Ford recortará 12.000 empleos de los 53.000 empleos con los que cuenta en toda Europa como consecuencia de la reestructuración que anunció en enero y que supondrá deshacerse de seis de sus plantas en el continente. Alemania será el principal damnificado por el recorte, al tener que asumir 5000 bajas laborales. Le seguirá Reino Unido, con 3100 empleos menos, Rusia, con 2200 personas afectadas por el cierre de tres plantas de producción y el resto de Europa, donde se prevén 1600 afectados. El grueso de ese último grupo lo cubrirá Francia, donde Ford prevé cerrar su planta de fabricación de transmisiones, que afectará a unas 800 personas.