Un agente de la Policía de Bahía Blanca asesinó a balazos a su padre, también miembro de la fuerza, cuando intervino en una pelea que mantenía con su esposa, tras lo cual se pegó un tiro en la cabeza y quedó gravemente herido.
El crimen sucedió en una casa dividida en dos partes: en una, vivían Martín Cané, su esposa, Dayana Contreras, y la beba de 5 meses de ambos; en otra, los padres de la mujer. Contreras contó que su marido estaba de franco, y que por la tarde comenzaron a discutir acerca de qué película ver. “Fue una pelea entre nosotros, un intercambio tonto por una película pero él se dio vuelta y me dio una trompada, era la primera vez que lo hacía y por eso le dije a mi mamá”, relató Contreras a la prensa local. Diana, su madre, llamó a los padres del policía para que intervinieran. Instantes después llegaron a la casa el teniente Gustavo Cané, efectivo de la seccional cuarta de Bahía Banca, y su esposa.
Cané comenzó a discutir violentamente con su padre, que le advirtió: “Vos hasta acá llegaste, mañana dejás de ser policía”. Luego, el hombre se dispuso a salir de la casa, momento en que su hijo le apuntó con el arma reglamentaria y le efectuó varios disparos. El teniente cayó muerto en el umbral, de al menos un balazo en el torso. Instantes después, Cané usó la misma arma para dispararse en la sien derecha. Anoche permanecía internado en el hospital local, en gravísimo estado.