Ahogados por la crisis económica y con la mirada puesta en las elecciones, los trabajadores de la autogestión buscan cerrar filas para darse un programa y presentarlo ante los candidatos presidenciales. Cooperativas de trabajo, empresas recuperadas, emprendimientos nacidos de la economía popular y cooperativistas de los programas sociales se están reuniendo en el Hotel Bauen para armar una propuesta de políticas que reconozcan al sector y su capacidad de generar empleo. Con este objetivo, preparan un encuentro de cooperativas de todo el país para el 27 de julio.
"No sirve que nos pongan mil pesos más en una tarjeta, ni queremos volver a los planes sociales: necesitamos políticas de Estado que valoren el trabajo autogestivo. Nuestro lugar es otro que ser beneficiarios de una política asistencial", resumió sobre la movida Joaquín Fernández Sancha, presidente de la Red Textil Cooperativa (CNCT).
Una decena de organizaciones terminaron de consensuar su primer documento, en el que denuncian la "crisis profunda" generada "en la economía y la sociedad argentina" por el modelo de exclusión del macrismo. El planteo remarca que que los males dejados por la gestión de Cambiemos no desaparecerán con su eventual salida de la Rosada. El marco de un capitalismo neoliberal global pondrá límites a las mejores intenciones del gobierno que venga. "Lo que planteamos es que no solamente son necesarias medidas inmediatas para salir de la situación catastrófica en que estamos ahora. Si el próximo gobierno sólo tomara medidas de tipo palitativas o de restitución de lo perdido -como el programa de trabajo autogestionado, o la adecuación de las tarifas a costos razonables-, no nos sacaría de la crisis. La idea de todos los sectores que nos estamos juntando, que son la absoluta mayoría de las organizaciones, es que se debe considerar a las cooperativas de trabajo como una parte de la economía. Un sector que genera empleo, que ocupa a muchas personas, personas que deben ser consideradas trabajadores. El paquete que pedimos es reconocer a los cooperativistas como trabajadores con derechos laborales y derecho a la seguridad social, solucionar los problemas legales que tienen las cooperativas de trabajo para funcionar, habilitar a las nuevas fábricas que cierran a que sean recuperadas, tener mecanismos de financiamiento... debemos ser considerados como actores que aportan y mucho a la economía nacional", indicó Andrés Ruggeri, del Programa Facultad Abierta.
El proceso viene desde el año pasado, cuando algunas federaciones empezaron a discutir las líneas que debería tener un programa para fortalecer el sector. Los últimos encuentros -en parte precipitados por la nueva amenaza de desalojo contra el Hotel Bauen- consiguieron niveles de adhesión fuertes. A la última reunión fueron trabajadores de las cooperativas de Facta, del Movimiento Popular La Dignidad (de la CTEP), la Federacion de Cooperativas, la CTA de los Trabajadores, la Red Gráfica Cooperativa, la Red Textil Cooperativa, las cooperativas de la CTA Autónoma, de la Fetraes, el Movimiento de Trabajadores Excluídos, la CNCT, la Federación Gráfica Bonaerense, el Sindicato de Curtidores, el Frente Darío Santillán, la Red de Cooperativas Sociales, el Frente Social Peronista, Gestara, Fecotraun, la Red Nacional de Cartoneros y la Federación de Cooperativas Autogestionadas de la Ciudad de Buenos Aires.
"El sector del trabajo organizado bajo los criterios de la autogestión es parte del movimiento obrero y como tal, de la fuerza fundamental de la economía", señalaron en el documento. Como esbozo del programa, además de los puntos mencionados por Ruggeri (el reconocimiento de los cooperativistas como trabajadores con derechos laborales y seguridad social, ley de cooperativas que elimine las restricciones vigentes, una legislación que facilite la constitución de empresas recuperadas), aparece también el reclamo de que el Estado compre parte de sus insumos y destine parte de la obra pública a la economía popular. Otra propuesta es la creación de almacenes y mercados populares para disputar la formación de precios en los bienes de consumo básico.
El Foro nacional de cooperativas se realizará la partir de las 10 de la mañana del sábado 27 de julio, en el club Ferro Carril Oeste de la Ciudad de Buenos Aires.
El Hotel Bauen, en riesgo
Los trabajadores del Hotel Bauen siguen en una situación de riesgo. El plazo de siete días hábiles fijado por la jueza Paula Hualde venció sin que se firmara un acuerdo con Mercoteles S. A., que reclama el hotel cerrado en 2001 y reabierto por la cooperativa hace ya 16 años. Así, el expediente judicial volvió a quedar más cerca la posibilidad de una orden de desalojo.
Una campaña en las redes sociales multiplicó en la semana los apoyos a la experiencia de recuperación del hotel, que hoy -además de dar alojamiento turístico- es el lugar donde desarrollan sus actividades otras cooperativas, como la redacción de La Garganta Poderosa y la Revista Cítrica, un almacén de productos de los emprendimientos de La Dignidad y la cooperativa teatral El Descubridor.
El hotel fue cerrado por sus dueños en 2001 y recuperado en 2003 por sus trabajadores. En 2007 la orden de desalojo quedó firme. La cooperativa atravesó en los años siguientes todas las instancias de apelación. En 2017, la Cámara estableció que Mercoteles debía darles a los trabajadores 15 millones de pesos por las inversiones que realizaron en sus 16 años de gestión, aunque la cooperativa lo rechazó por insuficiente, ya que consideran superiores las mejoras en el edificio y la valorización de la marca. El edificio fue expropiado por una ley del Congreso Nacional, vetada por el presidente Mauricio Macri. El Congreso tiene pendiente el tratamiento de un nuevo proyecto de expropiación, presentado por Agustín Rossi, mientras que los trabajadores llevaron una petición a la Comisión Internacional de Derechos Humanos, en defensa de su derecho al trabajo.