La condena a 22 años de cárcel por corrupción de menores a Cristian Aldana representa el fin de la naturalización de los abusos en el rock. Y es otro peldaño de una era que comenzó en 2016, cuando Mailén Frías denunció por violación a Miguel del Pópolo, de La ola que quería ser chau. A partir de ahí, nada sería igual para los varones que, escudados tras su condición de ídolos, acosan, abusan y violan. Tampoco para las mujeres y disidencias porque, ante el avance, no hay forma de volver atrás. Tres años también pasaron de la provocación del ex cantante de El Otro Yo, cuando aún protegido bajo el velo del patriarcado y vestido de monja, el mismo disfraz que usaba en las Fiestas Perversas en épocas del Fotolog, irrumpió en la primera marcha del #YaNoNosCallamosMas y, junto a su compañera Guillermina Bolig, acusaron de feminazis a las manifestantes. El músico y su compañera pedían “verdad y justicia”. Este 12 de julio finalizó el juicio contra Aldana, que llevó más de un año, aunque las primeras denuncias fueron en 2011. “No soy culpable de lo que me acusan. No soy un violador, no soy un abusador y no soy un violento. Ellas no pueden sostener sus miradas conmigo y decirme lo contrario. Yo quiero el careo, que me miren a los ojos y me digan si las violenté”, reclamó el también ex presidente de la Unión de Músicos Independientes (UMI), y luego se despachó con un pasaje de la Biblia.

Esa verdad y esa justicia que pedía Aldana vestido de monja son palabras que también usa la periodista y sobreviviente de abuso Alelí Acuña Barrenechea en una carta abierta a la UMI y al Instituto Nacional de la Música (Inamu). Allí les reclama a esas instituciones que hagan pública su postura frente al caso: “Así como las sobrevivientes no se callan más, es importante que estos espacios también quiebren con décadas de silenciamiento, porque se ha demostrado con nitidez que la palabra no dicha y la inacción en estos casos es una forma de complicidad”. En la misma carta, que está siendo compartida en redes y sumando firmas en Change.org, Acuña Barrenechea le pregunta a Diego Boris, presidente del Inamu, si retirará la denuncia contra Ariell Carolina Luján, una de las denunciantes de Aldana.

 

Difundir: Carta abierta a Unión de Músicxs Independientes e INAMU - Instituto Nacional de la Música por los abusos...

Posted by Alelí Alegría Cuba on Saturday, July 13, 2019

La UMI se expresó dos días después con un comunicado emitido en Facebook en el que repudia y condena “enérgicamente toda acción que implique el abuso, la manipulación, el ultraje, el desprecio y cualquier tipo de violencia machista ejercida contra la mujer por su condición de género, sea quien sea quien haya realizado dichos actos”. También expresa: “Como organización de músicxs independientes, acompañamos las acciones y reivindicaciones que planteen un cambio de paradigma y busquen visibilizar la grave problemática que atravesamos como sociedad al respecto de la violencia de género”. Sin embargo, el texto obvia destacar el precedente que sentó la condena justamente a su ex presidente por corrupción y abuso de menores.

Esta mañana, y a siete días de la condena al músico, el Inamu emitió su propio comunicado, en el que reafirma “el compromiso permanente por erradicar conductas patriarcales naturalizadas durante décadas en la actividad musical argentina”. Sin embargo, tampoco dice nada acerca de retirar la denuncia de Boris, presidente del organismo, contra una de las querellantes. ¿No sería una “práctica patriarcal” denunciar a quien acusa al condenado por abuso sexual?

En redes también se manifestaron las mujeres, lesbianas, trans, travestis y no binaries de Músicxs Unidxs de CABA (Mucaba), convocando a acompañarles en la lectura del veredicto contra Aldana y luego celebrando la sentencia histórica y exigiendo que Boris retire la denuncia contra Ariell.

 

Mañana Viernes a las 11hs en el TOC N27 de la calle Paraguay 1536 (CABA) finalmente se leerá la sentencia en el caso...

Posted by Músicxs Unidxs en CABA on Thursday, July 11, 2019

Múltiples músicas exhibieron su posición, como Patricia Pietrafesa, que llamó a acompañar la lectura del veredicto: “Quienes puedan ir a acompañar a estxs pibxs que fueron abusadxs y manipuladxs y cambiaron la historia rompiendo el silencio iniciando un movimiento arrollador. Basta de abusadores violadores manipuladores en el rock underground punk kumbia garage o donde sea!”. Y luego, tras la sentencia, completó: “Nunca creí ver dar vuelta la lógica que teníamos naturalizada, la mierda de las situaciones machistas, patriarcales y de poder en los ámbitos donde nos movíamos. Gracias”.

En su cuenta de Facebook, la cantautora Carolina Pacheco había exigido la condena a Cristian Aldana y pedido que se retiren las demandas contra Ariell. “Hoy finalizaron los alegatos en el caso de público conocimiento seguido contra Cristian Aldana, cantante de El Otro Yo, por los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante y corrupción de menores. Las querellas solicitaron penas de entre 20 y 40 años de prisión, mientras que el Fiscal solicitó 35. Acompañamos a las víctimas en su búsqueda de justicia y exigimos: ¡condena a Cristian Aldana ya! Por otra parte, Ariell Carolina Luján, una de las denunciantes, fue demandada por Diego Boris, actual director del Inamu, que consideró perjudicada su imagen en el relato que ella hace de uno de los últimos episodios de violencia. La demandó civil y penalmente por calumnias e injurias y en la audiencia previa de conciliación le exigió 200 mil pesos y que se retracte de sus dichos. La estrategia de la contradenuncia presentada contra quienes han denunciado situaciones de violencia intenta mantener en la oscuridad sus relatos y revictimiza a lxs denunciantes. Esto dificulta sus posibilidades de atravesar la situación vivida y perpetúa el silencio sobre las situaciones de extrema violencia, que hoy se han convertido en un asunto de interés público. Ante ello decimos YA NO NOS CALLAMOS MÁS y exigimos que en lo inmediato se retire la demanda contra Ariell Carolina Luján”.

El feminismo está legitimado, no se retrae, sino que se ramifica en cada ámbito. ¿Podemos decir que la cultura de la violación está retrocediendo? Podemos decir que ante los abusos de integrantes de bandas de rock públicamente conocidos, no nos callamos más. Decimos, también, que las pibas se organizaron y las redes sociales, sumadas al encuentro, funcionan como una trama de contención y de denuncia. Y aunque el patriarcado se resiste temeroso de perder sus privilegios, cuando se avanza, no hay forma de volver atrás.

 

 

 

DIEGO BORIS, ACTUAL.PRESIDENTE DEL INAMU, NO ME RESPRESENTA! #YANONOSCALLAMOSMAS

Posted by Julia Molinari on Friday, July 12, 2019