En la jornada del TC 2000 que ayer se corrió en el autódromo Juan Manuel Fangio, y que ganó el entrerriano Exequiel Bastidas con Peugeot 408, ocurrió un singular incidente con un piloto que terminó detenido por resistencia a la autoridad. Se trata del cordobés Mario Baldo, de la categoría Rally Cross. Por la mañana quiso salir del predio automovilístico por la calle García del Cossio con su DS3, que usa para competir en esa categoría secundaria. Y cuando los agentes de Tránsito lo frenaron, Baldo amenazó con atropellarlos. La discusión derivó en una gresca con los inspectores, empleados del circuito y policías. En conclusión, el auto terminó en el corralón y el piloto, demorado en la subcomisaría 21ª, donde se le abrió la causa penal. Baldo, de 48 años, es empresario agropecuario en Jesús María, Córdoba, y en 2013 fue condenado como miembro de una banda que contrabandeó marihuana desde Paraguay.