El diálogo de paz con la guerrilla en Colombia fue el asunto más importante del encuentro que tuvieron ayer en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil los presidentes de Ecuador, Rafael Correa, y su par colombiano, Juan Manuel Santos, en el marco de una reunión ministerial entre ambos países.
La declaración conjunta suscrita por los dos mandatarios al término de la reunión incluye la felicitación de Ecuador al acuerdo con las FARC y el inicio de la etapa posconflicto. Y acompaña las primeras negociaciones entre la segunda guerrilla colombiana, el ELN, y Santos. “El gobierno del Ecuador expresa su total compromiso como país garante para que se desarrollen las negociaciones entre el gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), para lo cual hace votos para una pronta y exitosa conclusión”, agregó otro de los puntos de la declaración.
Por su parte, Colombia agradeció a su vecino por su hospitalidad, generosidad y organización del inicio de las negociaciones con el ELN.
En la declaración de Guayaquil se hace referencia a la marcha de los temas de interés fronterizo como la seguridad y defensa, tópico en el que se ratificó la lucha coordinada contra la delincuencia internacional. La reunión de efectuó en las instalaciones del Parque Histórico, un sitio de recreación y convenciones de este puerto ecuatoriano. Se repasaron acuerdos sobre infraestructura y conectividad, asuntos ambientales, sociales y culturales, económicos y comerciales. “Reafirmamos, una vez más, nuestra profunda voluntad política de fortalecer la integración binacional, con miras a desarrollar esfuerzos conjuntos que favorezcan al bienestar común de nuestros pueblos, especialmente de la Zona de Integración Fronteriza”, dice la declaración.
Posteriormente, Santos y Correa dialogaron con periodistas y sobre el tema de los supuestos sobornos de la empresa Odebrecht que afectan a doce países, entre ellos Colombia y Ecuador. Santos, sobre quien pesaba una denuncia de haber recibido dinero de la transnacional brasileña para su campaña, señaló que el autor de la denuncia se habría retractado, por lo que “más claro no canta un gallo, los hechos hablan por sí solos, yo no tengo que decir nada más”. Correa, quien está llegando al final de su mandato, dijo que en su país “prácticamente se desconoce el caso Odebrecht” y aseguró que se está a la espera del listado de los involucrados para poder sancionar con todo el rigor de la ley.
Santos reiteró ayer su agradecimiento por el respaldo al proceso de paz que ha prestado Correa. “Muchas gracias por todo el apoyo que nos ha venido dando, apoyo en el proceso de paz. Su generosidad, su visión, su compromiso con la paz de la región y la paz de Colombia es algo que nunca olvidaremos”, dijo Santos al llegar a Guayaquil (suroeste) para reunirse con su colega ecuatoriano. De su lado, Correa apuntó que es un honor recibir al Premio Nobel de la Paz, reconocimiento que dijo es “muy merecido por ser el artífice de la paz en su querida Colombia y en la región”. “La historia no es que sabrá recoger, ya recoge tu visión, tu esfuerzo, tu entrega y tú sabes que cuentas con nosotros”, indicó Correa al recordar: “Ecuador es facilitador y garante de esta mesa de negociación. Ojalá tenga un éxito rotundo y se selle integralmente la paz en nuestra querida Colombia”, comentó Correa sobre el diálogo entre el gobierno colombiano y el ELN. Acompañaron a los gobernantes los cancilleres de ambos países y la mayoría de los integrantes de ambos gabinetes. La siguiente reunión presidencial se efectuará en territorio colombiano.