El gobierno venezolano entregó dos notas de protesta al encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos en Caracas, Lee McClenny, tras las sanciones que impuso Washington al vicepresidente Tareck El Aissami por narcotráfico, confirmó ayer la canciller, Delcy Rodríguez.
Una misiva rechaza las “medidas unilaterales y extraterritoriales contra Venezuela’’ y otra exige “respeto a una alta autoridad mediante las redes sociales de la embajada de Estados Unidos en Venezuela’’, explicó Rodríguez en una rueda de prensa ante medios internacionales. Los documentos fueron consignados la noche del martes por la funcionaria durante una reunión con McClenny.
El Departamento del Tesoro acusa a El Aissami –vicepresidente desde el 4 enero– de facilitar, proteger y supervisar el envío de droga desde Venezuela hacia México y Estados Unidos mientras se desempeñaba como ministro de Interior (2008-2012) y gobernador del estado de Aragua (2012-2017). Por ello ordenó congelar los bienes que puedan poseer en Estados Unidos el funcionario y el empresario Samark José López Bello, a quien señala como testaferro del funcionario. También prohibió a ciudadanos y empresas de ese país hacer negocios con ellos.
Rodríguez acusó a la Embajada estadounidense de comportarse “más como una maquinaria de guerra que como una misión diplomática’’ y aseguró que McClenny tiene “un amplio repertorio de acciones injerencistas y de apoyo directo a sectores violentos en Venezuela’’. Estados Unidos y Venezuela carecen de embajadores desde 2010.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, exigió el martes al gobierno estadounidense que se retractara y ofreciera disculpas públicas a El Aissami. “Es una agresión que Venezuela responderá paso a paso con equilibrio y contundencia’’, declaró el gobernante socialista en cadena de radio y televisión. Caracas sostiene que durante la gestión de El Aissami como ministro, las autoridades venezolanas capturaron a 102 capos de la droga y 21 fueron extraditados a Estados Unidos. El gobierno de Maduro ha acusado reiteradas veces a Washington de alentar, fomentar y apoyar distintos intentos de golpes de Esstado, acusaciones que Washington ha rechazado. el predecesor de Trump, Barack Obama, sancionó a Venezuela por violaciones en derechos humanos a fines del 2015, en el mismo mes en que inició un acercamiento histórico con Cuba.