Miles de palestinos se manifestaron ayer en Cisjordania ocupada y la Franja de Gaza contra el plan de paz para Oriente Medio patrocinado por el gobierno estadounidense. En Gaza los palestinos protagonizaron, además, una huelga en protesta contra el inicio del foro económico “Paz para la Prosperidad”, que inició ayer en Baréin, donde se discutirá dicho plan.
Unas 3000 personas protestaron en Naplusa, en el norte de Cisjordania, y varias decenas participaron en manifestaciones en Ramala y Hebrón. En la Franja de Gaza, territorio controlado por el movimiento islamista Hamas, se convocó una huelga general, por lo que la mayor parte de locales y restaurantes del enclave permanecieron cerrados.
Con el plan de paz, autopromocionado como el “pacto del siglo”, Washington busca obtener más de 50.000 millones de dólares para los palestinos para grandes proyectos de infraestructuras, educación, turismo y comercio. Los palestinos reconocen su necesidad de apoyo económico, pero para ellos es esencial una solución política al conflicto con Israel. “La única forma de avanzar hacia la paz y la prosperidad es que se honre el derecho a la autodeterminación, la libertad y la independencia a través de la implementación de las resoluciones de la ONU y de la legislación internacional”, afirmó ayer, el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina, Saeb Erekat. “El Plan Económico (de paz) se desvía de una solución política que necesita poner fin a los 52 años de larga ocupación militar israelí y una solución justa a los refugiados palestinos”, aseguró el dirigente.
Según responsables estadounidenses, este plan no mencionará la solución de “dos Estados”, uno israelí y otro palestino, un objetivo defendido por Washington desde hace tiempo. Por ello, el foro en Manama fue boicoteado por la Autoridad Palestina, cuyos representantes no asistieron al encuentro.
En cambio, Washington intenta darle un enfoque económico a la solución del conflicto. “Aceptar una senda económica hacia adelante es una condición previa para resolver las cuestiones políticas sin solución hasta ahora”, afirmó Jared Kushner, el responsable estadounidense para la paz en Oriente Medio, quien además es yerno y asesor del presidente Donald Trump. La promesa a los palestinos se produce después de que Washington congelara más de U$S 500 millones de ayuda, dejara de financiar la Agencia de Naciones Unidos para los Refugiados de Palestina y tomara grandes decisiones a favor de Israel.
