A más de cuatro meses de la condena a 48 años de prisión contra un abusador serial que se hacía pasar por policía y atacó a 18 mujeres, mañana se conocerá si el fallo queda firme en la Cámara Penal. Ya en el juicio oral y público, las víctimas y sus familiares exigieron una "condena ejemplar" para el locutor Luis Marcelo Escobar, que en primera instancia fue sentenciado por los hechos cometidos entre 2014 y 2016, contra chicas de entre 14 y 25 años. El agresor sexual tiene 42 años y vivía en la ciudad de San Nicolás (Buenos Aires), antes de ser detenido por la policía. Cuando intentó defenderse de las acusaciones de la fiscal Carla Cerliani, sobre el final del juicio de febrero pasado, Escobar alegó que había sido abusado sexualmente en su niñez y que eso habría determinado su conducta posterior. En tanto, en la audiencia de Cámara, en mayo, negó haber reconocido los hechos. Ahora, con el fin de la feria judicial, el tribunal conformado por Georgina Depetris, Javier Beltramone y Bibiana Alonso deberá resolver si confirma la pena. "No hay una condena con monto similar en la provincia", dijo la fiscal en su momento.
El acusado mantuvo en vilo a la ciudad y a la Fiscalía de Delitos contra la Integridad Sexual, durante meses. Desde los primeros abusos denunciados se advirtió un mismo accionar, un patrón común en cada hecho -como el que se conoció en el caso de otro abusador (ver recuadro) detenido el viernes-. Escobar era descripto por las víctimas como un hombre bajo, vestido con prendas oscuras, que decía ser policía de drogas y andaba con un handy. En la vía pública, interceptaba a las mujeres para decirles que estaba en una investigación y que testigos las habían señalado como acusadas. Con esa presentación les decía que lo tendrían que acompañar a la comisaría para averiguar sus antecedentes o que declaren. De esa manera las hacía subir a un vehículo -no solía usar siempre el mismo- y las llevaba a lugares descampados, donde las sometía, incluso, con un arma como elemento de amenaza, en 13 de los casos.
Tras el juicio que se realizó en febrero pasado, el tribunal de primera instancia conformado por Mariano Aliau, María Isabel Mas Varela y Patricia Bilotta habló de prueba "abrumadora" contra el acusado; y destacó "los valientes y detallados relatos" de las jóvenes atacadas, a quienes el acusado abordaba en la calle como un supuesto policía y les advertía que estaban acusadas por venta de droga, con un ardid casi calcado. "No solo el modus operandi era el mismo, sino también el vocabulario empleado", destacó el fallo condenatorio de marzo sobre el testimonio de las jóvenes.
La detención de Escobar se logró luego de que una de las víctimas, una chica de 14 años, se animara a mirar hacia atrás al bajar del auto del agresor. Tomó el número de patente y luego lo llevó a la Justicia. El atacante fue detenido en agosto de 2016, en la localidad de Soldini, cuando circulaba en el mismo auto con su familia.
En la audiencia de mayo pasado, en la Cámara Penal, su defensa pidió que la pena sea reducida a 20 años, por considerar que la dictada es "cruel, inhumana y degradante"; mientras que la fiscal Cerliani reclamó que se ratifique, ante las "secuelas irreparables" que causó en las jóvenes.