Daniel Pelegrina tomó el micrófono esta mañana en la apertura de la Exposición de la Sociedad Rural, antes de cederle la palabra a Mauricio Macri, y se llevó una sorpresa de la que recién pudo tomar nota completamente luego del acto. Mientras el titular de la SRA comenzaba su discurso, comenzaron a desplegarse dos pancartas de la ONG Greenpeace contra del desmonte.
"Ganaderos, basta de desmonte" y "Destruir bosques es un crimen", se leía en letras negras sobre fondo amarillo y con el logo de la ONG ambientalista en los carteles que flanquearon a Pelegrina durante unos segundos, hasta que algunas personas se abalanzaron a quitarlos.
La escena tuvo la espectacularidad de lo cinematográfico. Los carteles se fueron desplegando suavemente desde dos soportes con forma de rodillo montados en los parantes del palco oficial, seguramente accionados por control remoto. Una imagen que no hubiera desentonado en alguna de las entregas de Misión Imposible. Resulta evidente que la organización ecologista se las arregló para colocar los soportes con anticipación, y que ellos no fueron detectados por ninguno de los encargados de la seguridad del acto. Ni los cuerpos oficiales ni los que responden a la Sociedad Rural.
La acción sorprendió a todos, en una semana en la que la Rural ya fue escenario de otro hecho comentado: la acción de los veganos, que fueron corridos de la pista central a rebencazos por los "gauchos".
El domingo 28 de julio, un grupo de defensores de los derechos de los animales irrumpieron en el escenario principal de la Exposición Rural de Palermo para denunciar el maltrato animal. Unas cuarenta personas, aproximadamente, ingresaron al centro de la pista donde los productores exponían a sus ejemplares con carteles amarillos para pedir “Basta de matar animales”, entre otras consignas. Los gauchos respondieron a la protesta da manera violenta: los corrieron con caballos y los amenazaron con facones. La protesta se realizó durante una ceremonia de premiación y duró apenas unos minutos porque fue violentamente reprimida .
Greenpeace explicó su sorpresiva acción en las redes sociales. La ONG planteó que intervino el acto en el predio de Palermo "para denunciar que la ganadería intensiva está destruyendo los bosques". La ONG sostiene que el 80% de la deforestación en Argentina se concentra en Santiago del Estero, Salta, Chaco y Formosa, donde se perdieron 113.000 hectáreas el año pasado, y responsabiliza por el daño a a la "expansión descontrolada de la industria ganadera". También alerta que la masiva destrucción de bosques acelera el peligro de extinción de los yaguaretés del Gran Chaco.