Con un pedido de pena de siete años de prisión, seguirá en prisión domiciliaria el vicedirector de la escuela bilingüe Nº 1380 Roberto Fontanarrosa. Javier B., de 44 años, fue detenido en junio pasado y la fiscal Nora Marull le achacó dos hechos de abuso sexual simple contra una joven asistente de cocina de la institución, ubicada en Pasaje 1816 y Circunvalación. Ayer, con nuevo abogado, el acusado intentó la libertad, pero para el juez Pablo Pinto los elementos acercados son "testimonios de concepto", que no alcanzan como contrapeso del testimonio de la víctima y otros elementos presentados como evidencia de cargo. El 19 de septiembre se realizará la audiencia preliminar al juicio oral y público. La defensa planteó que la denuncia estuvo relacionada con una cuestión de elecciones gremiales.

El junio pasado, Marull le atribuyó dos hechos a B., contra la víctima de 24 años: "Haber abusado sexualmente de la joven, el 30 de mayo, en horas de la mañana. Su accionar consistió en acercarse por detrás, bajarle la cabeza a la fuerza, besarla en la cabeza y pasarle la mano por los pechos; mientras con la otra le tocaba la espalda hasta llegar a la cola. Pasados 30 minutos, estando ambos en la oficina del imputado, donde se guardaban elementos de limpieza, haber realizado sonidos obscenos, tipo gemidos y tomarla de la cintura para preguntarle si tenía novio o estaba casada. Se acercó a la joven de una clara manera intimidatoria hasta quedar cerca de su cara", leyó sobre el primer suceso. La defensa dijo ayer que en ese hecho, la palabra "fuerza" no fue descripta por la víctima.

El otro, fue cometido el mismo día de la detención. "La agarró a la fuerza de la mano, obligándola a ir al baño, mientras le decía '¿vos tenés 24 años? Yo te voy a enseñar a besar'. Haberla besado contra su voluntad, mientras ella le decía que por favor se detuviera. Luego llevó la mano de la mujer a su pene, que estaba fuera del pantalón y de su ropa interior; obligándola a tocarlo. La situación se extendió hasta que el imputado escuchó la voz de una compañera de trabajo".

Para la fiscal, el caso es "grave", ya que se trata de una relación desigual de poder y porque la víctima es una mujer. También tuvo en cuenta que el hecho se cometió cuando "no había nadie en el lugar"; y consideró que el acusado lo hizo "abusando de su situación de superioridad", como dijo en la primera audiencia.

Frente a ello, presentó acusación por el delito de abuso sexual simple en concurso real, por los dos hechos, y pidió pena de siete años de prisión. El defensor protestó porque antes de esa presentación estaba por cerrarse un juicio abreviado. Sin embargo, no se llegó a esa instancia por el cambio de defensa.