Argentina se convertirá en el primer país de la región en contar con un centro de protonterapia, que estará operativo para el 2022. Esta terapia demostró ser beneficiosa para tratar tumores pediátricos y reducir la exposición de la radiación en tejidos sanos. El proyecto, con una inversión de 80 millones de dólares, fue presentado en la UBA.
El Centro Argentino de Protonterapia (Cearp) "será el primero en América latina y pondrá a la Argentina y a sus instituciones de salud en lugar de preponderancia en la región como institución de referencia", destacó Marcelo Vázquez, profesor de la Universidad de Ciencias de la Salud de Loma Linda, en Estados Unidos, el primer centro en el mundo que usó este tipo de tratamientos en un hospital, en 1990.
"Hace años se ha demostrado que el tratamiento con protones para el cáncer tiene una utilidad significativa por la posibilidad de controlar la radiación de forma más precisa que los tratamientos convencionales, como los rayos X o los gamma", explicó Vázquez, y agregó que actualmente hay alrededor de "80 centros" de este tipo en el mundo.
Con la protonterapia, "cuando los pacientes pediátricos tienen que ser irradiados de tumores en el cerebro, por ejemplo, se puede controlar la dosis de radiación al máximo en el lugar del tumor y minimizar la dosis que está alrededor, que son tejidos sanos", destacó Vázquez. Otro ejemplo de los beneficios de esta terapia, continuó el especialista, está enfocado en los tumores de próstata y abdominal.
El Cearp será construido en terrenos pertenecientes a la UBA, vecinos al Instituto de Oncología Ángel H. Roffo, cercano también a la Fundación Centro de Diagnóstico Nuclear (FCDN), "formando, así, un polo oncológico integral de avanzada para la lucha contra el cáncer", describió Gustavo Santa Cruz, gerente de Investigación y Desarrollo en Aplicaciones Nucleares a la Salud de la CNEA.