El merendero de Pellegrini y Felipe Moré experimentó en los últimos días una mayor demanda; pero también, la falta de insumos que ponen en riesgo su continuidad. Quienes lo sostienen plantearon que necesitan de la ayuda de todos los que puedan colaborar. Luciana es una de las mamás que tuvo la idea y que junto con otras puso en marcha este espacio. "Nos comentábamos a la salida de la escuela que no teníamos una cosa u otra entonces se nos ocurrió juntar un poco cada una lo que tenía y empezamos", relató. "Yo tenía este lugar y gracias a algunas cosas prestadas como la garrafa pudimos empezar, ahora lo más difícil es mantenerlo", explicó Luciana en relación a la merienda que sirven dos veces por semana para un centenar de niños y niñas del barrio que se acercan por la merienda. "Al principio poníamos nosotras, pero se está haciendo más complicado, vienen entre 70 y 100 chicos, va variando y a veces no tenemos". Los vecinos, en tanto, están agradecidos y destacan la labor de las mamás solidarias. "Nos ayudamos entre todos", dice; pero les falta leche, harina y demás.