Cristina Fernández de Kirchner pasó por Chaco en el marco de las presentaciones de su libro Sinceramente. La ex presidenta estuvo ante una multitud en Resistencia, acompañada por el escritor y periodista Marcelo Figueras. Durante la presentación estuvieron presentes los dos dirigentes más importantes de la provincia, Domingo Peppo y Jorge Capitanich, enfrentados en una disputa interna por definir quién será el candidato a gobernador. CFK se mantuvo distante de esta situación, al menos durante el la presentación del libro.
Durante su charla, que la llevó adelante junto a Figueras, la ex presidenta deslizó críticas a la situación económica, a la caída del consumo, a la especulación financiera y, como contrapartida, resaltó la figura y el modelo político que llevó adelante Néstor Kirchner. En la presentación Figueras también le dio un pequeño toque político al momento que se vivía al resaltar que la charla se realizó en una ciudad cuyo nombre es parte del ADN de los argentinos: Resistencia.
La multitud se aglutinó tanto adentro del Centro de Convenciones Gala como en sus inmediaciones donde muchos mostraban su ejemplar de Sinceramente en busca de conseguir un autógrafo o una dedicatoria de CFK. Esa emoción y ese reclamo no llegó a desplazar la competencia entre Peppo y Capitanich. En algunos pasajes de la charla y cuando las cámaras enfocaban a los contendientes provinciales, se podía escucha el respaldo sobre todo a Capitanich. Cristina en ningún momento dijo algo al respecto.
En ese sentido, CFK se ajustó al diálogo que suele realizar con Figueras en cada presentación que realizan. De hecho, el escrito ya se convirtió en una especie de socio imprescindible de la charla que encabeza Cristina Kirchner.
Tal vez por la disputa politica que se vive en Chaco es que en esta oportunidad hubo más referencias a lo que relata el libro que señalamientos u opiniones sobre el devenir político actual e incluso sobre su condición de candidata a vicepresidenta de Alberto Fernández por el Frente de Todes.
Cristina ensalzó la figura de Néstor Kirchner al reivindicar su coraje y decisión de salir a competir por la presidencia en 2003 a pesar de que no tenía muchas posibilidades. La actual senadora también habló sobre la controversia en torno a Manuel Belgrano, de quien dijo, cuando presentó Sinceramente en Rosario que “hubiera sido amante” del prócer.
En ese sentido contó que “un buen compañero hizo un comentario muy machirulo” sobre la presunta homosexualidad del creador de la bandera: "Típico comentario de un machirulo cuando una mujer habla bien de otro hombre" y luego se refirió al "bullying" que Dorrego le hacía a Belgrano por su voz aflautada. CFK destacó que estas cosas las cuentas porque es una forma de mostrar a los próceres como realmente eran, gente común como cualquier otra pero que se animaron a participar de la lucha por la independencia.
Eso dio pie para que recordara el episodio de la carta de San Martín a Bernardo de O'Higgins que le obsequiara el presidente Vladimir Putin durante un viaje a Moscú cuando era presidenta. “Pasó lo mismo que con el bastón de Cámpora”, apuntó, respecto del fallo favorable de esta semana. “Me lo dieron en un acto público, no hubo delito”, y señaló entonces que "prefiero quedar en la historia antes que en la tapa de los diarios. Si quedo bien en la historia, todo bien porque de las tapa de los diarios no se acuerda nadie”.
En lo que fue su alusión más directa al presente, Cristina se refirió a las publicidades del Banco Galicia. “¿Se acuerdan de la pareja del Galicia? Ahora ofrecen créditos para pagar sueldos. Antes había créditos para consumo, para vivienda”; y lanzó: “Nadie puede suponer que la gente del Galicia sea peronista o kirchnerista”.
En otro pasaje, habló de Sinceramente y lo definió como “un tributo a Néstor”, y que no se trata de sus memorias porque “para eso falta”. Recordó que cuando conoció al futuro presidente “tenía un aire de mayo del 68, con pelo largo, anteojos cuadrados y vaqueros”, y que su padre no aprobaba la relación. “Ella encontró con quien hablar”, dijo que fue la reflexión de su madre Ofelia, recientemente fallecida, al momento de justificar el noviazgo.
“Néstor tenía vocación de estadista, mucho más que yo. Él buscaba la trascendencia”, dijo, y recordó diciembre de 2001, los días de la breve presidencia de Adolfo Rodríguez Saá. “Con Néstor habíamos hablado ya de probar suerte en 2007 para la presidencia”, rememoró. El efímero presidente citó al entonces gobernador santacruceño. “A la salida de la Rosada, ante los periodistas, los periodistas le preguntaron si sería candidato y él dice que sí. Yo me quedé mirando en la cocina y pensaba: ‘Se volvió loco’”.
Remarcó que no había puesto eso en el libro y manifestó que “él salía a busca la Historia” y que “yo no le tenía mucha fe, no por él, sino por lo que pensábamos y que nunca nos iban a dejar llegar”. En ese sentido recordó que Kirchner y ella habían sido opositores al menemismo en los 90. “Pero llegó, con el 22 por ciento y entró en la Historia. Partió demasiado rápido, la historia es así”, cerró.