llamarlo como testigo y aún tiene pendiente definir si lo acepta o no como particular damnificado.
En tanto, Ramos Padilla citó también como testigo al dirigente Roberto Porcaro, para el próximo 11 de julio. La banda de Marcelo D'Alessio quería involucrarlo en una causa de contrabando en el puerto de Quequén. Incluso el falso abogado le hizo un pormenorizado seguimiento con un dron.
Otra testigo llamada por el juez es la secretaria de D´Alessio, Julieta Ciarmiellio. Fue mencionada por el ex espía Rolando Barreiro como la encargada de comprarle los pasajes a Cancún para el fiscal Bidone y su familia --según Barreiro-- como forma de pago por la información sobre las víctimas que Bidone aportaba para las extorsiones. La mujer deberá presentarse el 15 de julio. Otro de los próximos testigos será el abogado de Pablo Moyano, Daniel Llermanos. Es porque la banda de D'Alessio habría presionado al juez Luis Carzoglio para que meta preso al líder de Camioneros.
También el juez volvió a citar a declaración testimonial a José Gómez Centurión para el 12 de julio, quien se ausentó al primer llamado. El ex jefe de la Aduana fue otra de las víctimas de la organización. En el celular del procesado y detenido D'Alessio aparecieron fotos del ex funcionario negacionista de los crímenes de la última dictadura. Además, en el allanamiento a la casa del falso abogado aparecieron documentos que acreditan el seguimiento a Centurión días antes de ser desplazado por una denuncia basada en un anónimo presentada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Por decisión del juez -y a diferencia de otras causas de alto impacto- todo lo que pasa por el juzgado de Dolores es filmado y luego desgrabado. Se trata de una tarea que insume mucho tiempo y trabajo por parte del personal del juzgado, por lo que en la resolución Ramos Padilla le pidió asistencia para esa tarea a estudiantes avanzados de Derecho de la sede de Dolores de la Universidad Atlántida Argentina.