Ya suman una veintena los policías implicados en la causa que investiga el ataque a siete jóvenes en las Cuatro Plazas, el 23 de marzo de 2018. Es que entre lunes y martes hubo una ampliación de las imputaciones a ocho agentes ya implicados, y una docena de policías acusados por primera vez, por hechos de omisión. La fiscal Karina Bartocci (foto) y la querella, representada por el equipo jurídico de APDH, coincidieron en la individualización de todos los agentes que intervinieron en los hechos de apremio y hasta torturas. "Es un paso muy importante el que se dio porque se avanza con seguridad hacia el posible juicio", dijo la abogada querellante Julia Giordano.
El ataque contra les pibes incluyó una brutal escena registrada por una cámara de seguridad, a dos cuadras de las Cuatro Plazas, donde un joven fue atacado por tres policías y hasta le cortaron el pelo. En el inicio de la investigación fueron diez los policías imputados, de los cuales tres quedaron implicados en aquella agresión que para la querella encuadra en torturas.
Ayer se acusó a doce -uno no fue notificado y deberá ir en los próximos días- agentes más. Se trata de los que "se quedaron mirando y no impidieron" la golpiza a uno de los chicos, en Marcos Paz al 6700. Ocho de ellos tuvieron participación en el suceso.
En tanto, los nuevos hechos achacados a los primeros agentes imputados -a quienes les ampliaron la imputación- fueron los que se registraron en la comisaría 14ª, donde la golpiza siguió, tras las detenciones.
"A más de un año del hecho hemos logrado llegar a una coincidencia con la fiscal sobre quiénes son los responsables", dijo Giordano.
El hecho ocurrió cuando las siete víctimas -una de ellas es mujer- fueron a comer al carrito de las Cuatro Plazas, en Mendoza y Provincias Unidas. Alrededor de las 4 de la madrugada un grupo de policías llegó al lugar a los gritos y con armas en las manos. Los jóvenes fueron golpeados y encerrados en la comisaría 14, hasta las 19 del día siguiente.
Seis días después, la fiscal de Violencia Institucional ordenó la detención de los ocho policías involucrados en el ataque, del que participaron 23 móviles policiales en el lugar. "Corrí asustado, pero me vi rodeado de móviles y levanté los brazos, me tiraron, esposaron, golpearon y cortaron las rastas", declaró el año pasado uno de los jóvenes atacados.