El Ejército de Liberación Nacional y el gobierno de Juan Manuel Santos celebraron los avances de la primera semana de negociaciones con un comunicado en el que trazaron los próximos pasos. Desde Quito, aseguraron que hubo “una actitud constructiva” entre ambas partes y anunciaron la creación de dos “submesas” que trabajarán para alcanzar la ansiada "paz completa" en el país.
“Las delegaciones del gobierno y el ELN hemos trabajado desde el 8 de febrero en un marco de entendimiento y con una actitud constructiva que nos ha llevado al primer acuerdo”, señala el documento que leyeron Pablo Beltrán, el negociador por el grupo armado, y Juan Camilo Restrepo, representante del Gobierno. Según el comunicado, la primera decisión conjunta será establecer una “submesa” para determinar los métodos de participación social de los guerrilleros desmovilizados y otra para acciones humanitarias, dos cuestiones fundamentales para el ELN, que tiene una menor capacidad operativa que las Farc pero tiene un profundo trabajo social en las zonas que controla. El Gobierno, por su parte, se propone que el grupo guerrillero renuncie al secuestro como método de presión política.
Beltrán destacó que el primer comunicado conjunto es un reflejo de que pese a las diferencias hay “compromiso por la paz” de ambas partes. Restrepo, por su parte, afirmó que los diálogos están comenzando con “buen ánimo”. "Lo ideal es generar condiciones propicias para poder llegar a un cese del fuego bilateral”.
Hasta ahora, Brasil, Cuba, Chile, Ecuador, Noruega y Venezuela figuran como garantes del proceso pero no se descarta que se podrían sumar Alemania, Holanda, Suiza, Italia y Suecia.
Ambos negociadores, sin embargo, soslayaron referirse al atentado del miércoles a la noche en la vía Villavicencio-Bogotá, en el que cuatro soldados resultaron heridos. Beltrán aclaró que no era materia de diálogo en la mesa. “Nosotros no hemos hecho pronunciamientos sobre eso pero el Gobierno sí. Y no es nuestra costumbre quejarnos cada vez que recibimos un ataque de las fuerzas del Estado porque esas son las reglas del juego. La mesa está ocupada en otras cosas”, declaró.
Restrepo, a su vez, señaló que los comentarios sobre cualquier hecho de carácter terrorista o que lesionen los derechos humanos de civiles los harán las Fuerzas Militares, aunque sentenció que "repudiamos los asesinatos de líderes civiles y defensores de derechos humanos (...) El propio Presidente censuró esos atentados y ordenó acciones juzgar a los actores materiales e intelectuales identificandos”.