En la localidad bonaerense de 9 de Julio ABSA también suministraba agua con alto contenido de arsénico. La Corte Suprema de Justicia de la Nación estableció en 2014 que estaba “en juego el derecho humano de acceso al agua potable, la salud y la vida” y mantuvo la medida cautelar de suministrar agua potable a la población. También patrocinado por el abogado Fernando Cabaleiro, de Naturaleza de Derechos, 9 de Julio cuenta con planta de ósmosis inversa. La semana pasada se inauguró una planta similar en Chivilcoy, también mediante una demanda contra la empresa ABSA. El abogado remarcó que plantearon la necesidad de que la Autoridad del Agua (ADA) controle en toda la provincia la presencia de los agrotóxicos (que se utilizan en la actualidad) en el agua de consumo.