A medida que el streaming se afianza como la primera opción en consumos audiovisuales, la sensación se vuelve más y más conocida: ¿cuánto tiempo se invierte en ver películas y series a través de plataformas que empiezan a multiplicarse… y cuánto tiempo se pierde en elegir qué ver? La empresa de medición Nielsen acaba de dar a conocer en Estados Unidos el Total Audience Report correspondiente al primer semestre de 2019, y la “Paradoja de la indecisión” ocupa un lugar central: la multiplicidad de opciones, el gigantesco menú que se despliega ante el espectador está produciendo raros efectos, movimientos típicos de esta era.

Según el informe de Nielsen, el público streamer estadounidense entre 18 y 34 años invierte nada menos que 9,4 minutos en decidir qué ver (repasando trailers, leyendo reseñas, pasando menúes divididos en géneros o agrupados por categorías como “nuevos lanzamientos” o surfeando canales que se ofrecen online), mientras que el target 35-49 se toma 8,4 minutos. Para los mayores de 50, el tiempo se reduce a 5 minutos: pasado ese tiempo, sencillamente se ponen a ver lo primero que se les cruza. Teniendo en cuenta que el 70 por ciento de los hogares de Estados Unidos tienen algún tipo de suscripción a una plataforma on-demand, las cifras bien pueden interpretarse como una sólida tendencia en los consumos televisivos de este tiempo.

El informe Nielsen destaca que el 66 por ciento de los usuarios que abren su servicio de streaming ya tiene decidido qué ver; el 33 por ciento tiene “una vaga idea”, y el 22 por ciento aborda la experiencia sin tener claro qué quiere ver. El dato en el que se concentran los programadores y los equipos dedicados en cada plataforma a “vender” su contenido es lo que sucede en el terreno de ese 55 por ciento de indecisos: entre los 18-34 años, un 35 por ciento decide ver “algo diferente a lo usual” (es decir, lo que el algoritmo suele recomendarles según la experiencia de usuario); el porcentaje cae al 25 por ciento en la franja 35-49. Lo que realmente preocupa a los proveedores de contenido online, sin embargo, está al final de la cuenta. Allí donde un 28 por ciento de los 18-34 y un 26 por ciento de los 35-49 decide… apagar la tele o el dispositivo “y hacer otra cosa”.

Para estos tiempos acelerados, nueve minutos de ver avances, reseñas, descripciones a veces caprichosas, títulos "similares a" o aparrtados "te puede gustar", puede suponer una eternidad insoportable. Siempre y cuando no aparezca un nuevo subgénero de fans: los que, en la ronda de “¿qué viste el fin de semana?” del lunes en el trabajo, respondan “Trailers”.