Finalmente hoy se develó otra de las razones de la premura de la administración de Mauricio Macri en declarar al movimiento libanés Hezbollah como “organización terrorista ”. El gobierno de Estados Unidos sacó debajo de su manga una acusación formal contra un líder de ese movimiento libanés, Salman Raouf Salman, como autor intelectual del atentado contra la AMIA, del que ayer se cumplieron 25 años.
El anuncio de la identificación del supuesto responsable del ataque ocurrido en 1994 fue hecho mientras se desarrolla en la ciudad de Buenos Aires la cumbre antiterrorista el pomposamente promocionada por el gobierno de Cambiemos y a la que asiste el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo.
Además de la identificación de Salman Raouf Salman, el Departamento de Estado informó que se ofrece una recompensa de 7 millones de dólares por información sobre su paradero, y el Tesoro norteamericano anunció el congelamiento de todos los activos del sospechoso.
La sanción consiste en una prohibición para realizar transacciones en el sistema financiero estadounidense en su nombre o en el de Hezbollá. Y según Sigal Mandelker, subsecretaria del Tesoro a cargo de la lucha contra el terrorismo, Salman "coordinó un ataque devastador en Buenos Aires, Argentina, contra el centro judío más grande de Sudamérica hace 25 años y desde entonces ha dirigido operaciones terroristas en el Hemisferio Occidental para Hezbollá".
Mandelker afirmó que el gobierno de Donald Trump "continuará atacando a los terroristas de Hezbolla que planean operaciones terroríficas y asesinan indiscriminadamente a civiles inocentes en nombre de este grupo violento y sus patrocinadores iraníes".
Según Washington, Salman sigue siendo "una amenaza". "Esto se evidencia particularmente en su papel directo en un reciente plan terrorista contra civiles inocentes en Chile y Perú, que fue interrumpido con éxito por los servicios de seguridad", dijo la funcionaria a través de un comunicado.
Los cañones contra la organización libanesa se activaron durante los últimos días, cuando el presidente Mauricio Macri calificó de “terrorista” a ese movimiento que también es un partido político en la República del Líbano. La condena formal ocurrió ayer, cuando a través de un decreto se creó el Registro Público de Personas o Entidades Vinculadas a Actos de Terrorismo (Repet), que incluye a Hezbollah entre sus listas.
La medida tuvo el visto bueno de la Asociación de Mutuales Israelitas Argentina (AMIA), cuyo presidente, Ariel Eichbaum, durante el acto de homenaje de ayer, celebró la creación del registro y ratificó su acusación contra la organización islámica y la República de Irán como los culpables de la voladura del edificio de la calle Pasteur.
El corolario de la condena llegó esta mañana desde Washington y tuvo eco público en Buenos Aires en momentos en que Mike Pompeo y el canciller argentino Jorge Faurie visitaran la sede de la AMIA, en el barrio de Once, y fueran recibidos por las máximas autoridades de esa entidad, entre ellos Eichbaum.