La actividad económica en Rosario continúa acumulando caídas significativas. Según el informe divulgado ayer por el Centro de Información Económica (CIE) de la Municipalidad de Rosario, el Indicador Mensual de Facturación correspondiente al mes de mayo registró una caída del 7% respecto del mismo mes del año anterior. La mayor se observó en el sector industrial (12,9%), seguido por comercio (5,8%), construcción (5,4%) y servicios privados (5,3%). Con los datos de mayo, la facturación de los locales habilitados en la ciudad suma nueve meses consecutivos de caídas.  No obstante, el trabajo reveló que en la comparación con abril de este año, se observa un aumento del 2,2% en el indicador desestacionalizado. Pero los números provisorios de junio muestran una caída del 12,2% a valores constantes, respecto al mismo mes del año pasado. "Vemos que los comparativos interanuales siguen siendo complicados y preocupantes, y también vemos este crecimiento en relación a abril, que lo tomamos como una consecuencia del proceso de estabilización del tipo de cambio y una leve contención de la inflación, lo que nos deja expectantes", dijo el secretario de Producción municipal, Germán Giró.

El Indicador Mensual de Facturación es elaborado por el CIE y se calcula en base a la facturación total a valores constantes de los locales habilitados en la ciudad. El del mes de mayo arrojó una caída interanual del 7 por ciento. Por otro lado, el comportamiento del acumulado enero-mayo 2019 arrojó una caída del 7,7% respecto al mismo período del año anterior.

Vehículos y equipo de transporte (-26,7%) fue el rubro de la industria manufacturera que tuvo la mayor caída en la facturación, seguida por textiles, confecciones y cuero (-21,5%). En el sector comercio, en tanto, la venta, mantenimiento y reparación de vehículos (-25,5%) fue el rubro que más cayó. Los servicios inmobiliarios, empresariales y de alquiler (-11,6%) estuvieron al tope de la caída en el sector servicios privados.

Consultado por el aumento del 2,2 por ciento en el indicador desestacionalizado de mayo al compararlo con el mes anterior, Giró explicó que el cálculo surge utilizando la misma metodología que usa el Indec. "Observamos que en relación al proceso inflacionario, que sigue siendo alto y que no se ha detenido, en abril y mayo tuvieron una leve baja. Creemos que esa estabilización del incremento de la inflación tiene que ver con una serie de políticas de coyuntura y electorales", apuntó.

"Y si tomamos los datos del Estimador Mensual de la Actividad Económica (Emae) a nivel nacional que el Indec publicó el pasado jueves, mayo tiene un crecimiento contra el mismo mes del año pasado del 2,6, y un crecimiento en relación a abril del 0,2. Lo que ocurre es que en mayo del 2018 la economía argentina tuvo su momento más crítico, la cosecha fue muy mala, la devaluación del casi el 100 por ciento, y el acuerdo con el FMI. Con esto, la Argentina quiebra 12 meses consecutivos de caídas interanuales, y a partir de ahora los comparativos van a hacer contra meses muy malos, por eso es probable que comience a notarse una mejoría interanual", agregó. 

Además, Giró dijo que la economía rosarina tardó unos meses en entrar en una fase más recesiva. "Nosotros todavía estamos comparando contra meses que fueron relativamente buenos", explicó. "Faltan resolver temas estructurales muy profundos para poder hablar de una mejora significativa de la economía, estamos en un período de inestabilidad, no está definido un proceso de crecimiento ni mucho menos", planteó el funcionario municipal.

Para atenuar las consecuencias de la recesión, desde el municipio continúan impulsando algunas medidas paliativas.