Serán 48 horas vertiginosas en el que el Gobierno volverá a mostrar a la Argentina alineada con la política internacional de los Estados Unidos. El presidente Mauricio Macri ratificó públicamente que va a “declarar a Hezbollah como grupo terrorista” a través de un decreto, en vísperas de cumplirse el 18 de abril 25 años de la voladura de la mutual judía AMIA que provocó 85 muertes y dejó más de 300 heridos. Todo coincidirá con la fugaz visita del secretario de Estado estadounidense, Michael “Mike” Pompeo, que llegará a Buenos Aires un día después, el 19 de abril, para presidir la "Segunda Conferencia Ministerial Hemisférica de Lucha contra el Terrorismo", que se realizará en el Palacio San Martín y de la que participarán cancilleres y “especialistas en contraterrorismo” de América Latina, que respaldarán la propuesta estadounidense e israelí de declarar “terrorista” a Hezbollah. Allí también habrá un encuentro con las actuales autoridades de la AMIA, donde Pompeo será uno de los disertantes junto al canciller argentino Jorge Faurie. En tanto, el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, confirmó que el Gobierno avanzará en la creación de un registro de personas y entidades vinculadas al terrorismo y su financiamiento.
“Estamos avanzando para declarar a Hezbollah como grupo terrorista. Reiteramos el rechazo al terrorismo y a cualquier organización que ejerza la violencia en esos términos”, señaló Macri durante una entrevista concedida a la cadena CNN en Español. Otra muestra que “el regreso al mundo” que pregona Macri va atado del alineamiento con la política exterior de Donald Trump, cuyo anhelo –en sintonía con Israel— es expandir la condena internacional como “terrorista” de la organización islámica creada en Líbano en 1982 como parte de la resistencia a la invasión israelí.
El decreto de Macri coincidirá con los 25 años del ataque a la mutual judía –donde la dilatada investigación judicial apunta a la responsabilidad de Hezbollah-- y la “conferencia hemisférica contra el terrorismo” de la que participará Mike Pompeo. Dos puntos que se encargó de atar el propio secretario de Trump cuando durante la primera reunión “hemisférica contra el terrorismo” en Washington, comprometió a la Argentina, a través del secretario de Seguridad Gerardo Milman, a organizar el segundo encuentro en el marco del 25 aniversario de la voladura de la AMIA. El documento sellado allí, manifiesta la “preocupación por la presencia de redes de Hezbollah en la región y su participación en actividades ilícitas y terroristas”, además de asegurar que “Isis y Al-Qaeda representan una amenaza para nuestra seguridad colectiva”.
Desde el Palacio San Martín se expresaron en los mimos términos: “En el marco de la conmemoración del 25º aniversario del atentado a la AMIA, la Argentina será sede de la ‘Segunda Conferencia Ministerial Hemisférica de Lucha contra el Terrorismo’ que se realizará el 19 de julio”, expresa el comunicado de la Cancillería.
Por la mañana, antes del comienzo formal del encuentro, está pautada una visita de las autoridades de los países asistentes a la sede de la AMIA, donde hablarán sus autoridades, Faurie y Pompeo. Por la tarde, al finalizar la reunió y la elaboración de un documentos conjunto, el secretario estadounidense ofrecería una rueda de prensa en la Cancillería antes de emprender el regreso a Washington.
Pero la declaración de “terrorista” a Hezbollah no sería el único decreto de Macri. Avruj sostuvo que el gobierno también avanzará en la lucha antiterrorista con la creación de un registro público de "todas aquellas personas que están vinculadas de alguna manera con el lavado de dinero, vinculaciones políticas, de poder ser incluidas en función de tal y, a través del trabajo judicial, poder ir contra ellas". "Acá en Argentina, como denunció en su momento el embajador de Israel, se puede enarbolar la bandera del Hezbollah, se lo puede financiar y acompañar sin ningún tipo de problema", agregó el secretario.